may
18
Prevenir el consumo de drogas y abordar sus consecuencias sociales y sanitarias es hoy el objetivo del plan integral contra ese flagelo presentado en Chile para el período 2024-2030.
El programa contiene ocho objetivos estratégicos, 42 medidas intersectoriales y 123 acciones prioritarias y toma en cuenta las desigualdades generadas por el uso de estupefacientes en poblaciones con mayores niveles de vulnerabilidad.
Según la ministra del Interior, Carolina Tohá, el consumo de narcóticos no está aumentando en el país, pero el negocio en torno a ellos es tremendo y ocasiona muchos daños a la sociedad porque trae violencia, armas y delitos.
Precisó la titular que el plan es amplio, aunque el foco está en tratar de que los niños crezcan en un ambiente sano, evitar la instalación del delito en los barrios y acompañar a las personas adictas.
Si bien las drogas causan problemas en todas las edades, en los menores son enormes, dijo Tohá.
Dentro de las acciones del programa figuran fortalecer la prevención en escuelas y barrios, mejorar el control de insumos utilizados para la fabricación de narcóticos, abordar las drogas sintéticas y sus consecuencias y aplicar estrategias de trabajo comunitario.
17 mayo 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia
nov
17
La Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH) ha alertado de que la cirrosis hepática y la hepatitis asociadas al alcohol -tradicionalmente enfermedades masculinas- están aumentando de ‘forma alarmante en mujeres’ y serán una epidemia en la próxima década.
En un comunicado con motivo de la conmemoración este miércoles del Día Mundial sin Alcohol, los expertos aseguran que se trata de una tendencia que se inició en el mundo anglosajón, que comienza a manifestarse ya en los países mediterráneos y a la que hay que poner freno con sensibilización y prevención.
Según los hepatólogos, se debe al cambio en el patrón de consumo -cada vez más jóvenes y más mujeres-, similar al del tabaquismo, y a los ‘atracones’ de los fines de semana.
El consumo de alcohol debe ser ocasional y moderado, asegura Ramón Bataller, jefe de Hepatología del Clínica de Barcelona, al advertir de que tanto la ingesta diaria como el patrón de bebida tipo ‘atracón’ puede tener efectos perjudiciales no solo para el hígado sino para otros órganos, con un mayor riesgo para mujeres y jóvenes.
El experto subraya que cuanto antes se empieza a beber, más posibilidades hay de generar adicción y acabar en cirrosis, aunque precisa que el alcohol no afecta a todas las personas por igual y hay factores como la predisposición genética o la obesidad que aumentan su efecto nocivo. Por su parte, el presidente de la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH), Manuel Romero Gómez, insiste en desmentir la falsa creencia extendida entre la juventud de que ‘los fines de semana, me pongo hasta arriba, pero entre semana no pruebo ni gota, así que no pasa nada’. ‘No hay consumo seguro de alcohol’, destacan los hepatólogos, y advierten de que ‘por cada niño que bebe alcohol hay un adulto que lo ha hecho posible’.
17 noviembre 2023 (EFE) – Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
sep
25
Las personas que consumen tabaco y cannabis de manera conjunta se exponen a mayores probabilidades de sufrir ansiedad y depresión que aquellas que sólo consumen tabaco o las que no consumen ninguna de las dos sustancias.
El tabaco y el cannabis predominan en todo el mundo con un uso conjunto que aumentó en las instancias actuales de creciente legalización del cannabis.
El estudio Associations between tobacco and cannabis use and anxiety and depression among adults … publicado en la revista especializada Plos One examina la relación entre los trastornos de ansiedad y depresión con tres patrones definidos de consumo de tabaco y cannabis (exclusivo de tabaco, exclusivo de cannabis, consumo conjunto de tabaco y cannabis) y ningún consumo.
Efectos de la legalización del cannabis
El uso conjunto de tabaco y cannabis (definido en este estudio como el uso simultáneo de ambas sustancias en el último mes) también es prevalente: el 33% de las personas que consumen tabaco también informan haber consumido cannabis.
En medio de la creciente legalización del cannabis, su uso aislado o en conjunto con el tabaco han aumentado recientemente.
El aumento del consumo de cannabis de 2 a 10 veces, y su generalización entre quienes fuman o no cigarrillos plantea preocupaciones sobre los daños desconocidos que se relacionan con el consumo de cannabis en general y el uso conjunto de tabaco y cannabis en particular.
El uso conjunto puede aumentar la exposición a sustancias tóxicas y plantear peligros adicionales además de asociarse con mayores riesgos de dependencia de la nicotina y el cannabis y peores resultados al dejar de fumar, tanto el tabaco como el cannabis. Sin embargo, la comprensión de la asociación entre el uso conjunto y la salud sigue siendo escasa.
Nhung Nguyen y sus colegas, integrantes del Centro de Investigación y Educación para el Control del Tabaco de la Universidad de California, San Francisco, EE.UU., analizaron datos referidos al consumo de sustancias y la salud mental de 53 843 adultos.
Las personas fueron encuestadas como parte del Estudio de Salud Ciudadana Covid-19 (Citizen Science Study – CSS), que contenía información comprendida entre los años 2020 y 2022.
El CCS se propuso generar conocimiento sobre las consecuencias a largo plazo de la pandemia de Covid-19 a partir de los síntomas, comportamientos y enfermedades informadas por los participantes.
La inscripción y el seguimiento del estudio fueron continuos, sin objetivos de inscripción preespecificados ni fechas de finalización. La participación de los encuestados se concentró en residentes de EE.UU.
Al preguntar las encuestas mensuales de forma reiterada sobre la salud mental se registraron múltiples evaluaciones a participantes individuales con resultados anidados.
Los autores aclaran que midieron la ansiedad y la depresión por separado mediante instrumentos específicos en atención a la coexistencia de sus síntomas y manifestarse con efectos diferentes e independientes sobre el deterioro funcional y la discapacidad.
Patrones de consumo de tabaco y cannabis
En la encuesta de referencia los consumos de ambas sustancias se informaron por separado.
Los participantes dieron cuenta de la cantidad de días que en el último mes habían consumido tanto productos de tabaco (es decir, cigarrillos, cigarrillos electrónicos y productos combustibles como puros/cigarros) y cualquiera de cannabis, sea de tipo combustible o vaporizado.
Según los consumos informados, los participantes se clasificaron en cuatro grupos:
exclusivo de tabaco, exclusivo de cannabis, conjunto (consumo de ambas sustancias en los últimos 30 días) y ningún consumo.
Estos grupos permitieron investigar los trastornos de salud mental provocados por cualquier posible efecto independiente o conjunto del uso de una o ambas sustancias, respectivamente.
Características de los participantes
La mayoría eran mujeres (67,9 %), blancas no hispanas (81,8 %), identificadas como cisgénero (98,6%) y tenían estudios universitarios o graduados universitarios (51,4%) con una edad media de 51,0 ± 15,2 años.
¿¿La puntuación media del estatus social subjetivo fue de 6,9 ??± 1,6. Más de la mitad informó haber hecho ejercicio más de una vez por semana durante el año pasado. Los participantes informaron haber consumido una mediana de 1 trago de alcohol en la última semana.
En cuanto a los patrones de consumo de tabaco y cannabis, 2 617 participantes (4,9 % de la muestra) reportaron consumo exclusivo de tabaco; 3 702 (6,9 %) de cannabis, 889 (1,6 %) co-consumo y 46 633 (86,6 %) ningún consumo. En términos de salud mental, 6 428 (11,9 %) y 6 794 (12,6 %) participantes informaron haber experimentado ansiedad y depresión en al menos una encuesta mensual, respectivamente.
El 26,5 % de los integrantes del grupo consumidor de ambas sustancias manifestó ansiedad y 28,3 % depresión, mientras que, entre las personas sin consumo, los porcentajes de ansiedad y depresión fueron del 10,6 % y el 11,2 %, respectivamente.
Revelaciones del trabajo
El estudio reveló que las probabilidades de padecer estos trastornos mentales eran 1,8 veces mayores entre los consumidores simultáneos que entre los no consumidores. Además, tanto consumo conjunto como el exclusivo de cannabis se asoció a una mayor probabilidad de padecer ansiedad en comparación con el exclusivo de tabaco.
El artículo asocia la menor frecuencia de actividad física con mayores probabilidades de ansiedad y depresión. En este sentido, señala que podría ser un mediador en la relación entre el consumo de sustancias y la salud mental, puesto que las personas consumidoras de tabaco o cannabis pueden realizar menos actividad física, limitaciones que a su vez deparan una peor salud mental.
Casi la mitad de los adultos estadounidenses consideran el cannabis como automedicación para tratar los síntomas de depresión y ansiedad, aunque la evidencia insuficiente sobre sus beneficios terapéuticos impida convalidarlo.
Del mismo modo, una cantidad apreciable de adultos jóvenes, malinterpretan la nicotina como si ayudara a aliviar el estrés, la ansiedad y la depresión. Al finalizar, los autores proponen que las campañas de salud pública deberían resaltar estas percepciones erróneas de la población, haciendo hincapié en los posibles efectos negativos que acarrean el tabaco y el cannabis en la salud mental.
Referencia
Nguyen N, Peyser ND, Olgin JE, Pletcher MJ, Beatty AL, Modrow MF, et al.Associations between tobacco and cannabis use and anxiety and depression among adults in the United States: Findings from the COVID-19 citizen science study. PloS ONE. 2023; 18(9): e0289058. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0289058
20/09/2023
Fuente: (SIIC Salud) Tomado de Noticias biomédicas
sep
25
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Indiana (EE.UU.) han descubierto una región cerebral olvidada que podría desempeñar un papel fundamental en la probabilidad de que una persona con trastornos por consumo de drogas recaiga, incluso tras un largo periodo de abstinencia. Los estudios anteriores en el campo de la investigación de la adicción se han centrado en la corteza prefrontal medial, con pocos resultados, lo que llevó a estos investigadores a centrarse en la corteza motora suplementaria, descubriendo que esta zona desempeña un papel más importante en el riesgo de recaídas, lo que podría ser una nueva diana terapéutica para prevenirlas.
El estudio, publicado en Biological Psychiatry, se ha centrado en las conductas de búsqueda de cocaína en modelos animales, midiendo los niveles de excitabilidad en el córtex motor tras 45 días de abstinencia. Descubrieron que la hiperexcitabilidad en el córtex motor aumentaba en ese momento y utilizaron una intervención para calmar la excitabilidad que se producía en esa parte del cerebro.
Los autores señalan que esta región del cerebro nunca ha recibido demasiada atención en la investigación de la adicción, por lo que demostraron un cierto entusiasmo con este hallazgo, especialmente en el hecho de cómo puede cambiar la forma en que se trate la adicción mediante el uso de métodos menos invasivos, como la estimulación magnética transcraneal.
Referencia
Huang D, Ma YY. Increased Excitability of Layer 2 Cortical Pyramidal Neurons in the Supplementary Motor Cortex Underlies High Cocaine-Seeking Behaviors. Biol Psychiatry. 2023; S0006-3223(23)01354-9. doi: 10.1016/j.biopsych.2023.06.002
21/09/2023
Fuente: (Neurologia.com) Tomado de Noticia © Viguera Editores, S.L.U. 2023
sep
1
El consumo de cocaína sigue siendo un problema de salud pública, pero a pesar de los esfuerzos que se han realizado, no se ha aprobado ningún fármaco para resolver la adicción a la cocaína. Las investigaciones sugieren que el metilfenidato (MPH; Ritalin®), que es un fármaco para el trastorno por déficit de atención e hiperactividad, podría servir como terapia de sustitución de la cocaína, pero los resultados clínicos han sido dispares. Aunque varios laboratorios han producidos derivados del MPH para someterlos a prueba, seguía habiendo partes de la molécula químicamente inaccesibles. Ahora, investigadores
que publican un informe en ACS Central Science han superado ese obstáculo.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, más de 5 millones de estadounidenses declararon consumir cocaína de forma activa en 2020, y casi 25 000 estadounidenses murieron de una sobredosis relacionada con la cocaína en 2021. Aunque los fármacos de moléculas pequeñas han demostrado su eficacia en el tratamiento de
otras adicciones a las drogas ―por ejemplo, la metadona como terapia para el abuso de la heroína―, no existe ningún medicamento de este tipo para el consumo de cocaína. El MPH se ha considerado un posible tratamiento porque se comporta de forma similar a la droga ilícita, ya que aumenta los niveles de dopamina en el cerebro al bloquear la recaptación de dopamina. Además, los estudios clínicos han demostrado que el riesgo de abuso de MPH es menor que el de la cocaína. Aunque los estudios en animales han demostrado que el MPH puede reducir la dependencia de la cocaína, los estudios en humanos han arrojado
resultados más dispares. Por eso, los investigadores están desarrollando bibliotecas de derivados del MPH, en busca de moléculas con mayor eficacia clínica. Sin embargo, hasta hace poco era difícil crear derivados de uno de los componentes químicos del MPH: su anillo de piperidina. W. Dean Harman y sus colegas quisieron corregir esta deficiencia adoptando un enfoque organometálico.
Utilizando un reactivo a base de tungsteno, los investigadores sintetizaron una biblioteca de análogos del MPH modificados específicamente en el anillo de piperidina con diversos grupos químicos. Y mientras que el MPH es una mezcla de cuatro isómeros ―moléculas idénticas con pequeñas diferencias estructurales―, el nuevo método permitió a los investigadores sintetizar y purificar compuestos que estaban formados predominantemente por un solo isómero. Esto podría ser importante en los estudios clínicos, ya que los diferentes isómeros de algunos fármacos pueden tener repercusiones significativas
en la eficacia terapéutica o la seguridad. Aún queda por determinar si alguno de estos análogos del MPH resulta eficaz contra la adicción a la cocaína, pero los investigadores señalaron que el nuevo protocolo podría ser ampliamente aplicable al desarrollo farmacéutico, dada la ubicuidad del anillo de piperidina en los fármacos de moléculas
pequeñas.
Referencia
Jonathan D. Dabbs, Megan N. Ericson, Justin H. Wilde, Rachel F. Lombardo, Earl C. Ashcraft, Diane A. Dickie, and W. Dean Harman. The Tungsten-Promoted Synthesis of Piperidyl-Modified erythro-Methylphenidate Derivatives. ACS Cent. Sci. 2023. https://doi.org/10.1021/acscentsci.3c00556
https://pubs.acs.org/doi/10.1021/acscentsci.3c00556
30/08/2023( EurekAlert) Tomado News Release
ago
29
Caracas 25 de agosto de 2023 (OPS/OMS)- En línea con el Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT), promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), Venezuela prohibió la comercialización de cigarrillos electrónicos y productos afines, convirtiéndose en el octavo país de la región en adoptar esta medida.
Actualmente, 21 países de las Américas regulan de algún modo los sistemas electrónicos de administración de nicotina. Ocho de ellos (Argentina, Brasil, México, Nicaragua, Panamá, Suriname, Uruguay y Venezuela) prohíben su venta, y los otros 13 han adoptado parcial o totalmente una o más medidas, aunque sin un enfoque común. En la región solo restan 14 Estados en adoptar alguna acción contra estos productos.
En junio pasado, una resolución previa del Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS) había prohibido la venta de vapeadores a personas menores de edad. La resolución del 2 de agosto prohíbe totalmente “la fabricación, almacenamiento, distribución, circulación, comercialización, importación, exportación, uso, consumo, publicidad, promoción y patrocinio de los sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN), sistemas electrónicos sin administración de nicotina”, así como sus “consumibles”, “accesorios”, y “los productos de tabaco calentado”.
“Con esta medida, Venezuela reafirma su compromiso en la lucha contra el tabaco, sumando otro logro a los ya alcanzados: Ratificación del Convenio Marco para el Control del Tabaco, CMCT (2005); Resolución O3O de Ambientes 100% Libres de Humo de Tabaco (2011); Resolución 071 Prohibición Total de Publicidad, Promoción y Patrocinio de Productos de Tabaco, y Regulación de la Venta de productos de tabaco (2019) y Ley Aprobatoria de la Ratificación del Protocolo para la Eliminación del Comercio Ilícito de Productos de Tabaco (2021)”, enumeró Cristián Morales, Representante de la Organización Panamericana de la Salud en Venezuela, organización que felicitó al país por haber tomado esta decisión, pues considera que la comercialización de estos productos es un retroceso en la lucha contra el tabaco y las enfermedades que genera.
Productos peligrosos
Los cigarrillos electrónicos son la forma más común de los sistemas electrónicos de administración de nicotina. Al usarse, calientan un líquido para crear aerosoles que son inhalados por el usuario. Estos «e-líquidos» contienen nicotina, una sustancia altamente adictiva del tabaco, y otros aditivos, aromas y productos químicos, algunos de los cuales son tóxicos para la salud del usuario como de quienes están expuestos a ellos.
También se ha demostrado que los niños y adolescentes que consumen cigarrillos electrónicos tienen al menos el doble de probabilidades de fumar cigarrillos tradicionales más adelante en su vida.
La OPS/OMS recomienda a los gobiernos poner en marcha reglamentaciones en línea con lo establecido en el CMCT y sus decisiones, referidas a la prohibición de la comercialización incluida su importación, distribución o venta de sistemas electrónicos de administración de nicotina así como regulaciones sobre su uso en lugares públicos, prohibición de su publicidad y promoción, aplicarles impuestos y otras similares a las que se aplican a productos de tabaco.
En el continente americano el tabaco mata a un millón de personas por año. Si bien las medidas adoptadas desde la entrada en vigor del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco (CMCT) en 2005, permitieron reducir el porcentaje de fumadores de 28% del total de la población en 2000 al 16,3% en 2020, estos logros se ven amenazados por los productos novedosos de tabaco y nicotina. Actualmente, el 11,3% de los adolescentes de 13 a 15 años de la región consume tabaco, superior al promedio mundial de 10,3%.
Resolución 414
Este es el texto de la resolución 414 publicada en la Gaceta Oficial 42.682, con fecha 2 de agosto de 2023: “Se prohíbe la fabricación, almacenamiento, distribución, circulación, comercialización, importación, exportación, uso, consumo, publicidad, promoción y patrocinio de los sistemas electrónicos de administración de nicotina, sistemas electrónicos similares sin nicotina, consumibles, depósitos o cartuchos, envases de consumibles de recarga, y demás accesorios, productos de tabaco calentado convencionales, y productos análogos».
Organización Panamericana de Salud