abr
25
Preparar el cuerpo antes de iniciar el tratamiento oncológico puede marcar la diferencia en la recuperación de las pacientes con cáncer de mama, según revela una revisión sistemática de un equipo internacional del que forman parte expertos del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (Ibima).
El estudio, publicado en la revista científica Supportive Care in Cancer, analiza en profundidad el papel del ejercicio terapéutico supervisado antes de intervenciones médicas como la cirugía, la quimioterapia o la radioterapia como estrategia para mejorar la resistencia del organismo frente a los tratamientos y facilitar la recuperación.
A diferencia de la rehabilitación tradicional, que actúa una vez finalizado el tratamiento, la prehabilitación se anticipa a los efectos adversos, ha informado este miércoles el Ibima en un comunicado.
Su objetivo es fortalecer el estado físico, mental y metabólico de las pacientes para que lleguen en las mejores condiciones posibles a afrontar el proceso oncológico.
Este enfoque innovador está ganando peso en la práctica clínica, y este estudio lo pone sobre la mesa como una vía prometedora para optimizar la atención en cáncer de mama.
El cáncer de mama es uno de los más prevalentes a nivel mundial, y su abordaje suele implicar tratamientos agresivos que pueden debilitar considerablemente a quienes lo padecen.
En este contexto, el equipo investigador ha revisado la evidencia científica disponible sobre programas de ejercicio preoperatorio, analizando su impacto en variables tanto físicas como emocionales.
Uno de los principales hallazgos del trabajo es la mejora significativa del rango de movimiento articular (ROM) del hombro del lado intervenido, una limitación funcional frecuente tras la cirugía mamaria.
Además, se ha observado una reducción en los niveles del biomarcador Ki-67 -indicador de la proliferación celular tumoral en pacientes que realizaron prehabilitación, lo que sugiere un posible efecto positivo del ejercicio físico sobre la actividad del cáncer.
Los beneficios no se limitan al plano físico, y las pacientes que participaron en programas de ejercicio previo al tratamiento reportaron menos fatiga, mejor tolerancia a los procedimientos oncológicos y una mayor calidad de vida.
También se observaron mejorías en aspectos subjetivos como el dolor, la recuperación general y el bienestar emocional.
No obstante, en cuanto a variables psicológicas como la ansiedad, el estrés o la depresión, los expertos destacan que, para lograr efectos significativos, sería necesario combinar el ejercicio con intervenciones específicas en salud mental.
Los resultados del estudio respaldan la inclusión de programas estructurados de ejercicio aeróbico y de resistencia dentro del abordaje integral del cáncer de mama, pero advierten de que no existe una fórmula única, ya que cada plan debe adaptarse a la condición física, necesidades y fase del tratamiento de cada paciente.
16 abril 2025 | Fuente: EFE | Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2025. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A. | Noticia
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18
La combinación de imlunestrant y abemaciclib mejora la supervivencia libre de progresión en tumor de mama avanzado ER+ HER2-, independientemente del perfil genómico, demuestra estudio difundido hoy.
En el estudio, publicado en la revista The New England Journal of Medicine. participaron 874 mujeres con cáncer de mama avanzado receptor de estrógeno positivo (ER+) y HER2 negativo (HER2-) que habían progresado tras la terapia endocrina.
Las participantes fueron asignadas de manera aleatoria a recibir imlunestrant en monoterapia, la combinación imlunestrant-abemaciclib o la terapia endocrina estándar.
La combinación de imlunestrant y abemaciclib aumentó la media de supervivencia libre de progresión a 9,4 meses frente a los 3,8 meses de la terapia estándar. Sin embargo, imlunestrant en monoterapia solo demostró beneficios en personas con mutaciones en el gen ESR1, alcanzando una mediana de 5,5 meses frente a 3,8 meses del tratamiento convencional.
El cáncer de mama es el tipo de cáncer más común en mujeres y el segundo en general en el mundo, con aproximadamente 2,3 millones de diagnósticos en 2022.
Aunque los tratamientos actuales como los moduladores selectivos del receptor de estrógeno (SERM), los inhibidores de aromatasa y los SERD han mejorado los resultados, muchos tumores desarrollan resistencia, especialmente en presencia de mutaciones en el gen ESR1, que codifica el receptor de estrógeno, explicó la autora, Cristina Saura, jefa de la Unidad de Cáncer de Mama del Hospital Universitario Vall d’Hebron y coautora del estudio.
Imlunestrant es un fármaco SERD oral de última generación que actúa como antagonista puro del receptor de estrógeno, proporcionando una inhibición continua incluso en tumores con mutación ESR1. En estudios preliminares como el EMBER-1, demostró toxicidad de bajo grado, farmacocinética favorable y actividad antitumoral alentadora.
Los tumores con mutaciones en ESR1 presentan un peor pronóstico, por lo que se necesitan nuevas opciones terapéuticas, destacó.
Puntualizó que este nuevo fármaco no está todavía aprobado por las agencias regulatorias para su uso clínico, pero consideró que los resultados abren una ventana de oportunidad para el desarrollo de nuevas terapias personalizadas.
16 diciembre 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia
sep
16
Los avances en el tratamiento del cáncer de mama HER2 positivo (HER2+) exigen reconsiderar la determinación estándar de esta proteína, que tradicionalmente se ha basado en una clasificación de positivo o negativo. Estudiar los niveles de esta proteína permitirá la detección de tumores con baja expresión de HER2, cuyos pacientes podrían beneficiarse de la nueva generación de anticuerpos conjugados con citotóxicos (ADCs).
Así lo demuestra el estudio observacional y multicéntrico GEICAM/2011-06, liderado por el Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama, cuyos resultados se presentan en el Congreso Anual de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO), que se celebrará del 13 al 17 de septiembre en Barcelona.
«HER2 ha sido utilizado durante más de 20 años como uno de los biomarcadores fundamentales en el diagnóstico del cáncer de mama, permitiéndonos establecer el pronóstico de la enfermedad y definir la estrategia terapéutica más adecuada en cada paciente. Hasta hace poco, el objetivo del uso de HER2 como biomarcador en esta enfermedad era diagnosticar a los pacientes con sobreexpresión y/o amplificación de HER2″, explica el doctor Federico Rojo, autor del estudio, miembro de la Junta Directiva de GEICAM y coordinador del grupo de trabajo de TransGEICAM.
Sin embargo, el objetivo se redefine con la llegada de la nueva generación de fármacos contra HER2 y los anticuerpos conjugados con citotóxicos (o ADCs, por sus siglas en inglés), que, más allá de ser eficaces en el tratamiento de la enfermedad HER2 positiva, son activos en pacientes con tumores con baja expresión de HER2, conocido como HER2-low.
Este subgrupo de pacientes con HER2-low, que se define como una expresión baja o moderada, sin amplificación del gen que codifica este receptor en las células tumorales, se determina mediante la técnica de inmunohistoquímica, que estudia los niveles de expresión del receptor en la superficie de las células tumorales a partir de muestras de tejido procedentes del tumor del paciente.
«En los Servicios de Anatomía Patológica tenemos amplia experiencia en la determinación de HER2, especialmente mediante inmunohistoquímica, con métodos estandarizados que aseguran resultados fiables; sin embargo, las técnicas actuales diseñadas principalmente para detectar HER2 positivo presentan incertidumbre sobre su capacidad para definir HER2-low».
Así lo revela el estudio de GEICAM, que comparó diferentes métodos y laboratorios en 245 casos de cáncer de mama. Los resultados indican que la reproducibilidad para HER2 positivo es excelente pero moderada para HER2-low, según el doctor Rojo.
«Esto subraya la importancia de una formación adecuada para los patólogos para mejorar la clasificación de los tumores según los niveles de HER2″, concluye.
MÁS LUZ SOBRE EL CONOCIMIENTO DEL CÁNCER DE MAMA EN EL VARÓN
Los pacientes varones con cáncer de mama metastásico presentan una alta prevalencia de mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2, alcanzando el 27 por ciento, según datos presentados en el Congreso de ESMO del Registro Nacional de Cáncer de Mama en el Varón (GEICAM/2016-04).
Esta iniciativa de GEICAM, pionera en España, recopila y analiza datos clínicos y muestras biológicas de pacientes de toda España para mejorar el conocimiento sobre el cáncer de mama en hombres y crear un biobanco de tejido para estudiar esta patología a nivel molecular.
El cáncer de mama en hombres suele diagnosticarse a edades y etapas más avanzadas, lo que conlleva tasas de supervivencia más bajas en comparación con las mujeres. Este estudio observacional retrospectivo analizó casos de 773 pacientes diagnosticados entre los años 2000 y 2019 en 51 centros de toda España.
El 20 % de los participantes (54) tenía la enfermedad en fase avanzada, el 7 % presentaba cáncer de mama metastásico al diagnóstico y el 13 % había experimentado una recaída de la enfermedad localizada inicial.
En cuanto a los subtipos de cáncer de mama, aproximadamente el 70 % de los pacientes presentaba receptores hormonales positivos (HR+)/receptor 2 humano del factor de crecimiento epidérmico negativo (HER2-), el 15 %, HR+/HER2+, el 3 %, triple negativo (TN) y el 14 % tenía un subtipo desconocido.
El análisis destaca cómo las características biológicas de los tumores pueden cambiar con la progresión de la enfermedad; en 30 pacientes con tejido de sus tumores mamarios primarios y de lesiones metastásicas, se observó que 3 de 24 pacientes con subtipo HR+/HER2- experimentaron conversión a TN (dos pacientes) y HER2+ (un paciente), mientras que 3 de 6 pacientes con subtipo HR+/HER2+ cambiaron a HR+/HER2-.
AFINAR EN EL TRATAMIENTO DE PACIENTES CON TRIPLE NEGATIVO NO BASAL
GEICAM ha dado un paso más en el avance hacia la personalización del tratamiento del subtipo tumoral TN con un estudio cuyos resultados han sido presentados en el 36º Congreso Europeo de Patología (ESP, por sus siglas en inglés).
Los datos muestran un beneficio clínico en el uso de capecitabina para pacientes con cáncer de mama TN temprano (sin metástasis a distancia) tras completar la terapia neoadyuvante (previa a la cirugía) con quimioterapia en el subgrupo con subtipo no basal.
Otra conclusión destacada es que la utilización de una técnica de inmunohistoquímica estandarizada para detectar la proteína FOXC1 en los tumores permite discriminar de forma robusta entre tumores TN de fenotipo basal y no basal, una distinción crucial para la elección del tratamiento adyuvante con capecitabina.
«La ausencia de expresión de FOXC1 se correlaciona con el fenotipo no basal y, por lo tanto, con el beneficio de la capecitabina», detalla. El estudio sugiere que la implementación del test de FOXC1 en la práctica clínica podría mejorar significativamente la supervivencia de las pacientes con cáncer de mama TN con subtipo no basal al optimizar su tratamiento con capecitabina.
«Los resultados presentados con el test multigénico PAM50, alineados con observaciones previas ya publicadas por GEICAM, demuestran que una técnica relativamente sencilla puede permitir democratizar el acceso a un test (FOXC1) capaz de definir el fenotipo basal en cáncer de mama triple negativo y establecer qué pacientes pueden o no beneficiarse del tratamiento con capecitabina», concluye el doctor Rojo.
13 septiembre 2024|Fuente: Europa Press |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
may
20
Una investigación halló un vínculo entre la dieta, un género de bacteria intestinal y el cáncer de mama, según publicó la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.
El estudio encontró que una dieta rica en grasas aumentaba el número de bacterias Desulfovibrio en el intestino de los ratones, suprimiendo su sistema inmunológico y acelerando el crecimiento de tumores.
Una dieta rica en grasas podría promover la progresión de los tumores o inducir su recurrencia, destacó Erwei Song, cirujano especialista en cáncer de mama del Hospital SunYat-Sen Memorial de Guangzhou, China.
Los especialistas tomaron muestras de tejido y heces de 61 personas con cáncer de mama en el centro hospitalario, antes de que los participantes comenzaran el tratamiento.
Luego recurrieron a ratones para explorar más a fondo este vínculo, y descubrieron que los que consumían una dieta rica en grasas tenían más bacterias Desulfovibrio y niveles elevados de un tipo de célula que suprime el sistema inmunológico, las derivadas de mieloides, que se originan en la médula ósea.
Los ratones con una dieta alta en grasas también tenían niveles más elevados del aminoácido leucina circulando en la sangre que los alimentados de manera normal, determinaron.
De acuerdo con los expertos, el hallazgo podría generar nuevas ideas para terapias dirigidas a tratar el cáncer de mama, el tipo de cáncer más común que afecta a las mujeres en todo el mundo.
18 mayo 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia
may
3
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) firmó un acuerdo con el Centro del Cáncer de la MD Anderson de la Universidad de Texas, Estados Unidos, para fortalecer la prevención y control de esta enfermedad, trascendió hoy.
De acuerdo con un comunicado oficial de la entidad sanitaria, se trata de un convenio que posibilitará el apoyo técnico en la implementación regional y nacional de la organización; así como crear capacidades para potenciar los programas contra dicho padecimiento; e incrementar los esfuerzos de eliminación del cáncer cervicouterino y la Iniciativa Mundial contra el de Mamas.
«Más de 1,5 millones de personas son diagnosticadas de cáncer cada año en América Latina y el Caribe. La supervivencia puede mejorar con el acceso a un diagnóstico y tratamiento oportunos. Este nuevo acuerdo fortificará los programas contra el cáncer y contribuirán a cerrar la brecha en la atención para garantizar mejores resultados de salud», afirmó el Director de la OPS, Jarbas Barbosa.
El trabajo conjunto entre ambas instituciones incluye programas de capacitación en imágenes mamarias y biopsias para el Caribe, junto con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Además de talleres para desarrollar y avanzar en planes de eliminación del cáncer cervicouterino en América Latina con el apoyo del Proyecto ECHO® (Extension for Community Healthcare Outcomes), que trabaja, entre otras cosas, en la Mejora de la Calidad de la Mamografía en el Caribe, centrado en la capacitación de radiólogos, tecnólogos y físicos de 19 países.
El Centro de Cáncer MD Anderson de la Universidad de Texas, en Houston, se convirtió en 1971 en uno de los primeros centros oncológicos integrales de los Estados Unidos designados por el Instituto Nacional del Cáncer.
Esta colaboración ayudará a garantizar que se salven más vidas mientras trabajamos para lograr nuestro objetivo de «Hacer Historia contra el Cáncer», dijo el doctor Peter Pisters, presidente de MD Anderson.
02 mayo 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia
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29
Investigadores de la Universidad de Cambridge han creado el mayor catálogo de células mamarias humanas, que ha revelado cambios celulares tempranos en portadoras sanas de mutaciones de los genes BRCA1 y BRCA2.
Todo el mundo tiene los genes BRCA1 y BRCA2, pero las mutaciones en estos -que pueden ser hereditarias aumentan el riesgo de cáncer de mama y ovario.
El estudio descubrió que las células inmunitarias del tejido mamario de mujeres sanas, portadoras de mutaciones de los genes BRCA1 o BRCA2, muestran signos de mal funcionamiento conocidos como ‘agotamiento’.
Esto sugiere que las células inmunitarias no pueden eliminar las células mamarias dañadas, que a la larga pueden convertirse en cáncer de mama, explica un comunicado de la Universidad de Cambridge.
Los resultados, que se publican en Nature Genetics, plantean la posibilidad de utilizar los fármacos de inmunoterapia existentes como intervención temprana para prevenir el desarrollo del cáncer de mama en portadoras de estas mutaciones. Los investigadores van a ensayar este enfoque preventivo en ratones.
Si resulta eficaz, allanará el camino hacia un ensayo clínico piloto en mujeres. ‘Nuestros resultados sugieren que, en las portadoras de mutaciones BRCA, el sistema inmunitario no consigue eliminar las células mamarias dañadas, que a su vez parecen estar trabajando para mantener a raya a estas células inmunitarias’, afirma Walid Khaled, autor principal del informe.
El descubrimiento abre la posibilidad de un tratamiento preventivo distinto de la cirugía para las portadoras de estas mutaciones en cáncer de mama (ya existen fármacos capaces de superar este bloqueo de la función de las células inmunitarias, pero hasta ahora sólo se han aprobado para la fase avanzada de la enfermedad).
La cirugía de reducción del riesgo, en la que se extirpan las mamas, se ofrece a las personas con mayor riesgo de cáncer de mama. Esta puede ser una decisión difícil para las mujeres jóvenes y puede tener un efecto significativo en la imagen corporal y las relaciones sexuales.
La mejor manera de prevenir el cáncer de mama es comprender realmente cómo se desarrolla. Así podremos identificar estos cambios tempranos e intervenir’, apunta Khaled. A partir de muestras de tejido mamario sano recogidas de 55 mujeres de distintas edades, los investigadores catalogaron más de 800.000 células, incluidos todos los tipos de células mamarias.
El atlas de células mamarias humanas resultante está ahora disponible como recurso para que otros investigadores puedan utilizarlo y ampliarlo. Contiene enormes cantidades de información sobre otros factores de riesgo del cáncer de mama, como el índice de masa corporal, el estado menopáusico, el uso de anticonceptivos y el consumo de alcohol.
Según Austin Reed, coautor del informe, han descubierto que hay ‘múltiples tipos de células mamarias que cambian con el embarazo y la edad, y que es la combinación de estos efectos y otros lo que determina el riesgo global de cáncer de mama’.
El cáncer de mama, muchas enfermedades Uno de los mayores retos del tratamiento del cáncer de mama es que no se trata de una sola enfermedad, sino de muchas.
Muchas variaciones genéticas diferentes pueden provocarlo, y el riesgo genético interactúa con otros factores de riesgo de forma complicada. Por ejemplo, se sabe que la probabilidad de padecer cáncer de mama aumenta con la edad, pero este riesgo se reduce en gran medida con un embarazo a una edad temprana. Y el riesgo asociado a la edad aumenta considerablemente en las portadoras de los genes BRCA1 y BRCA2.
El nuevo estudio pretendía entender cómo interactúan algunos de estos factores de riesgo, caracterizando los distintos tipos celulares de la mama en muchos estados fisiológicos diferentes.
Ver artículo: Reed AD, Pensa S, Steif A, Stenning J, Kunz DJ, Porter LJ, et al. A single-cell atlas enables mapping of homeostatic cellular shifts in the adult human breast. Nat Genet[Internet].2024[citado 29 mar 2024]. https://doi.org/10.1038/s41588-024-01688-9
Redacción Ciencia, 28 marzo 2024|Fuente: EFE| Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.