may
30
Líderes sanitarios de las regiones de Asia Sudoriental y Pacífico Occidental de la Organización Mundial de la Salud se comprometieron hoy a abordar juntos de forma más eficaz la resistencia a los antimicrobianos (RAM).
Respaldaron así un documento de posición conjunto sobre la RAM en el sector de la salud humana en un evento celebrado al margen de la 77 Asamblea Mundial de la Salud que se desarrolla en Ginebra, Suiza.
Iniciado por el Gobierno de Japón y respaldado por un total de 25 países de estas regiones el texto expresa la determinación de los líderes de acelerar las medidas contra la RAM durante los próximos cinco años.
Para fomentar la colaboración y la asociación con el resto del mundo, el documento se llevará a la Reunión de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la Resistencia a los Antimicrobianos en Nueva York en septiembre de 2024.
El mal uso y el empleo excesivo de antimicrobianos –especialmente antibióticos– en humanos, animales y plantas están impulsando el aumento de infecciones resistentes a los medicamentos.
Esto hace que las infecciones comunes sean más difíciles de tratar y que los procedimientos y tratamientos médicos, como la cirugía y la quimioterapia, sean mucho más riesgosos.
Otros factores que contribuyen a la aparición y propagación de infecciones resistentes a los medicamentos incluyen la falta de agua potable, saneamiento e higiene y una prevención y control inadecuados de las infecciones.
Estos promueven la propagación de microbios resistentes al tratamiento en los centros de salud y las comunidades.
La resistencia a los antimicrobianos es una amenaza creciente para la salud y el desarrollo a nivel mundial y para los países y zonas de las regiones de Asia Sudoriental y Pacífico Occidental de la OMS, donde vive casi la mitad de la población mundial.
En 2019, la RAM fue la causa de unas 700 000 muertes en las dos regiones, lo que representa más de la mitad de las muertes mundiales por esta causa.
28 mayo 2024|Fuente: Prensa Latina |Tomado de |Noticia
feb
3
La publicación de antibióticos AWaRe (Access, Watch, Reserve) de la OMS ofrece orientaciones concisas y basadas en datos científicos sobre la elección del antibiótico, la dosis, la vía de administración y la duración del tratamiento para más de 30 de las infecciones clínicas más frecuentes en niños y adultos, tanto en atención primaria de salud como en entornos hospitalarios. La información incluida en el libro respalda las recomendaciones de antibióticos que figuran en las Listas Modelo OMS de Medicamentos Esenciales y de Medicamentos Esenciales para Niños y en la clasificación AWaRe de antibióticos de la OMS.
ver artículo: Organización Mundial de la Salud. Guía AWaRe (acceso, precaución y reserva) de la OMS para el uso de antibióticos: infografías en anexo web. Organización Mundial de la Salud;2023. https://iris.who.int/handle/10665/375875
1 febrero 2024| Fuente: OMS
ene
23
El Consejo Ejecutivo de la OMS comienza hoy a debatir temas prioritarios, como las emergencias sanitarias, la resistencia a los antimicrobianos, el cambio climático y la salud universal
La 154.ª reunión del Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) comenzó hoy en Ginebra, Suiza. Durante la semana, los miembros del Consejo debatirán más de 40 temas de salud, entre ellos el 14º Programa General de Trabajo (PGT14) de la OMS; la prevención, preparación y respuesta ante emergencias sanitarias; la aceleración de las respuestas nacionales y mundiales a la resistencia a los antimicrobianos (RAM); y el impacto del cambio climático en la salud, entre otras cuestiones prioritarias.
En su discurso de apertura, el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS, destacó los logros de la Organización en 2023, entre ellos el fin de la COVID-19 y del Mpox como emergencias de salud mundiales. También subrayó los retos del último año, como las enfermedades y muertes evitables, y el aumento de los conflictos y las catástrofes.
El doctor Tedros también declaró que «2024 será un año decisivo para la salud mundial», con oportunidades para que los Estados Miembros «den forma a la estrategia mundial de salud para los próximos cuatro años en el PGT14″ y «den forma al futuro de las emergencias sanitarias, a través del acuerdo sobre pandemias y las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional (RSI)».
Durante el primer día del Consejo Ejecutivo se celebró una sesión informativa informal sobre los procesos relacionados con el Órgano Intergubernamental de Negociación para redactar y negociar un convenio, acuerdo u otro instrumento internacional de la OMS sobre prevención, preparación y respuesta ante pandemias y del Grupo de Trabajo sobre Enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional. Esta sesión informativa ofreció a los miembros del Consejo Ejecutivo información actualizada sobre esta labor, así como la oportunidad de formular preguntas y respuestas.
Durante la semana, el Director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y Director Regional de la OMS para las Américas, doctor Jarbas Barbosa, participará en sesiones sobre una serie de temas prioritarios para la región, entre ellos el cambio climático y la salud, y la resistencia a los antimicrobianos.
El doctor Barbosa también presentará el informe del Comité Regional de la OMS para las Américas, que se celebró del 25 al 29 de septiembre pasado en Washington D.C.
Las políticas aprobadas durante el Comité incluyeron una para reforzar el personal de salud; otra sobre la prevención y el control de las enfermedades no transmisibles entre los niños, los adolescentes y los jóvenes; y otra para mejorar la salud mental.
El Consejo Ejecutivo se celebra del 22 al 27 de enero en la sede de la OMS en Ginebra. Las sesiones pueden seguirse en directo aquí.
El Consejo Ejecutivo de la OMS está compuesto por 34 miembros técnicamente cualificados elegidos por mandatos de tres años. Las principales funciones del Consejo son aplicar las decisiones y políticas de la Asamblea de la Salud, y asesorar y facilitar su labor. El Consejo actual está compuesto por seis Estados Miembros de las Américas: Barbados, Brasil, Canadá, Estados Unidos, Paraguay y Perú.
22 de enero de 2023|Fuente: OPS| Tomado de | Noticias
nov
13
En el ámbito de la salud pública, la comunicación veraz y simplificada de los riesgos derivados de la resistencia a los antimicrobianos, mejoraría la conciencia de la población respecto al problema farmacológico cuyas consecuencias fatales trasciende las fronteras.
Los autores proponen la utilización de términos concretos, familiares, fáciles de procesar y pronunciar que faciliten las percepciones de riesgo en la población no profesional.
El estudio que publica la revista Communications Medicine evalúa las palabras eficaces que en las comunicaciones públicas incidirían en la comprensión masiva del riesgo que significan las «infecciones resistentes a los medicamentos» y «resistencias a los antibióticos».
Incluye una muestra de EE. UU. obtenida en 2020 y otra del Reino Unido de 2021. El seguimiento se realizó para mejorar la generalización de los resultados iniciales en diferentes contextos y momentos de recolección de datos. Además, el estudio del Reino Unido abordó deficiencias específicas del enfoque correspondiente al primer muestreo con la utilización de tomas abarcativas de todo el país y el aumento de participantes.
Escala del problema
La comunicación transmitida en términos de salud pública, reveló que el término de uso frecuente para describir la resistencia bacteriana a medicamentos o antibióticos actuales (resistencia a los antimicrobianos o RAM) carece de claridad y, por lo tanto, no es recordado por las personas.
La RAM es una amenaza mundial de dimensiones sin precedentes para la atención sanitaria. Al asociarse con aproximadamente 4,95 millones de muertes en 2019, superala cifra de 3,3 millones atribuibles a la COVID-19 en 2020.
En el proceso biológico que se define RAM, microorganismos como bacterias, virus y hongos mutan, adquieren la capacidad de resistir el tratamiento con medicamentos como los antibióticos. Pese a que la mutación de microorganismos es un proceso natural, cada uso de antibióticos, al promover su aparición, acelera el problema.
Una barrera clave para abordar la RAM es la notable falta de conocimiento y conciencia sobre el tema, especialmente en los legos sin conocimientos médicos especializados.
La cobertura mediática anterior sobre la resistencia a los antimicrobianos no logró comunicar la urgencia y gravedad del problema. Las razones incluyeron riesgos para la salud competitivos, como la sepsis, que dominó indebidamente los medios de comunicación debido a narrativas de enfermedades fácilmente comprensibles.
La atención a la resistencia a los antimicrobianos disminuyó aún más durante la reciente pandemia de COVID-19, a pesar de que los académicos definen la resistencia a los antimicrobianos como una “pandemia silenciosa” y sugieren que la propagación de bacterias multirresistentes e infecciones intratables podrían conducir a una próxima pandemia internacional.
La tarea de investigación fue precedida por la Dra. Eva Krockow de la Facultad de Psicología y Ciencias de la Visión, Universidad de Leicester, Reino Unido.
El trabajo, basado en opiniones de participantes voluntarios de EE.UU. y el Reino Unido, advierte que las campañas de atención sanitaria deben aumentar con urgencia la concientización del público sobre este importante problema; sobre ellas asegura que en la actualidad son inconsistentes, abstractas y con un lenguaje técnico de difícil reproducción.
Al centrarse en la capacidad de memorización de las palabras y la asociación al riesgo para los términos usados de manera más frecuente en la descripción de la RAM, destaca: “resistencia a los antimicrobianos” y cinco variantes usadas comúnmente, incluidas “RAM”, “resistencia a los antibióticos”, “resistencia bacteriana”, “infecciones farmacorresistentes” y “superbacterias”. Además, el artículo hace referencia a otros 34 términos de riesgo para la salud como cáncer y enfermedad cardíaca.
Detalles del estudio
La investigación evaluó en 237 participantes de Estados Unidos y 924 del Reino Unido la memoria y el riesgo asociado a cada término; utilizó para ello una escala que abarcaba la comprensión de las definiciones con calificaciones de ´muy seguro´ a ´perjudicial o muy riesgoso´. Además se les pidió que consideraran la pronunciabilidad y la familiaridad, entre otros atributos lingüísticos.
Los resultados mostraron que “RAM” y “resistencia antimicrobiana” se encontraron entre los términos con menor puntuación de los 40, tanto por asociación al riesgo como para la capacidad de memorización y, por lo tanto, inadecuados para la comunicación de la salud pública. Por el contrario, los términos “resistencia a los antibióticos” y, en menor medida, “infecciones farmacorresistentes”, obtuvieron mejores resultados.
Los investigadores afirman que para poder proteger la medicina y conservar los medicamentos existentes para generaciones futuras, es imperativo reducir el uso de antibióticos a nivel global. Con tal fin, consideran necesarias las campañas de salud pública que fomenten un cambio en el comportamiento.
El estudio resalta la importancia de renombrar la RAM por un término memorizable y comprensible para el público general y no solo para los profesionales de comunidades médicas o científicas.
La percepción del riesgo es una medida importante para determinar la efectividad de un término puesto que las personas a menudo proyectan los efectos de gravedad y riesgo a la vulneración de su salud. Por lo tanto, la terminología que tiene mayores probabilidades de ser efectiva será aquella que la población general alerte con claridad sobre una amenaza inminente.
Los resultados del estudio determinaron que entre las mayores amenazas a la salud los participantes juzgaron de manera correcta las enfermedades cardíacas y el cáncer, sobreestimaron la gravedad de los riesgos que acarrean las enfermedades tropicales y, de manera simultánea, subestimaron la amenaza de la RAM.
El artículo resalta que la resistencia a los antimicrobianos ocupó el sexto lugar como factor de muerte a nivel mundial con la previsión de superar al cáncer para transformarse en causa principal para el 2050.
Las comparaciones estadísticas de los seis términos sanitarios relacionados a la RAM indicaron que “infecciones farmacorresistentes” era significativamente más efectivo en inducir las percepciones del riesgo que los demás términos de RAM existentes. Sin embargo, los resultados también mostraron que éste mismo término ocupó un lugar bastante bajo respecto de la capacidad de memorización, mientras que “resistencia a los antibióticos” se recordó con mayor facilidad.
Dada la limitada eficacia de toda la terminología existente relacionada a la RAM, los investigadores instan a futuras investigaciones de manera urgente para poder identificar un nombre fácil de recordar y tenga éxito en evocar percepciones de riesgo proporcionales. A modo de ejemplo, citan el cambio de nombre del nuevo coronavirus de Wuhan por Covid-19, éxito reciente del cual es posible aprender.
Referencia
Krockow EM, Cheng KO, Maltby J, McElroy E. Existing terminology related to antimicrobial resistance fails to evoke risk perceptions and be remembered. Commun Med [Internet].2023[citado 11 nov 2023; 3(1):149. https://doi.org/10.1038/s43856-023-00379-6
13 noviembre 2023 | Fuente: SIICSALUD| Tomado de Noticias biomédicas
nov
20
En el marco de la Semana Mundial de Concienciación sobre el Uso de los Antibióticos, la Organización Mundial de la Salud en Europa (OMS Europa), ha advertido de que la carga sanitaria provocada por la resistencia a los antimicrobianos es comparable a la de la gripe, la tuberculosis y el VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana), juntos en la Unión Europea (UE) y en el Espacio Económico Europeo, según estimaciones del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC). Read more
dic
9
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió del aumento de la resistencia a los antimicrobianos, favorecido por la diseminación de medicamentos y algunos productos químicos en el medio ambiente, que constituye una importante amenaza sanitaria. Read more