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Los problemas de salud mental en Tailandia están aumentando, mientras que el número de personas que buscan tratamiento creció de 1,3 millones en 2015 a 2,9 millones en 2023, según el Consejo Nacional de Desarrollo Económico y Social (NESDC).
Según datos del Departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud, recopilados entre el 1 de octubre de 2023 y el 22 de abril de 2024, el NESDC observa una tendencia preocupante.
Aproximadamente el 15,48 % de la población de Tailandia informó haber experimentado estrés, el 17,20 % presenta signos de depresión y el 10,63 % tenía riesgo de ideación suicida. Estas cifras indican un deterioro de la situación en los últimos años.
Las presiones económicas y sociales contribuyen a los trastornos depresivos y de ansiedad entre los tailandeses. En el año fiscal 2023, la proporción de personas con dichos trastornos fue notablemente alta, superando el número de personas con enfermedades mentales causadas por el abuso de drogas.
La tasa de suicidio en el mismo año, 7,94 por 100 000 habitantes, se acercó a niveles vistos por última vez durante la crisis financiera de Tom Yum Kung, cuando alcanzó 8,59 por 100 000 habitantes.
Los factores ambientales también juegan un papel importante en la salud mental. Tailandia enfrenta problemas como la contaminación del aire PM2,5, que se encuentra entre las más altas del mundo, y debe permanecer alerta para abordar estas preocupaciones ambientales.
11 junio 2024|Fuente: VNA |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
jun
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Investigadores de la Universidad Queen Mary de Londres desarrollaron un nuevo método que permite predecir la demencia con una precisión superior al 80 % y hasta nueve años antes del diagnóstico, trascendió hoy.
La novedosa técnica posibilita vaticinar la demencia con mayor exactitud que las pruebas de memoria o las mediciones del encogimiento cerebral, dos métodos utilizados habitualmente para diagnosticar la enfermedad, según publicó la revista Nature Mental Health.
Los investigadores desarrollaron la prueba predictiva analizando resonancias magnéticas funcionales (IRMf) para detectar cambios en la red de modos por defecto (DMN) del cerebro, cuya función es conectar regiones del cerebro para realizar funciones cognitivas específicas, siendo la primera red neuronal afectada por el Alzheimer.
Utilizaron imágenes de IRMf de más de 1 100 voluntarios del Biobanco para estimar la conectividad efectiva entre 10 regiones del cerebro, que constituyen la red de modo por defecto.
Los expertos asignaron a cada paciente un valor de probabilidad de demencia basado en la medida en que su patrón de conectividad efectiva se ajustaba a uno que indica demencia o a un patrón similar al de control, y luego compararon estas predicciones con los datos médicos de cada paciente.
Los resultados mostraron que el modelo predijo con exactitud la aparición de la demencia hasta nueve años antes de que se hiciera un diagnóstico oficial y con una precisión superior al 80 %.
En los casos en que los voluntarios desarrollaron demencia, el modelo podía predecir con un margen de error de dos años el tiempo exacto que tardaría el diagnóstico.
Los investigadores también examinaron si los cambios en la DMN estarían causados por factores de riesgo conocidos de demencia.
Su análisis demostró que el riesgo genético de padecer Alzheimer estaba estrechamente relacionado con los cambios de conectividad en la DMN, lo que apoya la idea de que estos cambios son específicos de esta afección.
También descubrieron que es probable que el aislamiento social aumente el riesgo de demencia, a través de su efecto sobre la conectividad en la DMN.
10 junio 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia
jun
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Una de cada cinco personas se siente sola (el 20 %), una soledad no deseada que se prolonga durante dos o más años en seis millones y medio de personas en España: el 13,5 % de la población sufre soledad crónica.
La soledad afecta más a las mujeres, a los jóvenes, a los que tienen peor salud y a las personas con discapacidad, según recoge el «Barómetro de la Soledad no Deseada en España 2024″ de la Fundación ONCE y Fundación AXA para el Observatorio SoledadES.
La mitad de la población (49,3 %) sufre soledad no deseada en el presente o ha sufrido soledad de manera intensa en el pasado, ha explicado el investigador Raúl Ruiz en la presentación del informe.
En el acto, el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, ha destacado la importancia de apostar por políticas públicas con «enfoque transversal» para el conjunto de la sociedad.
Para prevenir estas situaciones, Bustinduy ha apostado «por crear y afianzar redes de amistad, de vecindad, de asociacionismo, redes de apoyo que puedan dar estabilidad» pero que no generen estigma.
«La soledad no deseada puede afectar a personas a lo largo de su ciclo vital, pero con diferente intensidad y consecuencias; una experiencia que está íntimamente asociada con el contexto en el que se vive», ha recordado.
Más de dos años
El aislamiento involuntario es en este momento «un problema persistente», alerta el barómetro. Dos de cada tres personas (67,7 %) que sufren soledad llevan en esta situación desde hace más de 2 años y un 59 % desde hace más de tres. Así, en España la soledad crónica (que se prolonga dos o más años) alcanza al 13,5 % de la población.
La soledad no deseada es algo más frecuente entre mujeres (el 21,8 %) que entre hombres (18 %); las diferencias son especialmente amplias a partir de los 55 años, en los niveles educativos más bajos y en los núcleos urbanos.
soledad no deseada
Por edad, está especialmente extendida entre la juventud y va decreciendo con la edad hasta alcanzar el valor mínimo en la franja de 55 a 74 años, aunque vuelve a subir a partir de los 75 años.
Tener una salud muy mala, mala o regular implica una probabilidad tres veces mayor de sufrir soledad no deseada y vivir con un problema de salud mental, en 2,4 veces.
Existen factores que además de una mayor prevalencia implican una mayor probabilidad de sufrir soledad no deseada, como tener dificultades económicas, origen extranjero, vivir con un problema de salud mental, ser joven o estar en desempleo teniendo entre 30 y 54 años.
Las personas en situación de desempleo tienen una tasa de soledad más del doble que las personas ocupadas (36,3 % frente a 16,2 %).
De hecho, la soledad está muy relacionada con la capacidad económica. La prevalencia de la soledad no deseada es más del doble dos veces más frecuente en la población que viven en los hogares que llegan con dificultad a fin de mes (30,1%) que en los que llegan con facilidad (13,3%).
Menos relaciones familiares, más soledad
El grado de satisfacción con la cantidad de relaciones familiares y de amistad es una circunstancia clave para la soledad no deseada: más de la mitad de las personas que sufren soledad no deseada afirman tener menos relaciones familiares (un 53,3 %) y de amistad (63,2 %) de las que quisieran.
El barómetro, basado en una encuesta realizada a 2 900 personas de entre 18 y más años, muestra que las relaciones sociales online son más frecuentes entre las personas que sufren soledad que entre las que no la sufren.
No obstante, independientemente de la vida social, «el núcleo de convivencia es clave», ha señalado el experto. La prevalencia de la soledad no deseada es el doble entre las personas que viven solas que entre las que viven acompañadas (34,5 % frente al 17,4 %).
Otro aspecto vinculado con la soledad es el de la educación. Es mucho menos frecuente entre las personas con mejor nivel educativo, y además, carecer de estudios superiores eleva la probabilidad de sufrir soledad en un 50 %.
¿Qué piensa la sociedad sobre la soledad?
El 95 % de las personas piensa que la soledad no deseada es un problema extendido en la sociedad y un problema social cada vez más importante; también que cualquier persona es vulnerable a la soledad y que es un problema invisible.
La lucha contra la soledad debe ser una cuestión prioritaria para las administraciones públicas y una responsabilidad compartida por el conjunto de la sociedad, ha aseverado Matilde Fernández, presidenta del observatorio.
No varía notablemente entre el entorno urbano y el rural. De hecho, la menor prevalencia de la soledad se observa en los municipios de menor tamaño (menos de 10 000 habitantes) y la mayor en tamaños de hábitat intermedios (municipios de 10 000 a 50 000 habitantes).
La soledad en la juventud es muy elevada en las zonas rurales y disminuye en las grandes urbes. Sin embargo, entre las personas mayores sucede a la inversa; la soledad es mucho mayor en las grandes urbes que en las zonas rurales.
10 junio 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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11
El director de la empresa rusa NtechLab, Aleksei Palamarchuk, informó hoy que esa compañía desarrolla una red neuronal para la detección temprana del Alzheimer, la demencia y otras enfermedades neurodegenerativas.
Según el directivo, por estudios de análisis de videos basados en la Inteligencia Artificial, los cambios cerebrales que conducen a estas enfermedades pueden identificarse 10 años antes de que aparezcan las manifestaciones clínicas y comenzar asi el tratamiento preventivo, precisó la agencia de noticias TASS.
Justo en estos momentos hemos creado la red neuronal que ayudará a identificar los cambios degenerativos en el cerebro, como la enfermedad de Alzheimer y la demencia, afirmó.
Palamarchuk explicó que la red neuronal, entrenada en colaboración con médicos de la más alta categoría en los grandes hospitales y centros médicos rusos, procesará imágenes del cerebro por tomografía computarizada y resonancia magnética.
Anteriormente, NtechLab anunció que había recibido un certificado para una red neuronal que puede diagnosticar accidentes cerebrovasculares isquémicos y hemorrágicos.
10 junio 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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11
Investigadores de las universidades de Málaga (UMA) y Alicante (UA) han desarrollado una herramienta de inteligencia artificial para ayudar a diagnosticar de forma precoz el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) en menores, afección que se calcula que padece el 5 % de la población.
El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que provoca un deterioro masivo del funcionamiento ejecutivo y que se manifiesta en menores de corta edad con síntomas como déficit de atención o una hiperactividad e impulsividad descontroladas.
Sin embargo, esos signos son a menudo «la punta del iceberg» de otros síntomas más complejos, como problemas a la hora de tomar decisiones, planificar, organizar, retener información importante o dificultades en la regulación de las emociones y la motivación, explican a EFE las profesoras de la Facultad de Psicología y Logopedia de la UMA Rocío Juárez y Rocío Lavigne, que han llevado a cabo este trabajo junto a los investigadores de la UA Ignasi Navarro y Juan Ramón Rico.
Una evaluación temprana del TDAH resulta crucial para el tratamiento eficaz de las personas afectadas, pero se trata de un proceso «largo y complicado» que requiere de la intervención de profesionales de distintas disciplinas, como neuropediatras, psiquiatras infantiles, psicólogos o psicopedagogos, y de la implicación de familiares, profesores y otros «observadores» próximos al menor.
La importancia de la detección precoz
Según las docentes de la UMA, es difícil hacer un diagnóstico exhaustivo de TDAH antes de los seis años de edad: de ahí surge la idea de diseñar un instrumento que pueda ayudar a los expertos a detectar cuanto antes este trastorno.
Los investigadores de la UMA y la UA han creado un programa informático en el que han introducido los parámetros de 694 menores de 6 a 12 años diagnosticados con TDAH en la última década en España.
Cuando se introducen los datos de nuevos pacientes en el software, éste analiza las variables ya incorporadas, busca patrones comunes y establece un posible diagnóstico.
«Nuestro modelo de aprendizaje automático predijo hábilmente los diagnósticos de TDAH en el 90 % de los casos y existe potencial para mejorar aún más ampliando nuestra base de datos», señalan los responsables de la investigación en un artículo científico que publica la National Library of Medicine.
Como comenta Rocío Lavigne, la idea es aumentar esta muestra con hasta 1 500 o 2 000 sujetos en España, e incluso incorporar casos del extranjero para extender el proyecto a otros países europeos.
En proceso de validación
La herramienta es de momento una prueba piloto que debe perfeccionarse «para que sea aún más inteligente y prediga mejor».
Además, tiene que validarse antes de que la puedan utilizar profesionales de la medicina, la psicología o la educación, y este es un proceso que puede requerir un par de años más de trabajo.
El equipo ha pedido una ayuda de 28 600 euros al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, a través de la convocatoria de 2023 de Proyectos de Generación del Conocimiento, para llevar a cabo esta segunda fase del proyecto.
Rocío Juárez deja claro que este software pretende ser «una ayuda» en la detección de los casos de TDAH, «jamás el sustituto de un profesional».
El objetivo último es facilitar un diagnóstico precoz, algo que resulta «fundamental» en estos casos, puesto que «cuanto más se tarde, mayor riesgo hay de que existan comorbilidades», es decir, otras afecciones añadidas, advierte la profesora de la UMA.
De hecho, este es uno de los trastornos con mayor tasa de comorbilidad, ya que en el 85 % de los casos los diagnosticados presentan dos o más afecciones a la vez.
«Cuanto antes se detecte, antes se iniciará el tratamiento psicoeducativo y/o farmacológico, en caso de ser necesario, y se conseguirá que el desajuste sea el mínimo posible y que el menor tenga el mayor bienestar», inciden las expertas.
09 junio 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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El síndrome de las piernas inquietas motiva una irrefrenable necesidad de moverlas y puede alterar gravemente la vida de las personas que lo sufren; un equipo de científicos ha descubierto ahora las causas que se esconden tras ese trastorno y han apuntado posibles formas de tratarlo.
Los investigadores, que hoy publican las conclusiones de su trabajo en Nature Genetics, han descubierto las pistas genéticas que están detrás del síndrome, una afección frecuente entre las personas mayores, y su hallazgo podría además ayudar a identificar a los individuos con mayor riesgo de padecerlo y las posibles maneras de combatirlo.
El síndrome de las piernas inquietas, resume hoy la revista, puede provocar una desagradable sensación de arrastre en las piernas y una necesidad imperiosa de moverlas, y aunque algunas personas experimentan los síntomas sólo ocasionalmente, otras los padecen todos los días y esos síntomas suelen empeorar al atardecer o por la noche y alterar gravemente el sueño.
A pesar de que esta afección es relativamente frecuente -uno de cada 10 ancianos experimenta síntomas y hasta el 3 por ciento se ven gravemente afectados y buscan ayuda médica-, se sabe poco sobre sus causas, pero sí que estas personas suelen padecer otras afecciones, como depresión o ansiedad, trastornos cardiovasculares, hipertensión y diabetes, aunque se desconoce el motivo.
Estudios anteriores habían identificado 22 «localizaciones» de riesgo genético, regiones del genoma que contienen cambios asociados a un mayor riesgo de desarrollar la afección, pero no se conocen todavía «biomarcadores» -firmas genéticas- que puedan utilizarse para diagnosticar objetivamente la enfermedad.
Comprender la base genética para mejorar el tratamiento
Ahora, un equipo internacional dirigido por investigadores del Instituto Helmholtz de Neurogenómica de Múnich, el Instituto de Genética Humana de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) y la Universidad de Cambridge reunió y analizó los datos de tres estudios de asociación del genoma completo.
Compararon el ADN de pacientes y controles sanos para buscar las diferencias más frecuentes en los afectados por el síndrome de las piernas inquietas, y al combinar los datos, el equipo creó un potente conjunto de datos con más de 100 000 pacientes.
El investigador Steven Bell, de la Universidad de Cambridge, ha destacado que el estudio es el mayor de su clase sobre este trastorno, y ha asegurado que «al comprender las bases genéticas del síndrome de las piernas inquietas, esperamos encontrar mejores formas de controlarlo y tratarlo, lo que podría mejorar la vida de muchos millones de personas afectadas en todo el mundo».
El equipo identificó más de 140 nuevas «localizaciones» genéticas de riesgo, multiplicando por ocho el número conocido, incluidos tres en el cromosoma X, y no encontró diferencias genéticas marcadas entre hombres y mujeres, a pesar de que la enfermedad es dos veces más común en las mujeres que en los hombres, lo que sugiere que una compleja interacción de la genética y el medio ambiente (incluidas las hormonas) puede explicar las diferencias de género que se observan en la vida real.
Dos de las diferencias genéticas identificadas por el equipo afectan a genes conocidos como receptores del «glutamato 1 y 4″, importantes ambos para la función nerviosa y cerebral.
Esos receptores podrían ser el objetivo de algunos fármacos que ya existen o utilizarse para desarrollar otros nuevos, han apuntado los investigadores, y han asegurado que los primeros ensayos ya han mostrado respuestas positivas a esos medicamentos en pacientes con síndrome de piernas inquietas.
Los investigadores han subrayado además que sería posible utilizar información básica como la edad, el sexo y los marcadores genéticos para clasificar con precisión quién tiene más probabilidades de padecer síndrome de piernas inquietas grave en nueve de cada diez casos.
Emplearon además diversas técnicas para entender cómo puede afectar el síndrome de piernas inquietas a la salud en general y la información genética para examinar las relaciones causa-efecto, y los resultados revelaron que el síndrome aumenta el riesgo de desarrollar diabetes.
Aunque se cree que unos niveles bajos de hierro en la sangre son desencadenantes del síndrome de las piernas inquietas, los investigadores no hallaron vínculos genéticos sólidos con el metabolismo del hierro, aunque han corroborado que tampoco pueden descartarlo por completo como un factor de riesgo.
05 junio 2024|Fuente: EFE |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2023. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia