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Garbanzos, habas, lentejas, porotos comunes, guisantes, porotos chinos, guandúes, caupíes y almortas, los principales cultivos de legumbres que se producen en el mundo, podrían ayudarle a mantener la salud.
Estas leguminosas tienen un papel especialmente importante en los sistemas sustentables de producción agrícola y la seguridad alimentaria y nutricional en las tierras áridas, que abarcan más de 40 % de la superficie terrestre del planeta y son el hogar de aproximadamente 2.500 millones de personas.
«Estos cultivos son el pilar de la agricultura y la alimentación en estas regiones y constituyen una importante fuente de proteínas para miles de millones. Como la población es cada vez más consciente de su salud, la demanda por las legumbres está en aumento», aseguró el Centro Internacional de Investigaciones Agrícolas en Zonas Áridas (Icarda), al anunciar la Conferencia Internacional sobre Legumbres para la Salud, la Nutrición y la Agricultura Sostenible en Zonas Áridas.
En el Año Internacional de las Legumbres, la conferencia – que se celebrará en Marrakech, Marruecos, los días 18 a 20 de este mes – pretende sensibilizar a los protagonistas de la investigación y las industrias de las leguminosas sobre los hallazgos científicos más recientes en materia de salud, nutrición y beneficios ambientales relativos a la producción, el procesamiento y el consumo de legumbres.
También se espera que la ocasión ofrezca una plataforma para que los actores en cuestión, entre ellos científicos, políticos y empresarios, analicen las diversas contribuciones de las legumbres a la seguridad alimentaria y nutricional y la sanidad de los ecosistemas.
La conferencia se «centrará en Asia central y occidental y en África del norte», y en ella «se elaborará una hoja de ruta para aumentar la productividad y la rentabilidad de las legumbres mediante la diversificación y la intensificación de los sistemas de cultivo de cereales para la ganadería», explica el Icarda.
La conferencia internacional es organizada por el marroquí Instituto Nacional para la Investigación de la Agronomía, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y otras instituciones nacionales y regionales.
¿Cómo hacer para que los niños y las niñas coman legumbres? Las legumbres son un ingrediente muy versátil en la cocina, ya sea como plato principal o de acompañamiento. Son el complemento perfecto para incluso el más audaz de los sabores.
Pero como sucede con todo ingrediente nuevo, convencer a los comensales más reacios de la familia de aprobar estos porotos, arvejas y lentejas a veces puede resultar más que difícil.
Por eso, a continuación la FAO propone algunas sugerencias divertidas y creativas para que sus hijos e hijas se entusiasmen con el consumo de las legumbres.
Comience por lo familiar El hummus es una conocida crema de garbanzos que a muchos niños y niñas les encanta. ¿Pero sabía usted que se puede hacer con casi cualquier tipo de legumbres? Para su receta favorita de hummus, basta con sustituir los garbanzos con lentejas o porotos cocidos. Intente servirlo con pan de pita tostado o verduras en rodajas, o untado en un sándwich.
Las hamburguesas y las albóndigas también son un alimento que gusta mucho a los más pequeños, y las lentejas, los frijoles o una mezcla de ambos pueden remplazar a la carne para hacer deliciosas hamburguesas y albóndigas vegetarianas.
Elimine lo «blando y húmedo» Muchos niños odian la textura «blanda y húmeda» de los frijoles. Eso se puede evitar cocinando granos secos en lugar de enlatados, lo que resulta en una textura mucho más agradable al paladar. Los frijoles secos deben dejarse en remojo durante toda la noche antes de cocinar.
El método participativo Lograr que las niñas y los niños participen en la elaboración de las comidas puede despertar su entusiasmo por los platos que ayudaron a crear. Llévelos al mercado y deje que sus hijos elijan las legumbres que quieran comer.
Cuando haga hamburguesas vegetarianas con legumbres, permita que los pequeños le ayuden a mezclar el contenido y darles forma. También pueden elaborar sus propios burritos o tacos de porotos.
Juegue con la comida Los porotos, las arvejas y las lentejas se pueden distribuir con facilidad en el plato para crear diferentes diseños, como caritas felices o estrellas fugaces. Incluso los propios niños pueden diseñar su plato de legumbres.
¿Qué pasa con los adultos? Una buena nutrición es muy importante para el desarrollo físico y mental, y permite a las personas alcanzar su máximo potencial, por ejemplo, en los estudios y el trabajo, comentó Francesco Branca, director de Nutrición de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en una entrevista.
«Además, ayuda a mantener un sistema inmunitario fuerte, que nos protege tanto de enfermedades transmisibles como no transmisibles. La desnutrición es un importante contribuyente a la enfermedad. Casi la mitad – 45 por ciento – de todas las muertes de niños menores de cinco años están vinculadas a la subnutrición», añadió.
«Una dieta poco saludable es la mayor causa subyacente de las muertes en todo el mundo, lo que representa 11 millones de muertes cada año. Otra medida de la carga de morbilidad son los años de vida ajustados por la discapacidad (AVAD), que es el número de años perdidos debido al mal estado de salud, discapacidad o muerte prematura», indicó Branca.
«La dieta poco saludable es responsable de 241,4 millones de AVAD, la malnutrición infantil y materna son responsables de 176,9 millones de AVAD y la obesidad lo es de 134 millones», precisó el experto.
Las legumbres contienen muchos nutrientes, de los cuales uno de los más importantes es la fibra. Branca aseguró que una dieta rica en fibra puede ayudar a evitar la obesidad, sobre todo si se practican deportes u otra actividad física.
«Los estudios sugieren que una de las razones de que la diabetes tipo 2 fuera relativamente rara en zonas rurales de África hace 40 años era que la gente seguía una dieta alta en fibra. Estudios más recientes en Estados Unidos también indican que las dietas con alto contenido en fibra reducen las probabilidades de desarrollar diabetes», destacó en la entrevista.
«El consumo de alimentos como las legumbres, que son ricas en fibra, puede ayudar a reducir la glucosa en sangre y los niveles de insulina, que es crucial para las personas que son diabéticas o prediabéticas», subrayó Branca.
Muchos estudios indican que las dietas ricas en fibra pueden reducir el riesgo de enfermedad cardíaca y reducir la presión arterial, expresó. «Una de las maneras en que esto funciona es porque muchos tipos de fibra reducen los niveles del colesterol ó malo’ en la sangre de una persona, que a su vez reduce su riesgo de enfermedades del corazón», sostuvo Branca.
Este tipo de dietas ricas en fibra tienen muchos más beneficios para la salud, y existen indicios de que pueden reducir el riesgo de ciertos tipos de cáncer y proteger de la caries dental, dijo el experto de la OMS.
abril 17/2019 (IPS).- Tomado del Boletín de Prensa Latina Copyright 2016. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
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