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Nadie es inmune a la COVID-19, pero no todo el mundo sufre la pandemia, de igual modo en Estados Unidos, donde los pobres son más vulnerables, informó recientemente el canal de televisión NBC.
La clase privilegiada estadounidense tiene pruebas gratuitas de alta calidad a su disposición, además de acceso rápido a la medicación contra la COVID, mientras que quienes carecen de seguro médico ahora deben pagar por hacerse una prueba y la medicación es difícil de conseguir para algunos, indicó.
Las personas pobres que viven en espacios donde hay mucha gente, con menor acceso a un seguro médico y tratamientos médicos innovadores, han sido definidas por Steven Thrasher, profesor de periodismo en la Universidad Northwestern, como «lumpen viral».
Thrasher explica en su nuevo libro, «El lumpen viral: Las pérdidas humanas cuando desigualdad y enfermedad se juntan«, cómo el virus expone y configura la desigualdad en Estados Unidos.
Un informe publicado en abril reveló que los residentes en condados pobres de Estados Unidos. sufrieron el doble de mortalidad que los habitantes en condados ricos, seguramente debido a la carencia de seguro médico.
«La gente más pobre tiene un riesgo mayor frente a la COVID, al igual que presenta una esperanza de vida menor por lo general», indicó el informe.
Además, la sanidad en Estados Unidos, es compleja y provoca marginalidad, especialmente entre la gente con pocos recursos. Un estudio publicado a principios de 2022, por ejemplo, determinó que no tener el graduado escolar estaba estrechamente correlacionado con la resistencia a recibir las vacuna, añadió.
agosto 05/2022 (Xinhua) – Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
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