sep
4
Un grupo de investigadores de la Universidad de Sao Paulo (USP), en Brasil, y la Universidad de Harvard (HU), en Estados Unidos, ha concluido que los efectos de practicar ejercicio físico moderado a diario durante la adolescencia reduce en un 39 por ciento el riesgo de sufrir pólipos adenomatosos avanzados, un precursor del cáncer colorrectal, durante los años de vida posteriores.
Para el desarrollo del estudio, publicado en British Journal of Cancer, el equipo analizó los datos de 28 250 mujeres de entre 25 y 42 años que trabajaban como enfermeras y residentes médicos en Estados Unidos, con el objetivo de examinar los efectos a largo plazo de la actividad física en la salud y el desarrollo de enfermedades.
De este modo, el trabajo analizó la asociación entre la realización de actividad física durante la adolescencia y el riesgo de adenoma durante los años de vida posteriores. Para ello además se evaluaron factores de riesgo como el tabaquismo, la dieta, el consumo de alcohol y los antecedentes familiares de cáncer colorrectal.
A las participantes del estudio se les entregó un cuestionario de seguimiento con preguntas sobre enfermedades y temas relacionados con la salud, incluyen el tabaquismo, el uso de hormonas, la historia del embarazo o el estado de la menopausia, entre otros. Asimismo, respondieron preguntas sobre la práctica de actividad física, con el objetivo de averiguar y estimar los niveles que habían llevado a cabo durante su adolescencia, y se sometieron a una colonoscopia, ya que los pólipos y adenomas son asintomáticos.
Deporte: factor clave en la prevención del cáncer colorrectal
Los resultados han puesto de relieve que la práctica de actividad física en la adolescencia reduce hasta en un 7 por ciento el riesgo de desarrollar adenoma, a pesar de ser un ejercicio menor del recomendado (menos de 60 minutos diarios). Por su parte, la actividad física solo durante la edad adulta (entre 23 y 64 años) redujo el peligro en un 9 por ciento, mientras que su realización durante ambas etapas presentaba una disminución del riesgo de un 24 por ciento.
Sin embargo, cuando es realizada de forma correcta, es decir durante 60 minutos o más, el riesgo se reduce en un 39 por ciento. Esto puede ocurrir porque el ejercicio ayuda a disminuir la grasa corporal, la inflamación y los niveles de azúcar en sangre, han señalado los expertos.
El tumor colorrectal es uno de los tipos más comunes de cáncer a nivel mundial. Entre los principales factores que han influido en su prevalencia se encuentra el sedentarismo de los adolescentes, ya que, aunque en la mayoría de los casos aparece tras los 60 años, actualmente está aumentando el número de enfermos menores de 50 años. En este punto, resulta destacar que un adenoma no es cáncer, por lo cual el estudio concluye que la actividad física ayuda a prevenir la enfermedad, ya que reduce el riesgo de desarrollar un precursor.
En este sentido, Leandro Rezende, investigador de USP y autor del estudio, ha explicado que esto sugiere que existe un efecto acumulativo de la actividad física a medida que la vida continúa, por lo que cuanto más actividad física, menor será el riesgo de desarrollar adenoma en la edad adulta. Por su parte, José Eluf Neto, profesor de USP y asesor del trabajo, ha concluido que esto resalta la importancia de las políticas para fomentar la actividad física como prioridad de salud pública.
setiembre 03/2019 (Europa Press) – Tomado del Boletín temático en Medicina. Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
Artículo de referencia:
Leandro Fórnias Machado de Rezende, Dong Hoon Lee, NaNa Keum, Katharina Nimptsch, and cols..: Physical activity during adolescence and risk of colorectal adenoma later in life: results from the Nurses’ Health Study II. British Journal of Cancer. Volume 121, pages86–94 (2019)