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Investigadores de la Universitat Politècnica de València (UPV), en el este de España, el CIBER de Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina (CIBER-BBN) y la Universidad de Edimburgo desarrollan nuevas cajas moleculares para mejorar la efectividad y reducir la toxicidad de fármacos anticancerígenos.
El equipo investigador acaba de publicar en la revista Chemical Science, que ha seleccionado además el proyecto para una de sus portadas interiores, una estrategia basada en el uso de sistemas moleculares para la encapsulación y liberación de fármacos con posibles aplicaciones en futuras terapias contra el cáncer.
En su estudio encapsularon un fármaco anticancerígeno en una caja molecular que responde a cambios de pH y comprobaron su eficacia contra células cancerígenas, según informó la UPV en un comunicado.
Las cajas moleculares son estructuras que envuelven completamente las moléculas huésped, encapsulando en este caso un fármaco y dejándolo en un estado inactivo para su posterior liberación recuperando la actividad.
El estudio, que se ha desarrollado como parte del proyecto de tesis doctoral de Giovanni Montà, ha permitido iniciar la línea de investigación en cajas moleculares para aplicaciones biológicas.
«En nuestra investigación, evaluada en pruebas in vitro en células, hemos realizado un análisis comparativo entre dos cajas análogas: una caja metalo-orgánica y otra caja orgánica, explicó Giovani Montà, que añadió: «Se trata de un estudio único, de gran relevancia para poder avanzar qué tipo de caja es mejor para aplicaciones biológicas y, en este caso concreto, para luchar contra esas células cancerígenas».
En su estudio, el equipo del IDM-UPV y el CIBER-BBN, en colaboración con Paul Lusby de la Universidad de Edimburgo, ha comprobado que la caja molecular orgánica tiene mejores propiedades que la caja metalo-orgánica, y permite administrar mejor el fármaco debido a su ausencia de toxicidad.
Vicente Martí, investigador del IDM-UPV y del CIBER-BBN, explicó que la caja orgánica destaca por su alta compatibilidad celular, ya que no muestra ninguna toxicidad celular incluso en dosis altas, a diferencia de las cajas metalo-orgánicas, en las que sí observaron toxicidad.
«Además, la caja orgánica administra el fármaco anticancerígeno doxorrubicina de forma eficaz a las células, preservando la actividad citotóxica de este fármaco anticancerígeno», apuntó David Bastante, investigador predoctoral en el IDM-UPV.
De esta forma, según Alba García, investigadora CIBER-BBN, este estudio establece unas bases para futuros desarrollos de sistemas de liberación de fármacos basados en cajas moleculares, aplicados al tratamiento de enfermedades como el cáncer.
Tras los buenos resultados del sistema desarrollado en sus laboratorios, el equipo del IDM, CIBER-BBN sigue trabajando en la mejora de sus propiedades.
«Nuestro objetivo es obtener un sistema que nos permita avanzar en aplicaciones biológicas, y poder realizar ensayos in vivo», concluyó Ramón Martínez-Máñez, director del Instituto IDM en la UPV e investigador también del CIBER-BBN.
05 agosto 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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Se llama «glutatión», es uno de los antioxidantes más abundantes en las células, y un equipo de investigadores ha descubierto ahora que es el responsable de la reaparición de los tumores linfáticos cuando parecía que ya se habían eliminado y de la resistencia a las terapias convencionales.
Investigadores del Centro de Biología Molecular, un centro mixto del español Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), han revelado una de las causas de esa recidiva (reaparición de un tumor) y han publicado los resultados de su trabajo en la revista Cell Death and Disease.
El estudio ha sido dirigido por Miguel Ramón Campanero, investigador del CSIC del CBM-CSIC-UAM y del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) de Enfermedades Cardiovasculares y financiado principalmente por la Asociación Española Contra el Cáncer.
Los investigadores han identificado un aumento significativo del antioxidante glutatión en las llamadas «Células Iniciadoras de Tumores (CITs), una pequeña fracción de las células presentes en los tumores que sobreviven a las terapias convencionales, como la quimioterapia y la radioterapia, y que generan un nuevo tumor más resistente y agresivo que el tumor inicial.
«Aunque la mayoría de las terapias antitumorales convencionales inhiben eficientemente el crecimiento de la mayoría de las células tumorales presentes en un linfoma o una leucemia linfoide, no eliminan eficientemente las CITs, lo que permite las recidivas», señaló Campanero.
En este sentido, Alberto Hernández, primer autor del artículo y también científico del CBM-CSIC-UAM, precisó que las terapias convencionales aumentan la oxidación de las células, lo que induce su muerte. «La resistencia de las CITs a las terapias actuales se debe, precisamente, a la acumulación de agentes antioxidantes como el glutatión».
El hallazgo, informó el CSIC en una nota difundida hoy, subraya la importancia esencial del glutatión en la supervivencia de las CITs frente a estímulos inductores de estrés celular.
Los resultados de este trabajo demuestran que la inactivación genética de un gen esencial en la producción celular de glutatión, el «GCLC», aumenta el grado de oxidación de las CITs e induce su muerte; en cambio, el tratamiento con sustancias antioxidantes favorece la supervivencia y el crecimiento no solo de las CITs sino también del resto de células tumorales.
«Estos resultados cuestionan la creencia generalizada de que los antioxidantes son necesariamente beneficiosos para la salud; es posible que ni la carencia ni el exceso de antioxidantes sean beneficiosos para nuestra salud», afirmó Campanero.
Los resultados de este estudio demuestran además que el uso de un fármaco inhibidor de una de las proteínas esenciales para la síntesis celular de glutatión también aumenta el grado de oxidación de las CITs e induce su muerte.
«Este descubrimiento nos animó a comprobar la eficacia de este fármaco en un modelo animal en el que se producen de forma espontánea tumores linfáticos agresivos», ha detallado Hernández.
Los investigadores han comprobado que este fármaco inhibe notablemente el crecimiento de los linfomas en las hembras de este modelo animal, pero «sorprendentemente» no funciona en los machos.
El hallazgo de que las células tumorales de pacientes con diversos tipos de tumores linfáticos también contienen niveles anormalmente elevados de glutatión, sugiere que este fármaco podría ser de utilidad para el tratamiento de este tipo de pacientes.
Los investigadores concluyen que estos descubrimientos podrían dar pie al desarrollo de terapias más eficaces que las que se emplean en la actualidad para los tumores que afectan al sistema linfático.
02 agosto 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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La ciencia médica llama cáncer de cabeza y cuello a aquellos que afectan a la boca, nariz y los senos paranasales, glándulas salivales, garganta y la laringe. Según Medline Plus, el sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la mayoría de estos cánceres son de células escamosas. «Comienzan en los tejidos húmedos que recubren la cabeza y el cuello. Las células cancerosas pueden propagarse a tejidos más profundos a medida que la afección crece».
La misma publicación señala que «hay otros tipos de cáncer que se desarrollan en la cabeza y el cuello, como el de cerebro, de ojo y el de esófago. Pero, en general, no se consideran cáncer de cabeza y cuello, porque esos tipos de cánceres y sus tratamientos son diferentes».
Para generar conciencia en torno de estas enfermedades y sus factores de riesgo, cada 27 de julio se conmemora el Día Mundial del Cáncer de Cabeza y Cuello, por iniciativa de la International Federation of Head and Neck Oncologic Societies (IFHNOS).
Según datos de la Asociación Estadounidense del Cáncer, estas enfermedades «son el sexto tipo de cáncer más común en el mundo y representan el 6 % de todos los tumores». Cada año, unas 900 000 personas en el mundo, en su mayoría mayores 50 años, reciben un diagnóstico de cáncer de faringe, laringe, cavidad oral, glándulas salivares o cavidad nasal. En Argentina se estima que provoca dos muertes al día.
Los especialistas consideran que, si se evitase el consumo de tabaco y alcohol, la incidencia de estos carcinomas se reduciría hasta un 90 %. También el virus del papiloma humano (HPV) representa un factor de riesgo importante.
El doctor Manglio Rizzo, jefe del Servicio de Oncología Clínica del Hospital Universitario Austral de Buenos Aires, explicó que los carcinomas de cabeza y cuello más frecuentes son «los de cavidad oral, seguidos por los de laringe y, posteriormente, los de orofaringe (garganta)».
Según datos publicados en la Gaceta Médica de México, este cáncer «ocupa actualmente el sexto lugar de todas las neoplasias. En México, entre 60 y 70 % de los pacientes son diagnosticados en etapas avanzadas, en las que la supervivencia difícilmente supera 50 % a cinco años, aun con todos los recursos terapéuticos disponibles».
Los especialistas consideran que «las causas de ello son el desconocimiento de los pacientes de sus factores de riesgo, el menosprecio de los propios pacientes por los síntomas y signos incipientes como disfonía, úlceras bucales o sangrado oral y el desconocimiento de los médicos de primer contacto de los signos de alerta indicativos de referencia inmediata al especialista».
La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) advirtió que es un tumor predominantemente masculino, aunque en los últimos años esta prevalencia se está modificando debido al aumento de la adicción al tabaco en las mujeres.
Cuáles son los síntomas del cáncer de cabeza y cuello
El doctor Rizzo detalló que los síntomas más frecuentes dependen de la localización del tumor. «Aquellos ubicados en la cavidad oral se pueden presentar como úlceras crónicas de difícil cicatrización. Los tumores de garganta u orofaringe, por su parte, suelen manifestarse como masas cervicales correspondientes a metástasis ganglionares o, menos frecuentemente, como masas o tumores amigdalinos, pudiendo generar dolor al tragar o sangrado. Los tumores de laringe, mientras tanto, pueden presentarse por alteraciones en la voz».
Cuáles son los factores de riesgo
La evidencia científica indica que, los principales factores de riesgo para el desarrollo de cánceres de cabeza y cuello son:
. El consumo crónico de alcohol
. El tabaquismo
. El virus del papiloma humano (HPV, por sus iniciales, una de las infecciones de transmisión sexual más frecuentes en todo el mundo).
. Mala higiene bucal
. Enfermedad periodontal (infección grave de las encías que daña el tejido blando alrededor de los dientes).
De acuerdo con el jefe del Servicio de Oncología Clínica del Hospital Universitario Austral, «beber 50 gramos de alcohol al día —cuyo equivalente serían unos 400 ml de vino— aumenta el riesgo entre cinco y seis veces», además, fumar incide gravemente, no solo para el fumador activo sino también en el pasivo.
«El riesgo puede verse acrecentado entre cinco y veinticinco veces, según la cantidad y el tipo de tabaco», agregó el oncólogo clínico e insistió en que «la ingesta de alcohol y tabaco tienen un efecto sinérgico para el desarrollo del cáncer de cabeza y cuello».
Al referirse al HPV, Manglio Rizzo dijo que es un virus que «aumenta el riesgo de carcinomas de orofaringe que se dan típicamente en pacientes más jóvenes, sexualmente activos». Por eso los especialistas recomiendan con énfasis la vacunación contra esa enfermedad porque disminuye el riesgo de desarrollar esta y otros tipos de afecciones.
Cuáles son los tratamientos contra el cáncer de cuello y cabeza
La posibilidad de cura de este tipo de cáncer alcanza el 95 % en caso de que se diagnostique en una etapa temprana, en cambio, dijo el mismo especialista, quien además es miembro de comité directivo de la Asociación Argentina de Oncología Clínica, cuando se lo detecta en etapas avanzadas o tardías las posibilidades de curación son escasas.
En cuanto a la reaparición de la enfermedad tras el tratamiento quirúrgico o con radioterapia es «relativamente frecuente» por lo cual se trata de pacientes que deben someterse a un seguimiento exhaustivo por parte de un equipo multidisciplinario que incluya otorrinolaringólogos, oncólogos y cirujanos.
Estos controles —agregó— son fundamentales porque «existe la posibilidad de desarrollar lo que denominamos ‘segundo tumor primario’, que es un tumor que no se asocia al primero, pero que se debe a la exposición al mismo cancerígeno, tabaco o alcohol habitualmente».
Explicó también que en muchos casos la cirugía es la primera opción de tratamiento con vistas a una curación, pero aclaró que «en los pacientes con carcinoma de laringe y orofaringe, la radioterapia es una alternativa para preservar la funcionalidad de los órganos, es decir, que puedan hablar, tragar, etcétera».
Por su parte, la doctora Ana Inés Voogd, jefa del Servicio de Cirugía de Cabeza y Cuello del Hospital Universitario Austral, destacó que «para tratar este tipo de enfermedades, el trabajo de equipos multidisciplinarios realmente es esencial» para el abordaje integral de los pacientes. Esta experta consideró que el tratamiento debe incluir a oncólogos, cirujanos, radioterapeutas y otorrinolaringólogos, nutricionistas, kinesiólogos, psico-oncólogos, cirujanos plásticos, entre otros.
«Durante las propias cirugías —que generalmente son cirugías comando, de mucha duración—, suele haber dos o tres equipos trabajando en simultáneo en el paciente, en especial para tumores en estadios avanzados o localizaciones difíciles, que requieren reconstrucciones importantes», dijo Voogd, miembro titular de la Asociación Argentina de Cirugía de Cabeza y Cuello.
La SEOM informó también que la inmunoterapia está permitiendo avances en la supervivencia frente a la quimioterapia. Se ha observado un beneficio de supervivencia global de 7,7 meses frente a 3,3. La inmunoterapia es un tratamiento intravenoso de reciente aprobación en países como España para los tumores de cabeza y cuello que estimula el sistema inmune del paciente para que sea el que destruya las células tumorales.
Según señalaron ambos expertos del Hospital Austral, en ciertos lugares del mundo, se dice que el cáncer de cabeza y cuello es «el cáncer ignorado», porque su conocimiento está mucho menos difundido que en el caso de otras enfermedades oncológicas. «Todavía persiste cierto estigma en torno a estos tumores por las secuelas que muchas veces dejan, en especial cuando el tratamiento involucra remover dientes, mandíbula, parte de la lengua», contó la doctora Voogd.
La profesional destacó la importancia y los avances que se han producido en la rehabilitación. «A veces la persona queda con algún déficit pero, gracias a la reconstrucción quirúrgica, ya sea con hueso o prótesis, y a una muy buena rehabilitación, puede reinsertarse socialmente».
Tanto Rizzo como Voogd remarcaron la importancia de los controles médicos para detectar precozmente estos tipos de cánceres y tratarlos a tiempo.
26 julio 2024|Fuente: Infobae |Tomado de |Noticia
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La Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) ha dado luz verde a una terapia avanzada CAR-T del Hospital Clínic de Barcelona con buenos resultados y que da esperanza a pacientes con mieloma múltiple que recaen de la enfermedad y se quedan sin opciones terapéuticas.
Así lo han anunciado este viernes los investigadores del Hospital Clínic que han liderado el proyecto en una rueda de prensa en la que ha participado también el conseller de Salud en funciones de la Generalitat, Manel Balcells.
El Comité de Evaluación de Medicamentos de Uso Humano de la AEMPS ha dado el visto bueno al ARI0002h para su aprobación como medicamento de terapia avanzada de fabricación no industrial en pacientes con mieloma múltiple resistentes a tratamientos convencionales.
El visto bueno del comité de la AEMPS es el paso previo a la notificación de aprobación de la exención hospitalaria que recibirá el Clínic la próxima semana, lo que significa que a partir de entonces este hospital lo podrá administrar a los pacientes que los facultativos determinen que son candidatos.
El Clínic se convierte en el primer hospital de España autorizado para la administración del ARI0002h, el segundo tratamiento del proyecto ARI tras el ARI0001 para leucemia linfoblástica aguda para adultos de más de 25 años.
El proyecto ARI lleva el nombre de Ariana Benedé, una joven paciente que impulsó los CAR-T en el Clínic aunque no llegó a tiempo para beneficiarse de estos tratamientos porque falleció de leucemia en 2016.
Los ensayos clínicos previos liderados por el Clínic-IDIBAPS han demostrado que el 95 % de los pacientes tratados con este CAR-T mostraron respuesta al tratamiento, sin toxicidades significativas (efectos secundarios).
En el desarrollo de este CAR-T, que ha contado con el apoyo de la Fundación «la Caixa», han participado siete hospitales españoles: Hospital Clínic de Barcelona, Clínica Universidad de Navarra, Hospital Universitario de Salamanca, Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, 12 de Octubre de Madrid, Virgen de Rocío de Sevilla y Clínico Universitario de Santiago.
Por ahora, la AEMPS solo ha autorizado el Clínic para poder administrar esta terapia, además de producirla, y se estima que se beneficiarán del tratamiento en la fase más inmediata medio centenar de pacientes, ha detallado el jefe del grupo de mieloma del IDIBAPS, Carlos Fernández de Larrea.
El mieloma múltiple es un tipo de cáncer que afecta a las células plasmáticas de la médula ósea y representa un 10 % de los cánceres de sangre.
Aunque existen diversos tratamientos, muchos pacientes desarrollan resistencia, lo que lleva a recaídas y a una necesidad de disponer de nuevas terapias para tratarlos.
Para este perfil de paciente que ya ha pasado por los tratamientos convencionales y ha recaído, el CAR-T es la última esperanza para sobrevivir.
19 julio 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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Investigadores de Weill Cornell Medicine (EEUU) y un equipo internacional han utilizado biopsias hepáticas para identificar marcadores celulares y moleculares que podrían servir para predecir si el cáncer de páncreas se extenderá al hígado o a otros órganos, como el pulmón, y en qué momento.
El estudio, publicado en la revista Nature Medicine, propone que la información procedente de una biopsia hepática -una pequeña muestra de tejido recogida para su análisis en el laboratorio- cuando se diagnostica un cáncer de páncreas puede ayudar a orientar a los médicos en la personalización del tratamiento, como las inmunoterapias dirigidas al hígado, antes de que las células cancerosas tengan la oportunidad de metastatizar.
En este sentido, solo el 10 % de las personas con cáncer de páncreas sobreviven más de dos años tras el diagnóstico inicial. «Si podemos predecir el momento y la localización de las metástasis, esto podría cambiar las reglas del juego en el tratamiento del cáncer de páncreas, sobre todo en los pacientes con alto riesgo de metástasis», ha afirmado David Lyden, el coautor del estudio, catedrático Stavros S. Niarchos de Cardiología Pediátrica y profesor de Pediatría y Biología Celular y del Desarrollo en Weill Cornell Medicine.
En 2015, Lyden y sus colegas descubrieron que las células de cáncer de páncreas secretan factores que llegan a órganos distantes, con mayor frecuencia el hígado, para establecer un nicho premetastásico donde se forman nuevos tumores.
Para averiguar cómo estas alteraciones preparan su nueva ubicación para la colonización cancerosa, Lyden colaboró con la autora principal, la doctora Linda Bojmar, profesora adjunta de investigación en biología molecular en pediatría en Weill Cornell Medicine y profesora adjunta de medicina clínica y experimental en la Universidad Linköping de Suecia.
Junto con otros investigadores del Memorial Sloan Kettering Cancer Center (EE.UU.) y el equipo hepatopancreatobiliar, obtuvieron biopsias hepáticas de 49 individuos sometidos a tratamiento quirúrgico por cáncer de páncreas en estadio inicial. También recogieron biopsias hepáticas de 19 personas que se sometieron a una operación similar por afecciones no relacionadas con el cáncer, por ejemplo, la extirpación de quistes pancreáticos benignos.
LAS BIOPSIAS HEPÁTICAS REVELAN SIGNOS PRECOCES DE METÁSTASIS RÁPIDA
A continuación, los investigadores llevaron a cabo una serie de análisis moleculares, celulares y metabólicos de estas muestras para determinar si podían identificar los rasgos distintivos que precedían -o potencialmente prevenían- las metástasis posteriores en los pacientes.
Descubrieron que los hígados de los supervivientes sin recidiva, que no mostraban signos de propagación del cáncer tras un periodo de seguimiento de al menos tres años, se parecían mucho a los hígados de las personas que nunca habían tenido cáncer.
En el otro extremo del espectro se encontraban los que desarrollaron metástasis hepáticas en los seis meses siguientes al diagnóstico, un grupo de pacientes con mal pronóstico y opciones terapéuticas limitadas. Sus hígados estaban plagados de las llamadas trampas extracelulares de neutrófilos (NET), densas marañas de ADN y enzimas liberadas por los neutrófilos moribundos, células inmunitarias que constituyen la primera línea de defensa contra las infecciones. Dado que estas NET están estrechamente relacionadas con futuras metástasis y se desarrollan tan pronto en el curso de la enfermedad, es posible que en un futuro próximo las imágenes radiológicas puedan detectarlas e identificar a los pacientes en peligro de esta agresiva propagación.
«Estos individuos podrían recibir entonces un ciclo completo de quimioterapia o, si las metástasis se detectan cuando sólo aparecen unas pocas, tal vez se podrían extirpar quirúrgicamente los tumores secundarios», ha explicado Lyden.
RESPUESTAS INMUNITARIAS EN METÁSTASIS POSTERIORES
Los investigadores identificaron otras dos categorías de pacientes en el estudio: los que desarrollarían metástasis posteriores en el hígado y los que tendrían el cáncer diseminado a otros lugares, como el pulmón. Los pacientes cuyos cánceres se extendieron a órganos distintos del hígado mostraban una fuerte respuesta inmunitaria contra el cáncer: las células T protectoras y las células asesinas naturales se habían infiltrado en sus hígados y se habían activado muchos genes reguladores del sistema inmunitario. Para los autores, estas personas propensas a desarrollar metástasis fuera del hígado podrían beneficiarse de la inmunoterapia para reforzar su respuesta inmunitaria antitumoral.
Por otro lado, aquellos cuyos hígados sucumbieron a metástasis posteriores también acumularon células inmunitarias, pero éstas mostraban signos de agotamiento metabólico. «Es como si el hígado intentara protegerse, pero al final perdiera la batalla», ha afirmado Bojmar.
Los investigadores planean validar sus hallazgos en una cohorte más amplia de pacientes con cáncer de páncreas y examinar si este enfoque podría ser útil con otros cánceres recién diagnosticados. «Esperamos desarrollar una herramienta para predecir qué pacientes con cáncer colorrectal desarrollarán metástasis hepáticas basándonos en los perfiles celulares, moleculares y metabólicos de sus biopsias hepáticas», ha finalizado Robert Schwartz, coautor principal y profesor asociado de medicina en Weill Cornell Medicine.
17 julio 2024|Fuente: Europa Press|Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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13
La Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM), con motivo del Día mundial de cáncer de cabeza y cuello, recuerda que aproximadamente el 70 % de los cánceres de orofaringe están relacionados con el VPH en países desarrollados y representa el 18 % de todos los casos de cáncer de cabeza y cuello.
«Los tumores de orofaringe VPH positivos tienen especial predilección por las amígdalas palatinas y la base de la lengua. Pueden ser tumores de pequeño tamaño difíciles de diagnosticar que con frecuencia se presentan al diagnóstico con ganglios cervicales», señala la doctora Laura Oleaga Zufiría, radióloga especialista en cabeza y cuello de la SERAM y especialista del Hospital Clínic de Barcelona.
Además, puntualiza que «en imagen no podemos diferenciar los tumores de orofaringe VPH positivos de los negativos, salvo que en los VPH positivos se asocian con más frecuencia a adenopatías quísticas». Los estudios que se utilizan dependiendo del caso clínico pueden ser la tomografía computarizada (TC), resonancia magnética (RM) o PET-TC.
El área de cabeza y cuello es una región anatómica compleja en la que se concentran una gran cantidad de estructuras anatómicas. La RM tiene la ventaja, frente a otras técnicas de imagen como la Tomografía Computarizada, de tener una gran resolución de contraste que permite una mejor detección y delimitación de las lesiones de esta área, ya que los tumores pueden ser pequeños e indetectables por imagen o a la inspección en ocasiones el paciente acude por presentar adenopatías en el cuello como primera manifestación clínica.
La RM aporta datos sobre la extensión tumoral mediante la obtención de secuencias morfológicas, pero, además con las secuencias funcionales de difusión y perfusión actualmente se pueden obtener datos cuantitativos que pueden contribuir a la caracterización de los tumores y aportan información sobre la predicción de respuesta al tratamiento y el pronóstico.
Los tumores malignos de cabeza y cuello están relacionados con dos factores de riesgo como son el consumo de alcohol y el tabaco, especialmente en los que afectan a la zona de la laringe y faringe. También, a lo largo de los últimos años, ha aumentado el número de casos relacionados con el virus del papiloma humano, que es más frecuente en varones con una edad media entre 45-60 años, aunque se presentan en pacientes cada vez más jóvenes, no fumadores y con buen estado de salud.
Cada año se detectan en España entre 12 000 y 14 000 nuevos casos de cáncer de cabeza y cuello. El cáncer de cabeza y cuello ocupa el sexto lugar en incidencia en España, y supone alrededor de un 5 % de los cánceres que se diagnostican.
Las tasas de supervivencia de los tumores de orofaringe VPH positivos son superiores a las de los cánceres de esta zona no causados por el virus, independientemente de lo avanzados que estén al diagnóstico y del tratamiento realizado. Y la tasa de supervivencia relativa en pacientes con cáncer de cabeza y cuello es del 72 % al año y del 42 % a los 5 años en adultos.
11 julio 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia