mar
25
Los niños con síndrome de Tourette pueden beneficiarse de las terapias de comportamiento para reducir sus síntomas, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Nottingham, en Reino Unido, y publicado en Current Biology (doi:10.1016/j.cub.2011.02.047).El estudio reveló que estos niños, a través de este tipo de tratamientos conductuales, experimentaron una reorganización de la estructura del cerebro en la adolescencia, lo que les permitió obtener el control sobre sus síntomas. Los investigadores creen que la «formación» del cerebro para fomentar este proceso puede ayudar a que se desarrolle de forma más rápida y eficaz. Alguna de estas terapias puede ser la de inversión del hábito.
Los investigadores creen que la formación del cerebro a través de la terapia conductual puede ayudar a controlar los síntomas de forma más rápida y eficaz.
Los resultados suponen una alternativa a los tratamientos farmacológicos, que pueden tener efectos secundarios no deseados como aumento de peso o depresión.
Los autores del estudio, Stephen Jackson y Georgina Jackson, utilizaron tomografías computarizadas (TC) y técnicas de comportamiento para comparar a niños con el síndrome de Tourette con un grupo de control.
Según Stephen Jackson habían demostrado que los niños con síndrome de Tourette \»tienen un mayor control sobre su comportamiento motor que aquellos que no lo padecen\», por lo que llegó a la conclusión de que esto se debía \»a cambios compensatorios en el cerebro que ayudaron a controlar sus tics\».
\»Esta investigación proporciona la evidencia de que este mayor control es proporcionado por alteraciones estructurales y funcionales en el cerebro, por lo que el tratamiento no farmacológico puede ser una terapia eficaz\», explicó Stephen Jackson.
Marzo 23, 2011 Diario Médico