oct
29
Con los avances científicos y en biomedicina la gente cada vez vive más y mejor, y son muchos los estudios, trabajos y ensayos dedicados desde hace tiempo a descubrir terapias, fármacos o tratamientos para frenar o curar enfermedades de gran impacto, pero desde hace no tanto la investigación aborda un campo mucho menos explorado y también sugerente: tratar de frenar el proceso de envejecimiento.
Es una realidad que la esperanza de vida de las personas en los países avanzados ha progresado espectacularmente desde principios del siglo XX hasta la actualidad.
Y, como explica el director del programa de Biotecnología del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), Fernando Peláez, son muchos los factores que han contribuido a ello.
El cambio en los hábitos de vida, los remedios médicos y terapias, o las condiciones ambientales y el tipo de vida que se desarrolla son algunos, además de, cómo no, la genética de cada individuo.
Pero lo que es incuestionable es que se ha producido «una evolución» científica y que «se han ido mejorando las cosas» en «un camino que va a seguir», dice Peláez, que participa en Santander en el Congreso Nacional de Informadores de la Salud.
Máquinas biológicas
La ciencia, la investigación o la medicina van a seguir avanzando y aparecerán nuevos abordajes terapéuticos para las enfermedades que se multiplican con la edad.
A ello se une que «por primera vez en las últimas décadas lo que se ha abordado, aparte de las patologías que pueden estar asociadas al envejecimiento», es el proceso mismo de envejecer.
«Una cosa es tratar la enfermedad y otra cosa es intentar abordajes que lo que hacen es frenar el proceso en sí mismo. Eso es como el Santo Grial, es lo que querían conseguir los alquimistas, y no es nada fácil. Las máquinas biológicas como la nuestra están programadas para envejecer», destaca Peláez.
Y añade que, aunque no es fácil combatir el envejecimiento, cada vez se entiende mejor ese proceso que es «complejo».
Campo por delante para fructificar
Según comenta, existen ya ensayos clínicos y mucha actividad de investigación preclínica en modelos animales con compuestos con fármacos o posibles fármacos.
Es un campo que sobre todo se está explorando en Estados Unidos, no tanto en España, pero en el que, con seguridad, con el paso del tiempo surgirán más trabajos y aportaciones.
Sin embargo, advierte Peláez, «todo eso va a tardar mucho tiempo en fructificar», primero porque los ensayos clínicos, «por definición, son siempre largos», y también porque es un problema «de una gran complejidad» y, hasta hace no muchos años, poco explorado.
«Es algo que lleva haciéndose poco tiempo, y poner las bases para llegar hasta ahí ha llevado décadas», incide.
En todo caso, insiste en que «vivir muchos años y con buena calidad de vida es cuestión de ir poniendo los elementos». Se trataría de «ir controlando cada vez más todas las patologías que ahora mismo pueden ser intratables», indica.
Y «una de las reglas típicas de la biología es el genotipo», los genes, nuestro ADN, que tiene una importancia crucial, junto con los factores ambientales. «Claro que hay factores de riesgo importantísimos en lo que nos rodea, como la luz ultravioleta, la contaminación, la polución, o llevar una alimentación incorrecta», subraya.
Dilema moral
Este asunto de cómo envejecer y si es posible hacerlo más lentamente tiene además connotaciones bioéticas «muy importantes por muchas razones».
Por ejemplo, si se piensa en quién va a tener acceso a esos tratamientos o terapias para frenar el envejecimiento. «¿Van a ser para todos o sólo para los que puedan permitirse tener la atención sanitaria necesaria en ese sentido?», pregunta Peláez.
Además, avisa de que «una vida más larga plantea otro tipo de problemas», porque «en el fondo el organismo vive, pero la cabeza y tu mentalidad es la que es y está formada en un periodo histórico determinado», con las contradicciones y los choques que puede suponer.
27 octubre 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
oct
28
Un estudio dirigido por científicos de la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC), en colaboración con 17 instituciones asociadas en todo el mundo, ha descubierto marcadores moleculares en la sangre al nacer que están relacionados con el desarrollo posterior de la leucemia linfoblástica aguda (LLA), el tipo de cáncer más común que afecta a los niños.
Estos marcadores también estaban presentes en los tejidos cancerosos de los niños con leucemia y sirvieron como indicadores de la supervivencia del paciente. Esta investigación ofrece nuevas esperanzas para el diagnóstico temprano y las posibles intervenciones terapéuticas en el cáncer infantil, que es la principal causa de muerte entre las enfermedades en los niños.
El nuevo estudio, publicado en la revista Molecular Cancer, utilizó un enfoque innovador para rastrear los orígenes moleculares del cáncer desde el nacimiento.
Los investigadores perfilaron mapas moleculares en pacientes en varias etapas: nacimiento, diagnóstico, remisión y recurrencia. En el centro de estos mapas se encuentra el epigenoma, que entrelaza intrincadamente las cadenas de ADN en una impronta molecular de la naturaleza y la crianza: lo que nuestros genes proporcionan y cómo el entorno los influye.
Esto permite que el epigenoma capture una instantánea molecular, una especie de diario, de los factores de la vida temprana a los que el bebé estuvo expuesto durante el embarazo. «Este estudio es el resultado de un esfuerzo multidisciplinario a gran escala, una inversión sustancial y una amplia colaboración internacional», señala el doctor Zdenko Herceg, Jefe de la División de Epigenómica y Mecanismos del IARC y coautor principal del estudio.
«Al combinar la epidemiología, la oncología clínica y la ciencia de laboratorio avanzada, hemos obtenido conocimientos únicos sobre las causas del cáncer e identificado biomarcadores que podrían conducir a una detección temprana y una estratificación y terapia de riesgo personalizadas».
Para generar huellas epigenéticas, se requieren muestras biológicas. Sin embargo, la mayor parte de la investigación sobre el cáncer pediátrico se ha basado en muestras clínicas recolectadas después de la aparición de la enfermedad. Esto plantea inquietudes sobre la causalidad inversa, donde los procesos biológicos identificados de esta manera pueden ser resultado del cáncer en lugar de ser su causa.
Para abordar esto, los científicos buscaron marcadores epigenéticos (metilación del ADN) tanto en tejidos sustitutos (sangre) como cancerosos a lo largo del desarrollo de la leucemia, comenzando en el momento del nacimiento mediante el uso de tarjetas de Guthrie archivadas (o sangre del cordón umbilical, cuando esté disponible) de los niños. Las tarjetas de Guthrie albergan manchas de sangre, a menudo se originan a partir de punciones en el talón de los bebés y se recolectan comúnmente como parte de los exámenes de detección neonatal de rutina. Esto descubrió posibles precursores epigenéticos de la leucemia detectables al nacer, antes de que se manifieste la enfermedad.
Después de que se realizó un seguimiento de los pacientes durante más de 10 años, los hallazgos revelaron que las alteraciones específicas de la metilación del ADN al nacer pueden servir como biomarcadores significativos para el desarrollo, el pronóstico y la supervivencia de la LLA. En ausencia de cambios en el código del ADN, los niveles de metilación son potencialmente reversibles, y esto es lo que se observó en los pacientes que respondieron positivamente a la terapia.
Los hallazgos de esta investigación fueron reproducibles con diferentes tecnologías, en tres continentes y en dos etnias, incluida la etnia hispana, a menudo subrepresentada; los niños hispanos tienen las tasas más altas de leucemia infantil en todo el mundo.
«Dado que el cáncer infantil puede tener su origen en el útero, hemos viajado en el tiempo para recolectar muestras de sangre al nacer de niños que luego desarrollaron cáncer», afirma el Dr. Akram Ghantous, científico del IARC y autor principal del estudio. «Estamos trazando un mapa de los ‘diarios’ moleculares de la naturaleza y la crianza en pacientes con cáncer, al tiempo que rastreamos estos diarios hasta el nacimiento; de alguna manera, invertimos la flecha del tiempo para descubrir los orígenes tempranos de la enfermedad», afirma.
Con una mayor validación, estos hallazgos podrían revolucionar la detección temprana y el tratamiento de la leucemia infantil. Las futuras investigaciones se ampliarán a poblaciones más grandes y diversas para descubrir precursores moleculares adicionales de la LLA pediátrica y mejorar las aplicaciones clínicas.
24 octubre 2024|Fuente: Europa Press |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
oct
12
El Hospital Universitario Vall d’Hebron, en colaboración con los también hospitales barceloneses de Sant Pau y del Mar, ha desarrollado, mediante una aplicación web, un modelo predictivo que ayuda a los oncólogos a identificar qué pacientes tienen mayor riesgo de morir en los siguientes 90 días.
El modelo lo publica este miércoles la revista científica The Lancet y está disponible para los profesionales que tratan a pacientes oncológicos de manera abierta a través del enlace https://promise.vhio.net/.
La herramienta se denomina ‘PROMISE Score’, por sus siglas en inglés («Pronostic Score for Hospitalized Cancer Patients»), y utiliza información clínica y de laboratorio fácilmente disponible en el momento del ingreso del paciente para predecir con precisión el riesgo de mortalidad a 90 días en enfermos con cáncer avanzado que reciben tratamiento activo.
El objetivo principal de la aplicación es asistir al equipo médico en la identificación de los pacientes con mayor probabilidad de sobrevivir sin necesidad de realizar más pruebas y ayudarles a tomar decisiones.
Los pacientes oncológicos suelen sufrir complicaciones derivadas del cáncer que se traducen en hospitalizaciones no programadas y esta herramienta puede ayudar a agilizar decisiones y optimizar estas hospitalizaciones, así como reducir ingresos prolongados y repetidos que pueden evitarse en pacientes terminales.
«El modelo que hemos desarrollado tiene un fuerte poder predictivo para los pacientes con un pronóstico favorable, con los que podemos apostar con más convicción por intervenciones terapéuticas agresivas», ha explicado el Dr. Oriol Mirallas, adjunto del servicio de Oncología Médica del Hospital Vall d’Hebron e investigador de la Unidad de Investigación en Terapia Molecular UITM-CaixaResearch del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO).
El doctor Mirallas es el autor principal de este estudio, que ha contado con la colaboración de 41 profesionales, junto con el Dr. Joan Carles, jefe de sección del hospital y responsable de la Unidad de Genitourinario, Sistema Nervioso Central, Sarcoma y Tumores de Origen Desconocido, así como del Grupo de Tumores Genitourinarios, Sistema Nervioso Central y Sarcoma del VHIO, y el Dr. Rodrigo Dienstmann, jefe del Grupo de Oncology Data Science (ODysSey) del VHIO, quien ayudó a desarrollar el modelo y la herramienta web.
«Hasta ahora, los profesionales utilizábamos datos clínicos, validados en pacientes ambulatorios. Pero, con este modelo tenemos un dato objetivo y cuantificable que nos ayudará a conocer la evolución del paciente al ingresar en planta», ha añadido Mirallas.
Detalles de la investigación
Para crear esta aplicación y obtener un dato objetivo, se ha analizado una muestra de 1 009 pacientes, 749 ingresados en Vall d’Hebron y 260 del Hospital de Sant Pau y el Hospital del Mar, que han sido el grupo de validación.
En el momento del ingreso, los pacientes tenían más de 18 años, un tumor sólido avanzado o metastásico confirmado (principalmente de pulmón, gastrointestinal o ginecológico, los más prevalentes), habían recibido tratamiento sistémico anticanceroso al menos seis meses antes de la hospitalización, y estuvieron ingresados en urgencias o en planta un mínimo de 24 horas.
La edad promedio era de 65 años, el 51 % eran mujeres, con un tiempo promedio desde el diagnóstico de 22 meses, y la hospitalización duró 9 días en promedio.
La aplicación analiza una serie de factores clínicos y de laboratorio fácilmente disponibles en el momento del ingreso.
Un alto nivel de LDH (carga tumoral), neutrófilos (inflamación) y albúmina (proteína que indica el estado nutricional del paciente) en el análisis de sangre al ingreso en urgencias se asocian con un peor pronóstico.
También se valora el estado funcional ECOG, los últimos informes de TAC para estimar la respuesta al tratamiento y la progresión de la enfermedad, el estadio del tumor y el estado anímico del paciente.
Con estos valores, el PROMISE Score calcula un algoritmo que ayuda a identificar aquellos pacientes que tendrían una supervivencia superior a 90 días sin necesidad de realizar pruebas adicionales.
Próximamente, la aplicación se implementará en otros centros para llevar a cabo un estudio internacional con más pacientes.
09 octubre 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
oct
8
Investigadores de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, están desarrollando una vacuna contra el cáncer de ovario, la primera del mundo, reportó el canal de televisión Sky News.
«OvarianVax es una vacuna que enseña al sistema inmunológico a reconocer y atacar el cáncer de ovario en sus fases más tempranas (…) La esperanza es que las mujeres puedan recibir la vacuna de forma preventiva en el NHS [Servicio Nacional de Salud] con el objetivo de erradicar la enfermedad», publicó el medio británico en su sitio web.
A juicio de los expertos, OvarianVax podría funcionar de manera similar a la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH), con la que se intenta erradicar el cáncer de cuello uterino.
Los científicos están trabajando para identificar las células objetivo para la vacuna y establecer qué proteínas de la superficie de las células del cáncer de ovario en fase temprana son mejor reconocidas por el sistema inmunológico y con qué eficacia la vacuna mata modelos de la enfermedad en un laboratorio.
Luego podrán proceder a ensayos clínicos en humanos: con personas que tienen mutaciones del gen BRCA, lo que aumenta muchísimo el riesgo de cáncer hereditario de mama y de ovario, y también con mujeres sanas.
Alrededor del 45 % de las personas con un gen BRCA1 alterado y casi el 20 % de las personas con un gen BRCA2 alterado desarrollarán cáncer de ovario a la edad de 80 años, frente al 2% dentro de la población general, según Sky News. Actualmente, se recomienda a las mujeres con mutaciones BRCA1/2 que se extirpen los ovarios a la edad de 35 años, lo que implica una menopausia temprana y el impedimento de tener hijos en el futuro.
04 octubre 2024|Fuente: Sputnik |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
oct
8
La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó hoy el uso del Cecolin, cuarta vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH), precalificada por el organismo para su empleo en un esquema de dosis única.
«Al agregar otra opción para un esquema de vacunación contra el VPH de dosis única, hemos dado un paso más para relegar el cáncer de cuello uterino a la historia», dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom.
Datos del organismo sanitario muestran que más del 95 % de los 660 000 casos de cáncer de cuello uterino, que se producen cada año en el mundo, son causados por este virus.
Cada dos minutos una mujer muere a causa de esta enfermedad prevenible y el 90 % de estos decesos se producen en países de ingresos bajos y medios.
De los 20 países más afectados por el cáncer de cuello uterino, 19 están en África.
El objetivo de la estrategia mundial de la OMS para eliminar el cáncer de cuello uterino es lograr que el 90 % de las niñas estén completamente vacunadas contra el VPH a los 15 años de edad, destacó la doctora Kate O’Brien, directora del departamento de Inmunización, Vacunas y Productos Biológicos de la organización.
«Dados los continuos desafíos de suministro, esta incorporación de la vacuna de dosis única significa que los países tendrán una mayor variedad de vacunas para llegar a más niñas», añadió.
La introducción de la vacuna contra el VPH se vio obstaculizada por la escasez de suministro mundial desde 2018 y los problemas de producción que debió afrontar uno de los fabricantes a principios de este año, lo cual provocó más déficits y podría afectar a millones de niñas que necesitan vacunas contra el VPH en África y Asia.
Estadísticas publicadas el 15 de julio pasado indican que la cobertura de la vacuna contra el VPH de una dosis, entre las niñas de nueve a 14 años, aumentó del 20 % en 2022 al 27 % en 2023, año en el que 37 países aplicaron el esquema de dosis única.
Hasta el 10 de septiembre del año en curso, 57 países implementaron el esquema de dosis única, el cual, según la OMS, ha dado como resultado que al menos seis millones más de niñas recibieron vacunas contra el VPH en 2023.
04 octubre 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
oct
7
Una generación libre de tabaco podría evitar más de un millón de muertes por cáncer de pulmón, tal y como señala un estudio liderado por la Universidad de Santiago de Compostela y la Agencia Internacional para la Investigación en Cáncer (IARC), que acaba de publicarse en la revista Lancet Public Health.
Los resultados de este estudio se basan en un hipotético escenario en el que se prohibiese consumir tabaco, en un total de 185 países, a la población nacida entre el 1 de enero de 2006 y el 31 de diciembre de 2010.
La investigación, liderada por los profesores del área de Medicina Preventiva y Salud Pública de la USC, Julia Rey Brandariz, Mónica Pérez Ríos y Alberto Ruano Raviña, se basa en las tasas de mortalidad por cáncer de pulmón, a partir de datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El estudio señala, por tanto, que se evitarían 1,2 millones de muertes en todo el mundo asociadas al cáncer de pulmón, el 40,2 % de las muertes por esta enfermedad en las personas nacidas entre 2006 y 2010, hasta 2095.
Además, advierte que se evitarían un número mayor de muertes en hombres, el 45,8 % del total, que en mujeres, el 30,9 % del total.
Esto se debe, según explica la doctora Julia Rey, a «la prevalencia de consumo», ya que en la mayoría de los países «siempre empezaron a fumar antes los hombres que las mujeres».
«Los hombres llegaron a unas prevalencias de consumo más altas que las mujeres, que empezaron unas décadas más tarde a fumar», apunta la investigadora, que recuerda que el cáncer de pulmón «no se produce como consecuencia inmediata de fumar, sino que se da a largo plazo».
Por regiones, el mayor porcentaje de muertes se registra en Europa Occidental (73,6 %) y, en hombres, se evitarían más muertes en la región de Europa Central y Oriental (74,3 %); mientras que en el caso de las mujeres se evitarían más muertes en Europa Occidental (77,7 %).
El equipo destaca que, en España, se evitarían cerca de 21 900 muertes, de las cuales, 11 600 corresponden a hombres y 10 300 a mujeres.
«Esto supondría evitar el 71,9 % y 73,1 % de las muertes por cáncer de pulmón esperadas en hombres y mujeres, respectivamente», afirman.
El estudio se centra solamente en el tabaco activo, y no tiene en cuenta las muertes que se evitarían por exposición ambiental ni tampoco por cigarrillo electrónico, debido a que, en este último caso, «todavía no se sabe muy bien qué relación tiene con el cáncer de pulmón».
Por tanto, aunque no está cuantificado, Rey asegura que la cantidad de muertes evitables podría aumentar, ya que la exposición ambiental del tabaco también causa cáncer de pulmón.
La prohibición de la venta de productos de tabaco a personas nacidas a partir de un año específico con el objetivo de que nunca empiecen a consumirlo se conoce como ‘generación libre de tabaco’ y ha sido aplicada o tomada en consideración en diversos países, aunque, hasta ahora, nunca se había realizado una estimación global del impacto que puede llegar a tener una medida así en todo el mundo.
Nueva Zelanda fue pionera en la implementación de esta medida, puesto que prohibió la venta de productos de tabaco a las personas nacidas a partir del 1 de enero de 2009. Sin embargo, esta normativa fue retirada tras un cambio de gobierno en el país.
Por otro lado, en Reino Unido se contempla la prohibición de la venta de tabaco a personas nacidas a partir del 1 de enero de 2009, con el objetivo de implementarse en 2027; y ciudades como Brookline, en Massachusetts (Estados Unidos) o Balanga (Filipinas), han adoptado medidas similares.
Según Rey, estos datos pueden servir para influir en futuros cambios legislativos en nuestro país, donde el consumo de tabaco es la principal causa de muerte evitable en enfermedades crónicas.
«Es imprescindible seguir reforzando y aplicando medidas de control del tabaquismo que contribuyan a disminuir el impacto del consumo de tabaco en la mortalidad por cáncer de pulmón, así como en más de 20 enfermedades relacionadas con su consumo», concluyen el estudio.
03 octubre 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia