jun
7
Un nuevo estudio publicado en la revista World Psyquiatry señala que las altas temperaturas que vive hoy el planeta y la exposición a sustancias contaminantes aumentan la incidencia de demencia o deterioro cognitivo y el riesgo de suicidio.
Según la investigación, el calentamiento global incrementó en un cinco por ciento las muertes por suicidio y la exposición a largo plazo a algunos contaminantes y disolventes, presentes en pinturas o barnices, está vinculada también con una mayor incidencia de demencia y deterioro cognitivo.
«El cambio climático desata fenómenos extremos cada vez más frecuentes, como olas de calor o grandes tormentas puede generar también efectos traumáticos en la población expuesta o quebrar los pilares clave para una buena salud mental, como la estabilidad económica o la seguridad alimentaria», apunta el informe.
Para llegar a sus conclusiones, los expertos analizaron 285 estudios realizados en todo el planeta y aunque no encontraron ninguna causa-efecto directa, sí hallaron asociaciones contundentes.
Por ejemplo, en el caso del suicidio, indican que algunas evidencias sugieren que la exposición a altas temperaturas puede afectar directamente la función cerebral, con alteraciones en la oxigenación adecuada y la permeabilidad de la barrera hematoencefálica.
«Además, otros estudios ya señalaban alteraciones en los neurotransmisores debido a las temperaturas más altas que pueden empeorar directamente el estado de ánimo, haciendo a las personas más irritables y estresadas, y amplificando los síntomas de los trastornos mentales», explicaron los científicos.
Ello no quiere decir que la gente se suicida por el aumento de la temperatura, sino porque está muy mal.
«El aumento de temperatura está generando un malestar emocional y es como una gota que añades a un vaso que ya está lleno», detalló Eduard Vieta, el jefe del Servicio de Psiquiatría y Psicología del Hospital Clínic Barcelona y responsable del Grupo de Trastornos Bipolares y Depresivos del Instituto de Investigaciones Biomédicas August Pi i Sunyer de Barcelona.
La investigación también arrojó que contaminantes como el tolueno, la acetona, el xileno o el acetato de etilo presentes en las sustancias disolventes de pinturas y compuestos de limpieza pueden provocar desde irritación de la piel, dolores de cabeza y visión borrosa, hasta pérdida del conocimiento y la muerte.
Alerta, que la exposición a niveles altos de dióxido de azufre podría elevar el riesgo de recaída de pacientes con esquizofrenia.
La Organización Mundial de la Salud ya advirtió sobre esos efectos y reafirma que el cambio climático está haciendo tambalear los cimientos de la salud y «tiene el potencial de socavar décadas de progreso».
04 junio 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
jun
7
La población de Gaza vive hoy una emergencia sanitaria sin comparación: lesiones, traumas, trastornos mentales y enfermedades infecciosas que se propagan por la falta de servicios básicos y la destrucción de los hospitales.
Además, los padecimientos crónicos no reciben atención y la desnutrición avanza a un ritmo acelerado, de acuerdo con vivencias e informes de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En los ya casi ocho meses de agresión israelí a la Franja de Gaza, la población sufre gravemente por la falta de servicios de salud de todo tipo y las enfermedades aumentan aceleradamente, de acuerdo con el Informe Anual de Salud, donde la Unrwa advirtió que los gazatíes padecen todo tipo de lesiones como consecuencia de la guerra.
Tales afectaciones sanitarias se suman a las enfermedades infecciosas que se propagan fácilmente dadas las condiciones de vida infligidas por los bombardeos, ataques terrestres y desplazamientos masivos de población que dan lugar a hacinamiento, falta de agua y nulas condiciones de higiene.
La destrucción de la infraestructura y el transporte han complicado aún más la prestación de atención sanitaria para estos males, al igual que para las enfermedades crónicas, a lo se sumaron los obstáculos y prohibiciones de dar paso de la asistencia humanitaria internacional.
El informe expone el aumento de casos de hepatitis aguda y diversas formas de diarrea, en tanto un tercio de los niños de Gaza padecen desnutrición aguda.
Alarmante es también que la atención médica en Gaza disminuyó a partir del 7 de octubre último, y sólo en el último trimestre del pasado año dejaron de funcionar 14 de 22 centros de salud debido a los ataques, destrucción o asedios.
Unrwa explicó que como respuesta abrió 155 refugios de emergencia y desplegó 108 unidades médicas móviles, coordinó el envío de medicamentos esenciales e implementó vigilancia de brotes de enfermedades.
El director de Salud de esa agencia, Akihiro Seita indicó que el personal del organismo permaneció en primera línea y recordó que hasta mayo de este año, había perdido más de 191 trabajadores, incluidos 11 profesionales de la salud.
Actualmente más de dos millones de pacientes dependen de sus servicios sanitarios en cinco campos de operaciones: Gaza, Cisjordania -incluida Jerusalén oriental-, Jordania, Líbano y Siria.
Por su parte, la OMS mantiene a su personal asistiendo a los gazatíes, acciones que llevan a cabo 18 equipos sanitarios que han ofrecido unas 400 000 consultas, realizado más de 18 000 cirugías y añadido más de 500 camas hospitalarias en la Franja de Gaza en todos los niveles de atención.
Tanto en el norte como en el sur de la Franja esos servicios y capacidades proporcionan, aunque de forma muy limitada, estabilización de traumatismos, partos, apoyo a la alerta temprana de brotes de enfermedades y otras urgencias.
Junto con sus socios en el terreno, la OMS también ha apoyado los traslados de pacientes y entregado alimentos, agua y suministros médicos a centros de salud.
Como afirmara su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, la agencia sanitaria de la ONU estaba en Gaza antes del inicio del conflicto y seguirá ahí para apoyar al sistema de salud hasta que termine, y ayudar a su reconstrucción.
La pasada semana el titular de la OMS insistió en un alto el fuego urgente en la Franja de Gaza y alertó sobre la crisis humanitaria en ese territorio.
«La destrucción de carreteras, la falta de acceso seguro y de combustible para las misiones siguen impidiendo el movimiento hacia el norte. La ciudad está llena de escombros y desechos sólidos», denunció.
En varias ocasiones tanto la OMS como su director general y otros altos funcionarios criticaron las operaciones militares israelíes por las graves consecuencias para la población gazatí, en especial los ataques contra hospitales y campamentos de refugiados.
Según la organización, en los primeros siete meses de conflicto en Gaza, el Ejército de Israel ejecutó 443 ataques contra sus efectivos sanitarios.
Hoy la agresión de Israel contra la Franja de Gaza suma más de 36 mil 500 vidas, en su mayoría mujeres y niños, y ha dejado a toda la población sin medios de subsistencia en una situación nunca antes sufrida en el enclave palestino, con toda su sociedad al borde del colapso.
04 junio 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
jun
6
Un estudio sobre salud mental en las aulas, que se basa en un sondeo a 6 221 profesores, familias y enfermeras escolares, refleja que el 86,1 % de estas profesionales sanitarias tiene algún alumno(a) con diagnóstico relacionado con la salud mental.
«Diagnóstico de la salud mental en las aulas», presentado este martes por los sindicatos de docentes ANPE y de enfermería Satse, concluye que han aumentado los problemas de salud mental en los centros educativos y que las principales afecciones son el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), la ansiedad y los intentos autolíticos y/o autolesiones.
El estudio, realizado por el instituto IOInvestigación, analiza tanto los problemas de salud mental del alumnado como del personal docente en España.
En los centros escolares, el 93 % de los profesores asegura que hay un incremento de esta tipología de problemas; el 85,3 % de las enfermeras escolares dice que tiene algún alumno o alumna con diagnóstico relacionado con la salud mental, y el 50,79 % de las familias conoce a un estudiante con este problema.
En la presentación del estudio, la presidenta de Satse, Laura Villaseñor, y el presidente de ANPE, Francisco Venzalá, han coincidido en resaltar la necesidad de que todos los centros educativos cuenten, al menos, con una enfermera escolar.
La enfermera escolar desempeña un papel relevante en la prevención de los problemas de salud mental a través de la identificación de factores de riesgo: inicio de conductas lesivas, como el consumo de alcohol, tabaco o drogas, y situaciones como el acoso escolar y la baja autoestima. También realiza una labor de detección, y alerta tanto al equipo docente y de orientación como al equipo de salud.
En el caso de patología psiquiátrica, se encarga de la administración y el seguimiento del tratamiento farmacológico, registrando los efectos terapéuticos y adversos que tiene la medicación.
Las principales patologías de salud mental, según las enfermeras consultadas, son el TDAH (81 %); la ansiedad (66,4 %) y los intentos autolíticos y/o autolesiones (65,9%). Sobre este último problema, el 62,7 % afirma que ha habido algún caso de intento autolítico entre su alumnado.
Se unen a ello los trastornos del espectro autista (64,7 %); del comportamiento (56,9 %); de la conducta alimentaria (47,4 %), la depresión (40,1 %); las conductas destructivas o desafiantes (34,1 %); las adicciones (17,2 %) y la psicosis (6 %).
Sobre las actuaciones emprendidas desde los propios centros, el 53,3 % de los docentes responde que en los documentos de organización y funcionamiento de su centro no se contemplan protocolos de prevención, detección y formación sobre la salud mental del alumnado.
Por su parte, el 43,8 % de las enfermeras afirma que no dispone de ningún protocolo con estrategias o herramientas de prevención, detección y derivación de posibles casos de trastorno de salud mental entre la población escolar asignada.
El 68,3 % de estas profesionales sanitarias añade que no tiene posibilidad de realizar ninguna intervención con las familias en materia de salud mental.
Según los encuestados, los factores que más influyen en que su salud mental esté afectada son el exceso de burocracia (80,2 %) y de alumnado (70,9 %); los problemas de convivencia en las aulas (70,8 %); la escasez de recursos (61,3 %); la falta de dignificación social (60,3 %); el exceso de responsabilidad (55,9 %) y de horas lectivas (33,8 %).
Asimismo, el 90,9 % indica que no se contemplan, por parte de la Administración educativa, recursos o programas de apoyo para la salud mental del profesorado en el lugar de trabajo.
Los responsables de ANPE y Satse han lamentado que, pese a la importancia de la enfermera escolar, su implantación es escasa y desigual, por lo que han abogado por su generalización el próximo curso.
04 junio 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
may
31
El acoso psicológico a docentes en el trabajo aumenta el consumo de alcohol, tabaco y medicamentos, según un estudio que concluye también el incremento de la necesidad de buscar apoyo en un especialista.
El trabajo ha sido desarrollado por personal de la Unidad de Investigación Psicosocial de la Conducta Organizacional (Unipsico) del Departamento de Metodología de las Ciencias del Comportamiento y del Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universitat de València (UV), a partir de datos de más de 9 000 docentes de primaria y secundaria de la Comunitat Valenciana.
Además de un mayor consumo asociado al acoso, el estudio ha demostrado el incremento de la necesidad de buscar apoyo de especialistas para superar crisis personales vinculadas al trabajo por la exposición a conductas de acoso psicológico de manera repetida (al menos una vez por semana) y prolongada en el tiempo, durante seis meses o más, según explican las profesoras Begoña Espejo e Irene Checa.
Se concluye que como consecuencia de los problemas de salud psicológicos o psicosomáticos derivados de acoso psicológico en el trabajo, se incrementa la frecuencia del consumo de medicamentos para aliviarlos.
Estudios previos indican que el acoso psicológico en entornos laborales educativos tiene niveles de prevalencia que superan las tasas promedio y que los docentes son frecuentemente víctimas de acoso psicológico en el trabajo.
Sin embargo, Pedro R. Gil-Monte, director de Unipsico y catedrático de Psicología Social de la UV, señala que en España no existen estudios realizados con muestras grandes que investiguen las consecuencias del acoso psicológico sobre la salud en docentes de enseñanza no superior.
Esta violencia psicológica en el trabajo, además, conlleva un coste social para el sistema público de salud, por lo que Pedro Gil-LaOrden, miembro de Unipsico, recomienda realizar de manera periódica evaluaciones de riesgos psicosociales en el trabajo en el sector educativo, así como desarrollar y activar protocolos para prevenir la violencia psicológica en el trabajo.
El acoso psicológico en el trabajo es un riesgo psicosocial grave que implica la exposición a conductas de violencia psicológica intensa dirigidas hacia una o más personas, como ofender o excluir a las personas de la vida laboral, humillarlas, difundir deliberadamente información falsa, hacer comentarios insultantes, realizar conductas intimidatorias o tomar acciones que tengan efectos negativos sobre su trabajo.
Estas conductas tienen la intención de crear un entorno hostil o humillante que perturbe la vida laboral de la víctima y conllevan un riesgo para su salud.
El estudio se ha realizado con una muestra de 9 350 personas docentes no universitarias de diferentes niveles de la enseñanza pública de la provincia de Valencia (de la cual, el 70,67 % son mujeres).
La recogida de datos para este estudio, publicado en la revista Journal of Work and Organizational Psychology, se ha realizado con el apoyo del convenio de colaboración sin ánimo de lucro entre la Universitat de València y el Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (Invassat) de la Generalitat Valenciana.
30 mayo 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
may
27
La Asamblea Nacional de Francia acoge hoy el primer debate del proyecto de ley promovido por el gobierno sobre la «ayuda a morir» para pacientes en fase terminal, iniciativa con un largo camino legislativo por delante.
Hace nueve días fue aprobado en comisión de diputados el principal artículo del texto, que refleja la autorización a acudir a una sustancia letal bajo determinadas condiciones para poner fin a la vida, aunque esa instancia sustituyó el requisito de «un pronóstico vital comprometido a corto o mediano plazo» por el de «en fase avanzada o terminal».
El proyecto utiliza el término «ayuda a morir», en lugar de suicidio asistido o eutanasia, sobre la base de criterios estrictos, ante la condición citada y en caso de que el sufrimiento sea refractario (imposible de controlar con el individuo consciente).
La norma propuesta cuenta con tres partes, la primera consagrada a los cuidados paliativos, la segunda a los derechos de los pacientes y del personal de salud y la tercera a la ayuda a morir.
El presidente francés, Emmanuel Macron, precisó en marzo las condiciones y las características para establecer en el país la eutanasia, la que se aplicaría a adultos con capacidad de discernir afectados por una enfermedad incurable.
Macron advirtió entonces que se excluyen del procedimiento los menores de edad y las personas con problemas psiquiátricos o neurodegenerativos, que les impiden decidir.
Asimismo, expuso el objetivo de ir en Francia más allá de la actual ley Claeys-Leonetti, considerando casos como los de personas con un cáncer terminal, quienes optan por viajar al extranjero «para ser acompañados» hacia la muerte.
De cara al inicio de los debates en la Asamblea Nacional, la ministra de Salud Catherine Vautrin calificó de equilibrado el texto y señaló que la apuesta del gobierno es para que los cuidados paliativos lleguen a todo el mundo.
Nadie en Francia debería acudir a la ayuda a morir por falta de la atención paliativa, dijo en la cadena BFM TV.
Las discusiones en la cámara baja durarán dos semanas, con un voto solemne previsto el 11 de junio, después del cual la iniciativa será enviada al Senado, donde pudiera analizarse para el otoño.
27 mayo 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia
may
27
Italia, con 14 358 000 personas con 65 años o más, es ya el segundo país del mundo con mayor porcentaje de ancianos, después de Japón, indica hoy un reporte.
Un informe de la Sociedad Italiana de Hospitales Territoriales Geriátricos (Sigot), divulgado este sábado en el sitio digital de la publicación especializada Superabile, señala que muchos de esos adultos mayores corren riesgo de discapacidad, lo que demanda acciones para una buena condición de salud de los mismos.
El análisis, presentado en el XXXVIII Congreso Nacional de la Sigot, que sesionó esta semana en el Hotel Ergife de Roma, está basado en los datos más recientes divulgados por el Instituto Nacional de Estadísticas (Istat), y apunta que entre 2004 y 2024, la edad media de la población italiana aumentó de 42,3 a 46,6 años.
Los habitantes con 65 años se incrementaron en ese período en más de 3 000 000 de personas y creció 5,1 puntos porcentuales, mientras 7 439 000 tienen al menos 75 años, más de la mitad del total, y la mortalidad bajó, con 661 000 fallecimientos menos, por lo que la esperanza de vida en este país llegó a 83,1 años.
El Sigot considera, basado en esos cálculos, que el envejecimiento de la población se acentuará aún más en las próximas dos décadas, y para 2050 se espera que en Italia las personas mayores de 65 años sean tres veces más numerosas que los jóvenes menores de 15 años, agrega la fuente.
25 mayo 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia