China reportó 92 casos de COVID-19 y la mayoría (59) son autóctonos que se derivan del rebrote con la variante delta del coronavirus SARS-CoV-2, vigente en la provincia oriental de Fujian.

La Comisión Nacional de Salud detalló que los contagios locales se confirmaron en las ciudades de Xiamen, Quangzhou y Putian de esa demarcación.

Todas recurren al confinamiento, los PRC masivos, cese de clases presenciales y restricciones a la movilidad, en un esfuerzo por cortar la transmisión del virus.

Sin embargo, la última urbe presenta el escenario más complicado y los focos de infección son una escuela primaria y una fábrica de zapatos.

Aunque en un inicio se sospechó que el primer paciente fue un hombre llegado de Singapur, varios científicos descartan la idea porque él dio positivo 38 días después del regreso y luego de completar la cuarentena.

Las autoridades insisten en incrementar la vacunación a individuos de 18 años de edad, pues la nueva oleada afecta a muchos menores sin inmunización contra la COVID-19.

Aparte de los contagios autóctonos, China contabilizó este martes 33 importados y 40 asintomáticos en distintas partes de su territorio.

Con esas cifras, el país asiático acumula al menos cinco mil 688 muertos y 123 mil 642 casos en su parte continental, Hong Kong, Macao y Taiwán desde el surgimiento de la enfermedad y del virus que la provoca, en diciembre de 2019.

Aunque el rebrote en Fujian mantiene a las autoridades en alerta y sigue en expansión, se prevé que el mismo quede totalmente controlado hacia principios de octubre.

septiembre 14/2021 (Prensa Latina) – Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.

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