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Una mayor ingesta de comida ultraprocesada puede aumentar hasta en un 50 por ciento el riesgo de ansiedad y otros trastornos mentales, señala un artículo publicado hoy en la revista British Medical Journal (BMJ). Según esta indagación, las pizzas industriales, muchas salsas, los aperitivos salados o los fiambres se encuentran en este grupo que cada vez se consume más e incrementa también los peligros de padecer a edades tempranas enfermedades no transmisibles como trastornos cardiovasculares y diabetes tipo 2. ‘Entre los artículos revisados, publicados en los últimos tres años y que, si se suman sus participantes, incluyen a casi 10 millones de personas, los autores encuentran ‘pruebas convincentes’ de que, a mayores ingestas de esas comidas, el riesgo de morir por enfermedad cardiovascular sube en un 50 por ciento, y un 21 el incremento de obesidad o problemas de sueño y un 22 por ciento más de depresión’, detalla el informe.
Otro estudio de los mismos autores de este más reciente en BJM indicaba ya que el riesgo de depresión se dispara cuando los ultraprocesados superan el 30 por ciento de la dieta diaria de una persona, además de potencial una mala salud gastrointestinal. Las evidencias con respecto a dichos ‘alimentos’ sugieren que son menos nutritivos y empeoran la dieta de quienes los toman pues, además de aportar demasiada sal, grasa o azúcar, dejan menos espacio en el estómago a otras comidas como las frutas, que contienen compuestos beneficiosos: los polifenoles o los fitoestrógenos. ‘También contienen menos fibra y proteínas, y concentran más calorías en menos cantidad.
Esta combinación puede favorecer el desarrollo de enfermedades crónicas que surgen por inflamación crónica o cambios en la microbiota’, revelaron los expertos Melissa Lane y Wolfgang Max, de la Universidad Deakin, en Australia, líderes de la indagación. Para sustentar mejor y a más largo plazo sus evidencias, estos especialistas proponen a la comunidad científica mundial hacer estudios a corto plazo para probar los efectos de los ultraprocesados, midiendo cambios en el peso, en la resistencia a la insulina, en la microbiota o en los niveles de inflamación.
29 febrero 2024 | Fuente: Prensa Latina| Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A
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Descubren que un metabolito microbiano intestinal induce hiperreactividad plaquetaria conduciendo así a la formación de trombosis en covid-19.
Desde el inicio de la pandemia por covid-19, la comunidad científica observó una relación entre el desarrollo de trombosis -principal causa de muerte y discapacidad después sufrir eventos cardiovasculares graves como infarto de miocardio, accidente cerebrovascular isquémico y embolia pulmonar-, y la infección originada por el virus SARS-CoV-2; una asociación que en los últimos años ha sido objeto de numerosas investigaciones.
El descubrimiento, publicado en la revista Cell Metabolism y llevada a cabo por investigadores de la Universidad de Guangdong, en China. Uno de los mecanismos de la propensión a la trombosis en covid-19. Este se originaría a través de un metabolito bacteriano del microbioma intestinal, denominado 2-metilbutirilcarnitina (2MBC) que al acumularse induce hiperreactividad plaquetaria y formación de trombos.
Como conclusiones, el equipo, dirigido por Kang Huang, del Centro de Innovación Traslacional de Inmunología de Precisión de Nanhai, de la Universidad de Guangdong, China, señala que 2MBC es un cometabolito que une la disbiosis y la trombosis de la microbiota intestinal. «La acumulación de 2MBC conduce a un mayor riesgo trombótico. 2MBC se une directamente a la integrina α2β1 y potencia la hiperreactividad plaquetaria, por lo que la inhibición de la integrina α2β1 mejoraría el mayor riesgo trombótico inducido por 2MBC».
Hiperreactividad plaquetaria, en el centro de la acción
La hiperreactividad plaquetaria es uno de los factores más importantes que contribuyen a la formación de trombos y a la isquemia diseminada. La evidencia acumulada de datos de numerosos trabajos ha documentado una respuesta funcional hiperreactiva en las plaquetas en numerosas patologías como diabetes, obesidad, hiperlipidemia, hipertensión o infección viral.
Otro ejemplo claro ha sido la covid-19, enfermedad que ha producido un fuerte aumento de los eventos trombóticos. «En particular, la hiperreactividad de las plaquetas y su carga trombótica aumentada asociada no sólo estuvieron presentes durante la fase aguda de la infección, sino que también permanecieron en los pacientes incluso después de la eliminación del virus, destacando que las vías no clásicas y no reveladas, que son distintas del ataque viral o reacción inflamatoria aguda, podrían estar implicadas en la regulación de la actividad plaquetaria. Así, los estudios en pacientes con coviv-19 parecen útiles para identificar nuevos mecanismos que contribuyen a la trombosis».
La investigación partió del hecho de que los mecanismos subyacentes siguen siendo poco conocidos, pero el estudio indica que la 2-metilbutirilcarnitina (2MBC), una acilcarnitina de cadena ramificada, se acumula en pacientes con covid-19 y en pacientes con eventos cardiovasculares graves. «2MBC mejora la hiperreactividad plaquetaria y la formación de trombos en ratones. Mecánicamente, 2MBC se une a la integrina α2β1 en las plaquetas, potenciando la activación de la fosfolipasa A2 citosólica (cPLA2) y la hiperreactividad plaquetaria».
En el trabajo, el equipo también sugiere que el agotamiento genético o la inhibición farmacológica de la integrina α2β1 revierte, en gran medida, los efectos protrombóticos de 2MBC. «En particular, 2MBC se puede generar de una manera dependiente del microbiota intestinal, mientras que la acumulación de 2MBC en plasma y su efecto agravante de la trombosis mejoran en gran medida después del agotamiento microbiano inducido por antibióticos», explica Sifan Chen, investigador de la citada universidad y firmante del trabajo.
Dado que la alteración del microbiota intestinal puede contribuir a las complicaciones agudas y a largo plazo de la covid-19, los investigadores plantearon la hipótesis de que el microbiota intestinal puede afectar el riesgo trombótico en la infección por coronavirus del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2).
Para probar esto, se pretrató a ratones transgénicos ACE2 (hACE2) humanizados (con reemplazo de ACE2 endógeno de ratón) con un cóctel de antibióticos, ofreciendo los resultados que se detallan en el trabajo. «Nuestro estudio implica al 2MBC como un metabolito que vincula la disbiosis de la microbiota intestinal con un riesgo trombótico elevado, proporcionando información mecanicista y una posible estrategia terapéutica para la trombosis», concluye Huang.
Ver artículo: Huang K, Li Z, He X, Dai J, Huang B, Shi Y, et al. Gut microbial co-metabolite 2-methylbutyrylcarnitine exacerbates thrombosis via binding to and activating integrin α2β1. Cell Metabolism[Internet].2024[citado 1 mar 2024]. https://doi.org/10.1016/j.cmet.2024.01.014
01 marzo 2024| Fuente: Diario Médico| Tomado de | Especialidades| Microbiología y Enfermedades Infecciosas
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Las personas con síndrome de ovario poliquístico (SOP) pueden tener más probabilidades de tener problemas de memoria y pensamiento en la mediana edad. La investigación realizada por científicos de la Universidad de California (EE.UU.) y publicada en la revista Neurology.
En el estudio participaron 907 mujeres que tenían entre 18 y 30 años al inicio de la investigación. Fueron seguidos durante 30 años, momento en el que completaron pruebas para medir la memoria, las habilidades verbales, la velocidad de procesamiento y la atención. En el momento de la prueba, 66 participantes tenían SOP. En una prueba para medir la atención, los participantes observaron una lista de palabras de diferentes colores y se les pidió que indicaran el color de la tinta en lugar de leer la palabra real. Por ejemplo, la palabra «azul» podría aparecer en rojo, por lo que la respuesta correcta sería roja. Los investigadores encontraron que, para esta prueba, las personas con SOP presentaban una puntuación media un 11% más baja respecto a las personas sin SOP.
Después de ajustar por edad, raza y educación, los investigadores encontraron que las personas con SOP tenían puntuaciones más bajas en tres de las cinco pruebas que se les realizaron, específicamente en áreas de memoria, atención y habilidades verbales, en comparación con aquellas sin esta condición. En los años 25 y 30 del estudio, un grupo más pequeño de 291 participantes se sometió a escáneres cerebrales. De ellas, 25 tenían SOP. Con las exploraciones, los investigadores observaron la integridad de las vías de la sustancia blanca en el cerebro observando el movimiento de las moléculas de agua en el tejido cerebral. Los investigadores encontraron que las personas con SOP tenían una menor integridad de la sustancia blanca, lo que puede indicar evidencia temprana de envejecimiento cerebral.
Ver artículo: Huddleston HG, Jaswa EG, Casaletto KB, Neuhaus J, Kim C, Wellons M, et al. Associations of Polycystic Ovary Syndrome With Indicators of Brain Health at Midlife in the CARDIA Cohort. Neurology[Internet]. 2024[citado 01 mar 2024];27;102(4):e208104. doi: 10.1212/WNL.0000000000208104.
05 febrero 2024 | Fuente: Neurología.com| Tomado de| Noticia
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Según un nuevo estudio publicado en ‘The Lancet’, más de 1.000 millones de personas (niños, adolescentes y adultos) en el mundo viven con obesidad, es decir, una de cada ocho personas; además, el 43 por ciento de los adultos tiene sobrepeso, según datos de 2022. Estas tendencias, junto con la disminución de la prevalencia de personas con peso por debajo de lo normal desde 1990, hacen que la obesidad sea la forma de malnutrición más común en la mayoría de los países. Read more
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El estigma y la discriminación dañan la salud mental, física y social. La ministra Mónica García lo ha afirmado en una jornada por el día de la Cero Discriminación donde, se ha centrado en las personas con VIH, ‘una de las infecciones más estigmatizadas de la historia. A pesar de los avances, siguen enfrentado el problema.
En el Ministerio de Sanidad, en la jornada ‘Aprendizajes de dos luchas: diálogo entre experiencias de VIH y Salud Mental’, la directora de Seisida, María José Fuster, ha recordado que la prevalencia de problemas de salud mental en las personas con VIH es un 63% mayor que en la población general. Además, ha advertido sobre los estereotipos que se asocian, como su supuesta ‘peligrosidad’ por poder transmitir la infección. También ha comentado que a las personas con VIH se les ‘culpa’ por la infección que tienen y se les traslada el mensaje estereotipado de que ‘merecen lo que les ha pasado’. Todo esto se suma a la posibilidad de ocultar la enfermedad, que da una sobrecarga emocional añadida.
La ‘serofobia’ en dos testimonios.
Durante la jornada, se ha contado con el testimonio de afectados por VIH como Quique Peinado e Iván Garrido que han denunciado el miedo al rechazo, los problemas de discriminación en el acceso a oportunidades sociales y sanitarias, en el empleo, en las relaciones que acaban en aislamiento social y la serofobia o aversión irracional a personas seropositivas. ‘He sido mal hijo, yonqui, tengo párkinson, cirrosis, VIH y trastorno bipolar, soy maricón, he intentado suicidarme dos veces, he vivido en la calle y soy invisible por ser mayor’, han sido las pinceladas autobiográficas que ha aportado Peinado, y que le han supuesto años de discriminación por la serofobia que aún persiste. Peinado ha reconocido que ahora se ríe de todos estos miedos gracias al empoderamiento que desde que militancia en asociaciones LGTBI y de VIH, le han permitido comenzar a superar el estigma sufrido desde hace años.
También ha relatado su testimonio Garrido, que se hizo activista para romper el estigma y demostrar a su familia que podía ‘trabajar, tener pareja y ser normativo': ‘El estigma no deja de ser miedo a lo desconocido’. Garrido, que nació con VIH hace 32 años, ha relatado que es hijo de drogodependientes así que el estigma le venía ‘impreso de nacimiento’. Ha explicado que durante años se refirió al VIH como su ‘alergia’ porque tenía interiorizado que le iban a juzgar. Ha reconocido que tardó muchos años en aceptarse, quererse a sí mismo y superar su propia ‘serofobia’. Hoy, Garrido es psicólogo y activista y el tema de VIH que sonaba a sentencia de muerte cuando nació lo superó contra todo pronóstico. Al igual que Peinado, ha lanzado un mensaje de empoderamiento que quiere trasladar a todos los que estén en su situación. La jornada ha contado, en su clausura, con la comisionada de salud mental, Belén González, quien se ha comprometido a que las personas con experiencia en salud mental participen de las iniciativas políticas que se hagan desde el recién creado comisionado, y colaboren desde el principio en su diseño.
01 marzo 2024 | Fuente: EFE| Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A
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Siete de cada 100.000 mujeres en Puerto Rico o un aproximado de 75.000 sufren de endometriosis, enfermedad que afecta mayormente a las féminas entre los 32 y 35 años. Así informó Ponce Health Sciences University (PHSU) al presentar la campaña ‘OYE: sobre la endometriosis y el dolor pélvico, oriéntate y edúcate’, con motivo de celebrar el Mes de la Concienciación sobre la Endometriosis.
Este esfuerzo busca fomentar un diálogo abierto sobre la endometriosis, alentando a mujeres a hablar sobre sus síntomas sin temor al estigma y a los patrones a comprender la seriedad de la condición de manera que, mediante la educación, puedan ofrecer apoyo a las mujeres que la padecen.
La profesora de Ciencias Básicas y Obstetricia y Ginecología de PHSU Idhaliz Flores indicó en un comunicado de prensa que entre cuatro y cinco de cada diez pacientes con la enfermedad podrían tener problemas para quedar embarazadas.
La endometriosis es una condición ginecológica que afecta a una de cada 10 mujeres en edad reproductiva. El inicio de los síntomas es variable entre unas pacientes y otras, pero muy frecuentemente el inicio es con dolor intenso durante la menstruación. A veces, se acompaña de molestias con las relaciones o al ir al baño, así como dolor e inflamación del abdomen durante el ciclo menstrual.
Las investigaciones llevadas a cabo en PHSU, indican que las mujeres puertorriqueñas con endometriosis reportan una tardanza en el diagnóstico de nueve años desde el comienzo de los síntomas y reportan visitar más de cinco médicos hasta encontrar el diagnóstico y comenzar el tratamiento. En cuanto a las adolescentes, estudios liderados por el equipo de investigadores de PHSU muestran que un 80 % de las adolescentes puertorriqueñas presentan dolor pélvico menstrual y para cuatro de cada diez, el dolor menstrual es severo e incapacitante.
Otra forma de diagnóstico relativamente frecuente es por historia de esterilidad. El diagnóstico históricamente ha sido lento y dificultoso, ya que se trata de una enfermedad con una presentación heterogénea, y a que los síntomas con frecuencia no son correctamente identificados por el personal médico.
Actualmente, el Ponce Research Institute de PHSU lleva a cabo estudios sobre salud menstrual en adolescentes, terapia inmunológica para endometriosis, manejo de estrés y salud mental en pacientes con endometriosis, ejercicios y endometriosis. También dirige una investigación sobre nuevos tratamientos farmacológicos no hormonales para pacientes con endometriosis.
01 marzo 2024 | Fuente: EFE| Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A