Los datos confirman que las dimensiones de la actual epidemia del ébola no deben atribuirse a un patógeno más agresivo, sino a la debilidad de las medidas de control. En Sierra Leona, donde junto a Liberia y Guinea continúa la expansión de forma más intensa, el periodo de incubación y la tasa de fatalidad es similar a la observada en otras regiones afectadas por el brote actual, así como en otros previos.

Es la principal conclusión a la que llega un grupo de epidemiólogos, de la Universidad de Tulane, en Nueva Orleans, y del Grupo de Respuesta de la Organización Mundial de la Salud, tras analizar las muestras clínicas y de laboratorio de 106 pacientes en Sierra Leona entre mayo y junio.

Según publican en «The New England«, el periodo de incubación se sitúa entre los 6 y 12 días, y la tasa de mortalidad en el 74 %. La presentación de la enfermedad incluye fiebre en el 89 % de los pacientes; dolor de cabeza (80 %); debilidad (66 %); mareos (60 %); diarrea (51%); dolor abdominal (40 %), y vómitos (34 %o). Los menores de 21 años tuvieron una tasa de mortalidad menor que los mayores de 45 (57 frente a 94 %), al igual que aquellos con menos de 100 000 copias del virus por milílitro, comparados con los que superaban la cifra (33 y 94 %). Solo un paciente refirió hemorragias.

Las conclusiones del estudio conectan con la idea, expuesta hasta la saciedad por quienes trabajan en el brote, sobre la necesidad de aumentar los esfuerzos para controlar el virus en África, idea que también refleja el científico Tim Inglis, de la Univerisidad Western Australia, en un artículo de opinión en «Nature».
octubre 30/2014 (Diario Médico)

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