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La Organización de Naciones Unidas publicará hoy su previsión global sobre salud y bienestar humano, que describe cambios críticos y señales sobre la necesidad de prepararse mientras el mundo se acerca a una policrisis.
El texto, titulado «Navegando nuevos horizontes: un informe prospectivo mundial sobre la salud planetaria y el bienestar humano», busca llamar la atención sobre una serie de desafíos emergentes que podrían perturbar a la humanidad.
Elaborado por la Agencia de la ONU para el Medio Ambiente (Pnuma), el reporte anuncia ocho cambios globales críticos «que están acelerando la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y naturaleza, y la contaminación y los desechos».
De acuerdo con el Pnuma, cientos de expertos globales identificaron 18 señales de cambio que ofrecen una visión de las posibles perturbaciones, tanto positivas como negativas, que el mundo debe vigilar de cerca.
Entre los más críticos, el documento identifica la escasez de recursos y la competencia que reconfiguran la dinámica de la seguridad global.
Como consecuencia se prevé un aumento del 400 % en la demanda de minerales críticos en los próximos 15 años, lo que puede amenazar la biodiversidad en terrenos prístinos.
Asimismo, advierte un aumento de los conflictos armados, la violencia y la desinformación junto a la persistencia y ampliación de las desigualdades y los desplazamientos forzados masivos como consecuencia de los conflictos, los fenómenos climáticos extremos y los impactos ambientales.
Como respuesta, el informe propone una mejor toma de decisiones mediante la creación de un nuevo contrato social, la adopción de una gobernanza ágil y adaptativa y el aumento de los datos y conocimientos integrados y accesibles.
Se trata, a juicio del organismo, de un duro recordatorio de la interconexión y la fragilidad de los sistemas en el siglo XXI al tiempo que llama a priorizar los beneficios a corto plazo por sobre la acción anticipatoria y la preparación pone en peligro la prosperidad a largo plazo y la salud del planeta.
No obstante, también señala el enorme potencial y el ingenio humano que se pueden aprovechar con espíritu de descubrimiento y cooperación para ofrecer soluciones a la triple crisis.
15 julio 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2024. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.|Noticia
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Un estudio halla que los pacientes consumen en promedio más del doble de la cantidad diaria recomendada de sodio, con poca variación entre los grupos socioeconómicos
Las personas con enfermedades cardíacas son las que más se benefician de una dieta baja en sodio, pero, en promedio, consumen más del doble de la ingesta diaria recomendada de sodio, según un estudio presentado en la Sesión Científica Anual del Colegio Americano de Cardiología.
El sodio es un nutriente esencial, pero consumirlo en exceso puede elevar la presión arterial, lo que daña los vasos sanguíneos y obliga al corazón a trabajar más. El exceso de sodio también puede hacer que el cuerpo retenga líquidos, lo que agrava afecciones como la insuficiencia cardíaca. Las Pautas Dietéticas actuales de EE. UU. publicadas por el Departamento de Agricultura de EE. UU. recomiendan que la mayoría de los adultos limiten su consumo de sodio a menos de 2,300 mg / día, lo que equivale a aproximadamente 1 cucharadita de sal de mesa. Para las personas con enfermedades cardiovasculares, el límite es aún más bajo, de 1.500 mg/día, según las recomendaciones de las directrices de la ACC y la Asociación Americana del Corazón.
Este nuevo estudio encontró que, entre una muestra de más de 3,100 personas con enfermedad cardiaca, el 89 por ciento consumía más del máximo diario recomendado de 1,500 mg de sodio y, en promedio, los participantes del estudio consumían más del doble de esta cantidad. Limitar la ingesta de sodio es una modificación fundamental del estilo de vida que se ha demostrado que reduce las probabilidades de eventos cardiovasculares adversos importantes posteriores, señalaron los investigadores. Sus hallazgos subrayan los desafíos a los que se enfrentan muchas personas para mantenerse dentro de los límites recomendados de sodio, independientemente de otros factores como el estatus socioeconómico.
Estimar las cantidades de sodio en una comida puede ser un desafío», dijo Elsie Kodjoe, MD, MPH, residente de medicina interna en el Hospital Regional Piedmont Athens en Athens, Georgia, y autora principal del estudio. «Las etiquetas de los alimentos ayudan en la estimación del sodio en la dieta al proporcionar cantidades de sodio en los alimentos envasados. Sin embargo, seguir una dieta baja en sodio sigue siendo un desafío, incluso para las personas con enfermedades cardiovasculares que tienen un fuerte incentivo para adherirse».
El estudio utilizó datos de pacientes diagnosticados con ataque cardiaco, accidente cerebrovascular, insuficiencia cardiaca, enfermedad de las arterias coronarias o angina de pecho que participaron en la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES, por sus siglas en inglés) entre 2009 y 2018.
Los investigadores estimaron la ingesta de sodio basándose en cuestionarios en los que se pedía a los participantes que informaran de todo lo que habían consumido en 24 horas. Según los resultados, los participantes del estudio con enfermedad cardiovascular consumieron un promedio de 3,096 mg de sodio al día, que es ligeramente más bajo que el promedio nacional de 3,400 mg/día reportado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
La diferencia relativamente pequeña en la ingesta de sodio sugiere que las personas con enfermedad cardiovascular no están limitando mucho su ingesta en comparación con la población general, y también están consumiendo más del doble de lo que se recomienda», dijo Kodjoe. «Para que sea más fácil para los pacientes adherirse a las pautas dietéticas, necesitamos encontrar formas más prácticas para que el público en general estime los niveles de sodio en la dieta o tal vez considere una reducción en el contenido de sodio de los alimentos que consumimos directamente de la fuente».
Los investigadores también compararon la ingesta de sodio entre personas de diferentes grupos socioeconómicos, pero no encontraron diferencias significativas entre los participantes más ricos y los menos ricos después de tener en cuenta la edad, el sexo, la raza y el nivel educativo.
Los individuos pueden tomar medidas proactivas para reducir su ingesta de sodio, dijo Kodjoe. Esto incluye preparar más comidas en casa, donde tienen un mayor control sobre el contenido de sodio, y prestar mucha atención a las etiquetas de los alimentos, especialmente a los alimentos con niveles de sodio de 140 mg o menos por porción. Los investigadores sugirieron que una mejor educación sobre los beneficios de limitar el sodio también podría ayudar a motivar a más personas a seguir las recomendaciones.
La enfermedad cardiovascular es real, y es la causa número uno de morbilidad y mortalidad en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud», dijo Kodjoe. «Adherirse a las pautas de sodio es una de las estrategias más fáciles que las personas podrían adoptar fácilmente para reducir las hospitalizaciones, los costos de atención médica, la morbilidad y la mortalidad asociadas con las enfermedades cardiovasculares».
02 abril 2024| Fuente: EurekAlert| Tomado de | Comunicado prensa
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HEARTS en las Américas es la adaptación regional de la iniciativa mundial HEARTS, de la Organización Mundial de la Salud, para la prevención y el control de las enfermedades cardiovasculares (ECV). Con el objetivo de impulsar el cambio de la práctica clínica y de la gestión en los entornos de atención primaria, por parte de los servicios de salud, a fin de mejorar el control de la hipertensión y reducir el riesgo de ECV.
En esta revisión se describe la iniciativa HEARTS en las Américas.
En primer lugar, se resume la situación epidemiológica regional en cuanto a la mortalidad por ECV y las tendencias en el control de la hipertensión a nivel poblacional; a continuación, se explica la razón de ser de los principales componentes de la intervención: el sistema de manejo orientado a la atención primaria y la vía clínica de HEARTS. Por último, se examinan los factores clave para acelerar la expansión de HEARTS: los medicamentos, la atención basada en el trabajo en equipo y un sistema de monitoreo y evaluación.
El aumento de la cobertura y del control de la hipertensión en los entornos de atención primaria de salud (en comparación con el modelo tradicional) es prometedor y confirma que las intervenciones que se promueven como parte de HEARTS son factibles y resultan aceptables para las comunidades, los pacientes, los prestadores de servicios de salud, los responsables de la toma de decisiones y los financiadores. En esta revisión se destacan algunos casos de implementación satisfactoria.
Ampliar el uso de un tratamiento eficaz de la hipertensión y optimizar el control del riesgo de ECV es una forma pragmática de acelerar la reducción de la mortalidad por ECV y, al mismo tiempo, de fortalecer los sistemas de atención primaria de salud para responder con calidad y de manera eficaz y equitativa al desafío que entrañan las enfermedades no transmisibles, no solo en los países de ingresos bajos o medianos, sino en todas las comunidades a nivel mundial.
Ver Artículo: Ordunez P, Campbell N, DiPette DJ, Jaffe MG, Rosende A, Martínez R, et al. HEARTS en las Américas: impulsar el cambio en el sistema de salud para mejorar el control de la hipertensión en la población. Rev Panam Salud Publica [Internet];2024[citado 8 mar 2024];48. https://doi.org/10.26633/RPSP.2024.17
12 marzo 2024|Fuente: PAHO
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La salud bucal de un paciente puede ser un indicador de su salud y bienestar general. Las investigaciones demuestran que la inflamación crónica de las encías puede estar asociada con otras enfermedades crónicas, como enfermedades coronarias y la diabetes.[1] Además, ciertas bacterias que viven en la boca pueden viajar a través del torrente sanguíneo a otras partes del cuerpo, incluidos el corazón y los pulmones. Las bacterias bucales, incluidos los estreptococos del grupo viridans (viridans group streptococcal, VGS), pueden causar endocarditis infecciosa, una infección del revestimiento interno del corazón o de las válvulas cardíacas.[2] La nueva iniciativa Healthy Smiles, Healthy HeartsTM de la American Heart Association (Asociación Americana del Corazón), desarrollada en colaboración con Delta Dental, tiene como objetivo mejorar la salud integral de los pacientes en todo el país, al ampliar el acceso a una atención médica equitativa e integrada y educando a los pacientes y médicos sobre la conexión entre la salud cardíaca y la salud bucal.
Según la American Heart Association (Asociación Americana del Corazón), la organización sin fines de lucro líder en el mundo dedicada a la salud del corazón y el cerebro para todos, la prevención o detección temprana de enfermedades cardíacas puede generar resultados de salud significativamente mejores. A través de la iniciativa Healthy Smiles, Healthy HeartsTM, la Asociación y Delta Dental involucrarán a médicos de la salud bucal para crear e implementar un nuevo estándar de atención para los exámenes de salud del corazón en el consultorio del dentista, mediante la realización de exámenes de presión arterial y derivaciones a atención primaria si fuera necesario. La iniciativa también educará a los profesionales de la salud y a los pacientes sobre la relación entre la salud del corazón y la salud bucal, al tiempo que enfatizará en la importancia del equipo de atención integrada del paciente para mejorar su salud y bienestar totales.
«Los profesionales de la salud bucal pueden desempeñar un papel fundamental como parte de un equipo de atención de todo el cuerpo para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares», dijeron Joseph C. Wu, M.D., Ph.D., FAHA, Presidente voluntario de la American Heart Association (Asociación Americana del Corazón), Director del Stanford Cardiovascular Institute y Simon H. Stertzer Profesor de Medicina y Radiología en Stanford School of Medicine.»Cuando los dentistas y los médicos de atención primaria trabajan juntos, podemos crear muchos más puntos de acceso para una atención médica integrada y de calidad y educar a nuestros pacientes sobre el impacto de una buena higiene bucal en la salud y el bienestar total».
«Las enfermedades bucales pueden afectar significativamente la salud sistémica, y las rutinas de cuidado bucal preventivo son fundamentales para reducir los riesgos de salud asociados, incluidas las afecciones cardiovasculares», dijo Daniel W. Croley, DMD, Director Dental de Delta Dental.»Nuestra colaboración con la American Heart Association (Asociación Americana del Corazón) marca un paso fundamental hacia el fortalecimiento del acceso a una atención integrada y de calidad y enfatiza el papel de las visitas al dentista como parte de un control de salud holístico que puede ofrecer una detección temprana de enfermedades cardiovasculares y otras afecciones».
Hay más de 134,000 consultorios de dentistas en los Estados Unidos, y aproximadamente 27 millones de pacientes visitan a su dentista cada año, pero no necesariamente a otro médico, como un proveedor de atención primaria.[3] Los dentistas pueden ser un recurso importante para asesorar y examinar a los pacientes para detectar muchas enfermedades crónicas, incluidas la hipertensión y el cáncer bucal, creando una valiosa oportunidad para impulsar la prevención y la detección más temprana en el ámbito de la salud bucal.
Para obtener más información sobre la nueva iniciativa Healthy Smiles, Healthy Hearts TMde la American Heart Association (Asociación Americana del Corazón), desarrollada en colaboración con Delta Dental, visite: Salud bucal | American Heart Association.
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América Latina está ante una «oportunidad única» para prevenir y acabar con el sida, enfermedad que causó la muerte de 27 000 personas y 110 000 nuevos contagios en 2022, señaló en una entrevista, la directora de Onusida para América Latina y el Caribe, Luisa Cabal.
«Creo que tenemos una oportunidad única, tenemos un compromiso político que se plasmó en la declaración política de 2021, que marca una ruta hacia el 2030 con una meta de poner fin al sida como desafío de salud pública», subrayó Cabal, que este miércoles inicia una misión oficial a Honduras, donde permanecerá hasta el viernes.
Para ello, la región cuenta con «todos los beneficios que la ciencia nos ha brindado no solo con respecto al tratamiento, sino con respecto a la prevención», señaló.
En 2022 Latinoamérica registró 110 000 nuevas infecciones, 27 000 personas fallecieron a causa del sida y 2,2 millones vivían con el virus, según datos del informe anual del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida (Onusida), citados por Cabal.
La alta funcionaria de la ONU celebró que los fallecimientos a causa del sida bajaron un 32 % en Latinoamérica entre 2010 y 2022, aunque lamenta que las nuevas infecciones por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en la región aumentaron un 8 % desde 2010.
«Hemos podido ampliar el acceso a antirretrovirales en nuestra región, pero también tenemos una crisis de prevención«, enfatizó, al tiempo que aseguró que la educación sexual integral, el uso del preservativo y la profilaxis preexposición (PreP) contribuyen a prevenir nuevas infecciones del VIH/sida.
Estigma deriva en diagnóstico tardío
El 93 % de las nuevas infecciones el año pasado correspondieron a hombres que tienen sexo con hombres, mujeres trans, trabajadora sexuales, personas que usan drogas o que están presas, precisó Cabal.
La estigmatización o el diagnóstico tardío siguen acechando a esta enfermedad, pero los avances hacen pensar que se puede «disminuir aún más» el número de fallecidos por sida en la región, subrayó la funcionaria.
Resaltó la importancia de que las personas tengan acceso a pruebas médicas y los autotest de detección de VIH/sida, así como a los servicios y tratamientos.
«Nuestra región aún tiene que hacer mucho más por incluir a las poblaciones que han sido dejadas atrás, hablamos también de esta crisis de exclusión, si invertimos más en campañas (..) para que las enfermeras, el personal de salud no estigmaticen por el VIH, habremos recorrido un importante camino», sostuvo Cabal.
Señaló que el «gran llamado» de la Agenda 2030 de Naciones Unidas es «no dejar a nadie atrás e incentivar un ambiente de inclusión, de no discriminación, y esto es fundamental para bajar las cifras de nuevas infecciones y que las personas afectadas puedan verdaderamente acceder a los servicios».
Más apoyo a las comunidades que trabajan en la prevención
Cabal agregó que no se puede «ser complaciente» con las cifras obtenidas y que se debe «estar más vigilante y poner más foco a las acciones» para acabar con el sida en la región.
En las últimas cuatro décadas, destacó, las comunidades han liderado la lucha por el acceso al tratamiento, al diagnóstico oportuno y al combate del estigma y la discriminación contra las personas con VIH/sida.
La directora de Onusida pidió apoyar «ahora más que nunca» con financiamiento las iniciativas de organizaciones lideradas por comunidades que trabajan en la prevención y el tratamiento del VIH/sida.
Instó además a los países a invertir más en el acceso de tratamiento entre las embarazadas para disminuir el número de transmisiones de VIH a niños, y «no dejar atrás» a la población de minorías étnicas.
2 diciembre 2023 | Fuente: Sintesis.com | Tomado de |Mundo Salud
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En México, la población femenina no forma parte de los sectores claves en la prevención y tratamiento del VIH (virus de la inmunodeficiencia humana), pero la discriminación y la violencia en materia de género las hace más vulnerables a contraer la infección. La mayoría de las mujeres que vive con VIH son diagnosticadas y tratadas durante el embarazo. Read more