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Un reciente estudio realizado en Brasil apunta a que los genes de las respuestas inmunitarias innatas y adaptativas pueden desempeñar un papel vital en la susceptibilidad y protección contra la infección sintomática de la COVID-19. Así, la respuesta innata es clave para controlar los encuentros primarios con un patógeno.
Las conclusiones a las que llega el grupo de científicos de la Universidad de São Paulo y cuyos resultados han sido publicados en Frontiers, es que la enfermedad, al igual que otros coronavirus, provoca una respuesta de células T secundaria a los epítopos de reacción cruzada.
Esta respuesta secundaria de células T de reacción cruzada podría erradicar la infección por COVID-19 en una proporción de individuos, incluso antes de que se produzca una respuesta específica de anticuerpos contra el SARS-CoV-2, como se demostró en contactos familiares de pacientes con COVID.
Los investigadores detectaron que cónyuges de pacientes infectados y sintomáticos con COVID que comparten el mismo dormitorio sin medidas de protección “representan un enfoque eficiente para identificar y determinar a individuos resistentes altamente expuestos a la misma cepa viral del SARS-CoV-2”.
Así se ha realizado el estudio
En concreto, 83 parejas discordantes, en las cuales una era sintomática y la pareja permaneció asintomática y seronegativa durante al menos 6 meses. “Dado que recolectamos todas las muestras en el primer semestre de 2020, es probable que todas las parejas hayan estado expuestas a cepas virales iguales o estrechamente relacionadas”, apunta el estudio.
Dicha investigación parte de la premisa de que una respuesta eficaz en el curso temprano de la infección por SARS-CoV-2 puede influir fuertemente en el resultado de la misma, diferenciando a los individuos resistentes a COVID-19 no afectados o asintomáticos después de la exposición y a los sintomáticos.
Varios estudios publicados anteriormente tienen como objetivo comprender la genética humana de la inmunidad protectora al SARS-CoV-2. Los genes inmunes innatos y los genes involucrados en la presentación de antígenos parecen ser candidatos fuertes en este asunto, contribuyendo con una capa adicional a otras regiones genómicas conocidas que influyen en el resultado de COVID-19.
Genética de la resistencia
Asimismo, los científicos sostienen que los factores ambientales como las medidas de protección, el nivel socioeconómico y el acceso a la atención médica pueden explicar en parte la alta variabilidad en la incidencia de la enfermedad COVID-19 y la mortalidad entre los individuos.
Sin embargo, pocos estudios se han centrado en la genética de la resistencia contra la infección por SARS-CoV-2 debido a las limitaciones para controlar la exposición. Informes anteriores sobre factores genéticos del huésped con resistencia a COVID-19 han investigado los receptores del SARS-CoV-2 como la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2), la proteasa transmembrana de serina tipo 2 (TMPRSS2), la proteína regulada por glucosa de 78 kDa ( GRP78) y el inductor de metaloproteínasas de matriz extracelular o grupo de diferenciación 147 (CD147).