Casi la mitad de los pacientes hospitalizados por la COVID-19 podrían desarrollar autoanticuerpos protrombóticos, sugiere un reciente estudio.

protrombóticoUna de las múltiples incógnitas sobre la COVID es por qué tiene un efecto trombótico en algunos pacientes. El análisis de muestras séricas aisladas de 172 pacientes hospitalizados por la enfermedad causada por el SARS-CoV-2 apunta una explicación: los anticuerpos antifosfolipídicos, anticuerpos que actúan frente a las partes fosfolipídicas de las membranas celulares y de los factores de coagulación, y que están detrás del síndrome antifosfolipídico.

La presencia de los autoanticuerpos protrombóticos podría ser, según concluye un estudio en Science Translational Medicine, la causa de que la COVID genere en algunos pacientes trombos tanto en arterias y venas, como en capilares. Además, constituyen una potencial diana para prevenir la trombosis en estos enfermos.

En estudios previos, con participación de centros españoles, ya se había expuesto que la presencia de anticuerpos autoinmunes (autoanticuerpos) frente al interferón tipo I puede condicionar la respuesta inmune al virus, explicando la gravedad de la enfermedad en determinados pacientes.

Ahora, en este nuevo trabajo, han encontrado la presencia de anticuerpos antifosfolipídicos en casi la mitad de los pacientes con la COVID que estudiaron, de forma inesperada. En palabras de uno de los autores, Jason Knight, reumatólogo de Michigan Medicine (Universidad de Michigan), «la mitad de los pacientes hospitalizados con la COVID-19 dieron positivo para al menos uno de los autoanticuerpos, lo que fue una gran sorpresa». Knight ha estudiado los anticuerpos responsables del síndrome antifosfolípido (anticuerpo anticardiolipínico y anticoagulante lúpico, son los principales) en la población general durante años.

Tras medir ocho tipos de anticuerpos antifosfolipídicos en las muestras de pacientes, constataron que en casi la mitad de los enfermos, al menos había un autoanticuerpo, combinado con neutrófilos exacerbados. En abril, este grupo de científicos fue el primero en desvelar que los pacientes hospitalizados por la COVID-19 grave tenían niveles más altos de trampas extracelulares de neutrófilos en la sangre, los llamados NET (neutrophil extracellular traps). Los NET son ADN extruido por los neutrófilos, una especie de membrana viscosa, para eliminar a los patógenos. En la COVID, se piensa que parte de la patogenia en el pulmón se debe a esa expulsión de NET por parte de los neutrófilos, y se ha correlacionado una presencia elevada con la gravedad de la enfermedad.

También se observó en estos pacientes un aumento en la cantidad de plaquetas, así como formas más graves de la enfermedad respiratoria y menor tasa de filtración renal.

Para obtener más información, los científicos midieron el efecto de los neutrófilos y los autoanticuerpos combinados en modelos de ratón. “Los anticuerpos de pacientes con infección activa por la COVID-19 generaron una cantidad sorprendente de coagulación en los animales, una de las peores coagulaciones que hemos visto», afirmó otro de los investigadores, cardiólogo en la Universidad de Michigan, Yogen Kanthi. «Hemos descubierto un nuevo mecanismo por el cual los pacientes con la COVID-19 pueden desarrollar coágulos sanguíneos».

El trabajo sugiere que casi a mitad de los enfermos hospitalizados por la COVID pueden desarrollar anticuerpos antifosfolipídicos, y que estos influyen en la enfermedad. Las muestras del estudio no se recogieron en un momento definido durante la hospitalización, por lo que los investigadores sugieren realizar nuevos estudios para rastrear sistemáticamente esos anticuerpos a través del curso de la enfermedad, incluidos a los pacientes dados de alta.

Plasmaféresis y anticoagulación

La identificación de estos autoanticuerpos sugiere una nueva diana terapéutica, pues da pie a indagar si en los pacientes graves con niveles altos de estos anticuerpos se obtendría un mejor resultado con su eliminación o bloqueo.

Entre los potenciales tratamientos aplicables se encuentra la plasmaféresis, empleada comúnmente en enfermedades autoinmunes graves. “Al igual que la  anti coagulación y los corticosteroides se han mostrado prometedores hasta la fecha en el tratamiento de la COVID-19” escriben en este estudio, “la plasmaféresis no se ha explorado sistemáticamente. Uno se pregunta si esto podría proporcionar beneficios en el subgrupo de pacientes con la COVID-19 con títulos altos de anticuerpos antifosfolipídicos (aPL)”.

Los autores están estudiando el anticoagulante dipiridamol en un ensayo clínico aleatorizado en pacientes con la COVID-19 para determinar su eficacia en la reducción de los coágulos sanguíneos.

«El dipiridamol es un fármaco antiguo que es seguro, económico y escalable», dice Kanthi. «La FDA lo aprobó hace 20 años para prevenir la coagulación, pero solo recientemente descubrimos su potencial para bloquear este tipo específico de inflamación que ocurre en la COVID».

En España, otro estudio explora el potencial del fármaco anticoagulante defibrotide. José María Moraleda, director del Grupo de Trasplante Hematopoyético y Terapia Celular del Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria (IMIB), es el coordinador de esta investigación sobre el efecto del fármaco en la reducción de la mortalidad por la COVID-19.

El antitrombótico defibrotide está indicado en el tratamiento de la enfermedad veno-oclusiva hepática; protege al endotelio “como un bálsamo” que impide la rotura de barrera endotelial, pero además estimula la fibrinolisis, la eliminación de coágulos.

Respuestas que generan nuevas preguntas

El estudio que acaba de publicarse en Science Translational Medicine aporta algunas respuestas, pero a la vez plantea nuevas preguntas, como cuáles son las causas detrás de la aparición de estos anticuerpos y durante cuánto tiempo permanecen en circulación una vez que el paciente se ha recuperado del coronavirus.  Esto también apunta ciertas cautelas en torno al uso de plasma de convaleciente para la COVID, pues los pacientes que se han recuperado pueden tener junto a las altas cantidades de anticuerpos que reconocen al SARS-CoV-2, otros anticuerpos autoinmunes que favorezcan la aparición de trombos o incluso que agraven la enfermedad

 noviembre 26/2020 (Diario Médico)

 

Comments

Comments are closed.

Name

Email

Web

Speak your mind

*
  • Noticias por fecha

    noviembre 2020
    L M X J V S D
    « oct   dic »
     1
    2345678
    9101112131415
    16171819202122
    23242526272829
    30  
  • Noticias anteriores a 2010

    Noticias anteriores a enero de 2010

  • Suscripción AL Día

  • Categorias

    open all | close all
  • Palabras Clave

  • Administración