Una correcta nutrición es fundamental para conseguir un envejecimiento saludable y con calidad de vida, según han afirmado los expertos reunidos en el I Simposio Mediterráneo: Nutrición, Dietética e Innovación, organizado por la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación, en el Colegio de Médicos de Valencia.

Según José Ricardo Cabo Soler, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valencia (UV), «una dieta adecuada y que permita mantener el peso en un rango saludable es esencial para envejecer con salud y calidad de vida», aunque esta se debe acompañar siempre «de ejercicio físico y una vida social y familiar satisfactorias». Respecto a la nutrición, Cabo ha apuntado que «es importante adaptar la ingesta de calorías en la dieta a las necesidades individuales y repartir los alimentos en al menos 4 o 5 comidas al día». Además, se debe controlar, con la ayuda de una alimentación adecuada, la liberación de insulina. Para ello, es importante vigilar la carga glucémica de cada comida, moderando la ingesta de ciertos alimentos: legumbres, cereales y derivados…

Igualmente es fundamental moderar la ingesta de grasas saturadas de origen animal, «manteniendo una cantidad apropiada de grasas monoinsaturadas (aceite de oliva) y poliinsaturadas (aceites de semilla y pescados azules), con el aporte adecuado de ácidos grasos esenciales, en especial de omega-3, para controlar la inflamación». Cabo ha concluido que «es esencial el reparto de proteínas y conveniente el de carbohidratos, vitaminas y minerales en, como mínimo, tres comidas al día».

Los centenarios
José Viñas, catedrático del Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina de la UV, ha destacado los avances y hallazgos obtenidos sobre los genes de la longevidad gracias al estudio de personas centenarias. Según Viñas, «estos genes (antioxidantes, p53, telomerasa, Ras/Grf1….) son modulables, por lo que el ejercicio físico, las hormonas y la nutrición son básicos» para superar la esperanza de vida. En este contexto, Viñas ha explicado que los «centenarios tienen no solo longevidad extrema, sino también poca fragilidad y dependencia».

Así, un trabajo desarrollado Viñas y otros investigadores de la UV, y del Hospital de La Ribera, en Alzira, Valencia, ha evaluado en centenarios, octogenarios y jóvenes, los mRNAi-oma al completo para estudiar la correlación con su transcriptoma y detectar los genes de longevidad sobreexpresados. Según el catedrático, la población centenaria «regula al alza los miRNA. Además, cuatro genes marcan su firma genética y su expresión es crítica (Bcl-xL, Fas, Fas-L y CCL5)». En la práctica, este grupo de población tiene «muy activa la vía extrínseca de la apoptosis (Fas-FasL) y poco activa la vía intrínseca (Bcl-xL)».

Dolores Corella, del Ciber de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición, ha dicho que el estudio español Predimed, iniciado en 2003, ha confirmado las bondades de la dieta mediterránea en la reducción del riesgo cardiovascular y encontrado interacciones gen-dieta que se están validando en otras poblaciones.
octubre 29/2012 (Diario Médico)

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