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Más de 400 investigadores de Registros de Cáncer del mundo analizan en Granada la incidencia y la evolución de la enfermedad, y han estimado que antes de que acabe 2023 se habrán diagnosticado 297.200 nuevos casos de cáncer en España, cifra que sitúa a este país entre los menos afectados de Europa.
La Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) acoge hasta el próximo jueves el Congreso Científico de la Red Europea de Registros de Cáncer (ENCR) y la Asociación Internacional de Registros de Cáncer (IACR), un evento en el que más de 400 expertos de todo el mundo presentarán resultados de incidencia y estimaciones.
Este encuentro sirve para analizar las transformaciones que se están produciendo en los procesos de los registros por la tendencia a la medicina de precisión o el desarrollo de la inteligencia artificial, entre otros factores.
El secretario general de Salud Pública e I+D+i, Isaac Túnez, ha destacado durante la inauguración la importancia de la información aportada por los registros de cáncer de población, que permite una planificación sanitaria y orientar las políticas de salud pública.
Según las últimas estimaciones publicadas por el Sistema de Información del Cáncer en Europa (ECIS), la enfermedad aumenta en Europa y se estima que el año pasado se diagnosticaron 2,7 millones de casos nuevos.
Atendiendo a ambos sexos de manera conjunta, el cáncer de mama (478.895 casos) es el más frecuente, seguido por el de colon-recto (448.619 casos), el de próstata (415.333 casos), y pulmón (409.467 casos).
Los expertos han recalcado que hay importantes diferencias en la incidencia de cáncer entre países, teniendo España una de las más bajas de Europa, solo por delante de Bulgaria, Austria y Rumanía, frente a Dinamarca, Irlanda, los Países Bajos y Croacia, los países con mayores tasas de esta enfermedad.
Se estima que el 25 % de las mujeres y el 31 % de los hombres en Europa serán diagnosticados de cáncer antes de los 75 años.
Según las últimas estimaciones de la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN), en 2023 se diagnosticarán 279.260 casos nuevos de cáncer, el 57 % del total en hombres, y el de colon y recto será el más frecuente seguido del cáncer de mama. Las tasas de incidencia de la mayoría de los cánceres son más altas en el norte que en el sur de España.
Los proyectos de investigación que se realizan desde los registros de cáncer de población están permitiendo conocer la incidencia de los distintos y las características personales y ambientales con los que se relacionan, datos clave para establecer políticas de salud que contribuyan a la prevención.
Como ejemplo de esos proyectos compartidos, el Registro de Cáncer de Granada es uno de los coordinadores del Estudio Prospectivo Europeo sobre Nutrición y Cáncer, proyecto que ha contribuido a establecer vínculos entre los hábitos de vida y la incidencia del cáncer y otras enfermedades crónicas. Este estudio se inició en 1992 con la participación de 23 centros de 10 países europeos y ha hecho un seguimiento a 521.324 participantes durante más de 30 años para conocer la relación de la alta ingesta de fibra, pescado, calcio y vitamina D y el menor riesgo de cáncer colorrectal.
16 noviembre 2023 (EFE) – Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
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En los últimos 16 años, el autismo ha llegado a triplicar su incidencia, lo que plantea un colosal reto y muchos interrogantes a la comunidad científica. Se estima que, actualmente, alrededor de uno de cada cien niños recibe un diagnóstico de trastorno del espectro autista (TEA), con una prevalencia cuatro veces mayor en los varones que en las niñas.
El TEA engloba distintas variantes de la enfermedad. Algunos afectados presentan desafíos intelectuales y de comunicación tan pronunciados que requieren cuidados de por vida, mientras que otros muestran síntomas más sutiles.
En cualquier caso, y aunque pueden asomar a lo largo de toda la vida, los primeros indicios de autismo suelen emerger en los primeros dos años de vida. A menudo coexiste con otros trastornos neurológicos o psiquiátricos, como la hiperactividad y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).
Una amalgama de desencadenantes Y si complejas son las manifestaciones del autismo, aún lo son más sus potenciales causas. Se cree que están relacionadas con una interacción de múltiples factores, incluyendo mutaciones genéticas, componentes biológicos y factores ambientales. A pesar de esto, en las últimas décadas han surgido teorías especulativas que carecen de evidencia científica sólida.
Lo que los estudios sí han demostrado es que hay un componente hereditario, con un peso que puede oscilar entre el 40 % y el 90 %. Se han identificado más de cien genes y regiones genómicas asociadas con el TEA, aunque no hay un solo gen común a todas las personas que lo sufren.
A pesar de estos avances en la comprensión de la enfermedad, es importante destacar que solo alrededor de un tercio de los casos se pueden vincular directamente a factores genéticos. Un ejemplo de esto es que ser padre a una edad avanzada aumenta la probabilidad de tener un hijo con autismo. Se debe a que los espermatozoides pueden acumular mutaciones genéticas adicionales relacionadas con el envejecimiento.
Además, las infecciones contraídas por la madre durante el embarazo pueden desencadenar una respuesta inflamatoria que genera niveles elevados de una molécula de señalización inflamatoria llamada interleucina-17a (IL-17a). Ese proceso no solo es capaz de afectar el desarrollo cerebral del feto, sino también de perturbar el equilibrio del microbioma materno, los microorganismos que habitan en el cuerpo de la madre.
Los estudios realizados en roedores han revelado alteraciones en el sistema inmunológico, cambios en el metabolismo del triptófano (un aminoácido esencial) y modificaciones en la comunicación entre neurotransmisores como el ácido gamma-aminobutírico (GABA) y el glutamato en el cerebro. Tanto las bacterias Lactobacillus como Bifidobacterium fueron eficaces para reducir el daño neuronal producido el exceso de glutamato, una característica autista desarrollada por los ratones. Y en estudios clínicos se observó que la bumetanida (un diurético) podría regular la relación GABA/glutamato en el cerebro y reducir la gravedad de los síntomas autistas en niños pequeños con TEA.
El protagonismo de las bacterias intestinales, bajo la lupa Actualmente, el microbiota intestinal –la comunidad de microorganismos que coloniza nuestro intestino– se ha convertido en un campo de investigación crucial en el estudio del autismo. Los científicos han descubierto conexiones significativas entre el TEA y la incidencia de trastornos gastrointestinales, que afectan a entre el 30 y el 50 % de los pacientes, así como cambios en la composición de su microbiota intestinal.
Investigaciones que analizaron muestras de ADN en las heces detectaron la presencia de ciertas bacterias, como las de los géneros Clostridium o Desulfovibrio, en grupos de niños que padecían problemas gastrointestinales y TEA. Además, se ha demostrado que los filos Bacteroidetes, Firmicutes y Actinobacteria son más abundantes en los niños con autismo que en los controles.
La pregunta surge por sí sola: ¿puede influir la alteración de la ecología microbiana intestinal en la disfunción del desarrollo neurológico? Investigaciones en ratones han proporcionado pistas valiosas en esta dirección. Así, la administración de una especie de bacteria llamada Lactobacillus reuteri logró revertir algunos de los comportamientos asociados al TEA en los animales de laboratorio.
Otros ensayos se han centrado en los efectos de trasplantar el microbiota fecal recogida de niños con autismo a ratones, lo que produjo cambios sugerentes de autismo en el comportamiento de los roedores. Y en estudios clínicos, treinta niños con TEA que tomaron todos los días, durante tres meses, una mezcla de probióticos compuesta por cepas de Lactobacillus acidophilus, Lactobacillus rhamnosus y B. longum experimentaron mejoras en sus habilidades de comunicación, sociabilidad y conciencia.
Otro experimento consistió en administrar Lactobacillus plantarum PS128 a un grupo de 36 niños durante cuatro semanas. Aunque no se observaron mejoras significativas en las puntuaciones de conducta según diversas escalas de diagnóstico, los investigadores sí identificaron una reducción de la ansiedad, la hiperactividad y los comportamientos de confrontación y desafío.
¿Nuevas terapias en el horizonte?
El tratamiento del autismo se basa en un enfoque integral que abarca terapias de diversos tipos (conductuales, educativas y del habla), medicamentos psiquiátricos y dietas específicas. No obstante, hasta la fecha, no existe una aprobación médica para abordar directamente sus síntomas fundamentales, como las dificultades en la comunicación social y los comportamientos repetitivos.
Entender la relación entre la microbiota intestinal y el cerebro promete cambiar el panorama. En el futuro, quizá podamos diseñar intervenciones que combinen la dieta con probióticos o prebióticos, de manera no invasiva, para modular el microbioma de los afectados por TEA. Aunque no proporcionaría una “cura”, podría mejorar los síntomas, que es lo que la mayoría de las familias afectadas busca.
Referencia
Bin-Khattaf RM, Alonazi, MA, Al-Dbass AM, Almnaizel AT, Aloudah HS, Soliman DA, et al. Probiotic Ameliorating Effects of Altered GABA/Glutamate Signaling in a Rodent Model of Autism. Metabolites[Internet]. 2022[citado 29 septiembre 2023], 12, 720. https://doi.org/10.3390/metabo12080720
30 septiembre 2023 Fuente: La Conversación
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En pacientes expuestos a infecciones del dispositivo electrónico cardíaco implantable (DECI) la extracción temprana completa del sistema equivale a una menor morbilidad y mortalidad.
El informe para cardiólogos publicado en la sección View Point de la revista European Heart Journal enfatiza la necesidad de asegurarse que todos los pacientes con DECI sean conscientes no solo del riesgo potencial de la infección, sino también de los signos y síntomas que la anuncian y sus eventuales tratamientos tempranos.
Las recomendaciones específicas de práctica clínica internacional emitidas en 2021 por la Asociación Europea del Ritmo Cardíaco (European Heart Rhythm Association – EHRA) señalan la necesidad de retirar rápidamente el dispositivo y todos los componentes asociados, con excepción de los casos que representan infecciones superficiales de las heridas, ajenas a los dispositivos.
Antecedentes de las infecciones por DECI
La incidencia de la infección aumentó en los últimos 20 años, progresión que requiere la necesidad de medidas profilácticas, acompañadas de diagnósticos y tratamientos tempranos ante sospecha de posibles infecciones.
La prevención debe centrarse en los factores de riesgo procesables descritos en las recomendaciones de la EHRA.
Las infecciones relacionadas con DECI ocurren entre el 1% al 3% de los casos de vida útil de los dispositivos. Estos incluyen complicaciones inflamatorias locales, infección sistémica y endocarditis infecciosa; aunque son poco frecuentes, sus importantes consecuencias implican hospitalización, elevada mortalidad en un año (hasta el 25%) y mayores costos de atención médica.
Los mayores riesgos se vinculan con reoperaciones de DECI, edad joven de los pacientes y tipos de DECI más complejos, mientras que las infecciones sistémicas se asocian con factores de riesgo de bacteriemia (insuficiencia renal grave, erisipela, dermatitis y lupus eritematoso).
El riesgo de infección no se limita al primer año posterior de la implantación del dispositivo; de hecho, entre el 30 % y 70 % ocurren después de los 12 meses.
Experiencias descriptas
El uso único de terapia antimicrobiana se ha asociado con una mayor mortalidad a los 30 días, mientras la extracción temprana se relacionó con un menor riesgo de mortalidad en comparación con retrasar o no extraer el dispositivo.
Para mejorar la atención de los pacientes con DECI, existe una necesidad urgente de abordar las brechas generalizadas de conocimiento que acarrean resultados diagnósticos insuficientes, derivación tardía para la extracción y una creencia insistente en la terapia única con antibióticos.
Es poco probable que entre el 40 % y el 90 % de los pacientes con infecciones por DECI se sometan a la extracción del dispositivo.
En una gran encuesta de pacientes, el 85% no se sometió a una extracción, cifra que contrasta en forma notable con los hallazgos de una encuesta mundial de EHRA realizada en 2018, en la que el 62 % de los médicos (n= 242) declararon que retirarían el dispositivo por completo en caso de probables complicaciones inflamatorias locales (en ausencia de contraindicaciones o factores de alto riesgo).
Un estudio retrospectivo efectuado entre 2014 y 2019 a 145 pacientes con infección confirmada por DECI, encontró que la extracción del dispositivo se realizó solo en el 66,2 % de los casos. Read more
ago
10
La mayor parte de los síntomas depresivos moderados a severos que afectan a los pacientes con diabetes mellitus tipo 1 (DM1) o DM 2 se relacionan, entre otras causas, con la falta de adherencia al tratamiento farmacológico.
Las consecuencias determinan la necesidad de efectuar exámenes colectivos que evalúen la eventual incidencia de la depresión y, a su vez, requiere del sistema de salud la formación de equipos multidisciplinarios que trabajen en tiempo real con el fin de evitar el doble impacto que ocasiona la interacción de diabetes y depresión.
El artículo de la Revista Uruguaya de Medicina Interna se propone conocer la frecuencia de síntomas depresivos en una población con DM1 y DM2 y su relación con factores sociodemográficos, tratamiento farmacológico, control metabólico y complicaciones crónicas.
El estudio se llevó a cabo en una población con DM1 y DM2 asistida en el Hospital Pasteur, Facultad de Medicina, Universidad de la República, Montevideo, Uruguay.
Antecedentes del vínculo
El artículo hace hincapié en definir a la DM como una «enfermedad crónica de tratamiento complejo, ya que sus pilares terapéuticos se basan en ejercicio, dieta y uso de fármacos… «Esto determina que el paciente dedique parte de su tiempo al cuidado de la enfermedad, para lograr un buen control metabólico. El uso de nuevas tecnologías (infusores de insulina, monitoreo continuo de glucosa) de gran valor en el tratamiento de la diabetes pueden someter al paciente a una situación de estrés cotidiano.»
El conocimiento actual incorporó que la relación entre diabetes y depresión es bidireccional, es decir el diagnóstico de diabetes aumenta el riesgo de depresión, aunque ésta represente un factor de riesgo para la diabetes en personas que no transitan la enfermedad.
Los pacientes con DM1 o DM2 asocian con frecuencia síntomas depresivos diversos, relacionados tanto al periodo de duelo que acompaña al diagnóstico, como en las etapas sucesivas vinculadas a cambios de estilo de vida, tratamiento farmacológico y aparición de complicaciones.
La amplia prevalencia de depresión en la población diabética (11 a 82 %) depende del método utilizado para el diagnóstico, así como al rango etario, etnia y contexto sociocultural de las poblaciones bajo estudio. La prevalencia es superior a la depresión de la población general que alcanza un 5 %, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La introducción del trabajo aclara que la cifra de depresión aumenta cuando se la considera asociada a servicios de salud; para el caso de Uruguay el artículo informa una prevalencia de 22 % en pacientes que consultan de manera ambulatoria un servicio de medicina interna.
A nivel somático se conoce que la depresión y el estrés crónico activan el eje hipotálamo -hipofisario-suprarrenal, estimulando al sistema nervioso simpático, aumentando la agregación plaquetaria y los fenómenos inflamatorios, con la generación de insulinorresistencia y la estimulación de un mal control metabólico.
Población y tipo de estudio
El estudio analítico, observacional y transversal analizó 50 pacientes con DM1 (35 %) y 92 con DM2 (65 %) atendidos por el Hospital Pasteur, entre marzo y octubre de 2020.
Los 142 individuos fueron atendidos al menos dos veces en el último año cumplieron los criterios de inclusión: pacientes con diagnóstico de DM1 y DM2, mayores de 15 años.
Quedaron excluidos del estudio las pacientes embarazadas, los no capacitados para responder el cuestionario administrado, pacientes con enfermedades crónicas como cáncer en fase terminal, insuficiencia renal crónica en hemodiálisis, amaurosis, amputación de miembros inferiores.
Resultados y aseveraciones de la literatura
La prevalencia de depresión global en pacientes diabéticos encontrada por los autores fue de 36.7 %, superior a la frecuencia de depresión en la población general.
Al analizar las poblaciones por tipo de diabetes, los síntomas de depresión alcanzaron al 30 % de los pacientes con DM1 y 40 % de DM2, lo que evidencia alta frecuencia de síntomas de depresión.
Estos datos se acercan a los arribados en un estudio multinacional de 9000 pacientes con síntomas de depresión de 30.7 % de DM1 y 33.1 % en DM2.
Los autores mencionan algunas invetigaciones que revelaron una frecuencia mayor de síntomas de depresión (57.8 % en Perú y 82 % en Venezuela).
Si bien distintos estudios comunicaron un predominio de síntomas leves de depresión, tanto en DM1 como en DM2 del trabajo que publica la revista uruguaya predominaron los grupos con síntomas de depresión moderada a severa (18 % y 27 % respectivamente).
Los autores atribuyen la diferencia a la probable vinculación con las características de la población que se asiste en el tercer nivel de atención del Hospital Pasteur, más compleja, con mayor comorbilidad, mayor duración de la diabetes, más complicaciones y mayor proporción de pacientes con múltiples dosis de insulina.
El subdiagnóstico de la patología se manifiesta en que solo el 21 % de los pacientes con síntomas de depresión tenían diagnóstico previo; esta misma situación fue advertida en distintos trabajos, pese a que los grupos de pacientes fueran seguidos por equipos especializados en diabetes.
Los síntomas de depresión fueron significativamente superiores en mujeres, similar a lo reportado por otros autores. El trabajo aquí descripto al no encontrar esa asociación considera que podría deberse al tamaño reducido de la muestra.
La investigación tampoco vinculó los síntomas de depresión con los niveles primarios o secuendarios de instrucción.
Respecto a la falta de asociación con el control metabólico los autores opinan que podría deberse a múltiples factores vinculados al huésped, la atención médica, al tratamiento y al apoyo permanente desde los centros de atención a diabéticos. En este sentido, citan una revisión sistemática y metaanálisis donde se informa que la depresión está débilmente relacionada con el estado glucémico.
El trabajo vínculó los síntomas de depresión y el tiempo de evolución de la enfermedad con aquellos pacientes con diagnósticos de más de 5 años; esto fue observado al analizar toda la población y en el subgrupo de DM2. Read more
abr
17
La Fiscalía General de Coblenza (oeste) ha abierto una investigación contra doce personas del entorno del movimiento negacionista y antivacunas covid, a las que se atribuyen planes violentos contra el Estado y de planear el secuestro del ministro de Sanidad, Karl Lauterbach. Read more
feb
23
Rusia registró 135 172 casos de covid-19 en el último día y 796 decesos asociados, informó el centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus. Read more