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Una intervención en dos tiempos con prótesis a medida resuelve un aneurisma de aorta desde el corazón a las piernas; cirujanos del Hospital Universitario Quirónsalud de Madrid aportan imágenes de este complejo procedimiento.
El tratamiento quirúrgico del aneurisma de aorta es una de las intervenciones más complejas que se hacen en el quirófano, superior incluso, al decir de muchos, a un trasplante cardíaco. Cuando el daño se extiende por toda la aorta (ascendente, torácica y abdominal), aumenta también la dificultad. Uno de esos casos, llevado a cabo por un equipo de cirujanos cardíacos y vasculares del Hospital Universitario Quirónsalud de Madrid, se acompaña aquí de imágenes que muestran el detalle de este procedimiento.
«Todo el trayecto estaba dilatado, lo que incrementaba el riesgo. En estos casos, la cirugía es muy compleja porque debemos sustituir o reparar la función de la aorta en toda su extensión», explica Alberto Forteza, jefe del Servicio de Cirugía Cardíaca del Hospital Universitario Quirónsalud de Madrid. «El abordaje es tan complejo que es necesario realizarlo en dos tiempos para hacerlo con seguridad. En una primera fase, los cirujanos cardíacos reemplazamos la raíz de la aorta la aorta ascendente y todos los troncos aórticos que llevan la sangre al cerebro y a los brazos con una prótesis especial híbrida que lleva incorporada una endoprótesis que se libera una vez está colocada. Con la primera intervención se trató la parte superior de la aorta».
Quince días después un equipo de cirujanos vasculares dirigido por Enrique Puras, jefe del Servicio de Cirugía Vascular del Hospital Universitario Quirónsalud de Madrid, implantó desde la arteria femoral una prótesis a medida que sustituyó el resto de territorio aórtico: «También se sustituyeron los troncos viscerales con ramas al tronco celiaco, arterial mesentérica y a las arterias renales», detalla Puras.
«Este caso fue especialmente complejo porque estaban afectadas todas las ramas importantes que parten de la aorta y que irrigan el cerebro, los brazos, los órganos abdominales, el intestino, la médula y los miembros inferiores».
El paciente lleva una aorta artificial entera desde la raíz del corazón hasta las piernas. «Esta cirugía es tan compleja que se realiza en muy pocos centros del mundo», aclara Forteza.
marzo 14/2017 (diariomedico.com)