El psicólogo y antropólogo Alberto Villoldo declaró que \»en la base de toda  enfermedad hay un desbalance energético\» y opinó que \»la medicina occidental es fabulosa para traumas, pero para enfermedades crónicas es pésima, porque está tratando los síntomas y no las causas\».\»Tenemos que ir al origen de la enfermedad y no solamente los síntomas, no medicar los síntomas\», sostuvo en diálogo con ANSA este médico que busca rescatar la tradición chamánica y basa sus estudios en décadas de convivencia con las prácticas espirituales de chamanes del Amazonas y de Los Andes.
Autor de numerosos libros, entre ellos \»Chamán, Sanador, Sabio\», estuvo en Santiago antes de ir a Córdoba, Argentina,  para dictar una serie de conferencias y encabezar talleres sobre medicina energética junto a la chilena Marcela Lobos.
\»El médico occidental gana dinero solamente cuando tú estás enfermo. El chamán gana cuando tú estás saludable, porque su  modelo es mantener la salud antes que se manifieste la enfermedad\», explicó.
Villoldo trabajó en San Francisco State University, de Estados Unidos, y fundó el Biological Self Regulation Laboratory para estudiar cómo la mente crea salud y también enfermedades psicosomáticas.
A nivel mundial hay más de 12 modelos médicos completos, entre ellos la medicina china, la occidental, la homeopática,  cada una con sus normas.
\»La norma chamánica es que toda enfermedad se causa por un desbalance energético que se origina en un trauma. Un cáncer, por ejemplo, se sigue desarrollando porque las células no saben que tienen que morir. Para combatirlo es necesario cambiar la información y mandar a las células la correcta\», aseveró.
El investigador instruye a personas en la práctica de la  medicina energética en The Four Winds Society, con centros de formación en Nueva Inglaterra y California, Estados Unidos, y en Reino Unido, Holanda y Park City, Utah.
Aseguró que un practicante entrenado con sus enseñanzas puede detectar y diagnosticar una enfermedad con un certeza de 99%.
Villoldo sostuvo que las dos medicinas juntas \»crean un patrón extraordinario que por primera vez podemos complementar\» y admitió que la medicina tradicional se rodeó de mucha superstición.
Abundó que la medicina energética \»está fundamentada en el hecho que tenemos un campo de información que rodea al cuerpo humano, que contiene toda tu información genética y sicológica y toda la historia de tu trauma. Ese trauma te mantiene repitiendo las mismas enfermedades, las mismas formas de vivir y de morir de tus ancestros\».
\»Para sanarte tienes que borrar estas impresiones de trauma que tenemos a nivel muscular, celular de ADN y de nuestro campo de información. Esas impresiones están en un campo luminoso de información que es lo que descubrieron los chamanes\», indicó.
\»Me he dedicado 25 años a redescubrir este conocimiento que es lo que enseñamos ahora para actuar directamente en el campo de información a fin de borrar las impresiones del trauma que causa la enfermedad. El campo lumínico es un campo  electromagnético generado por la actividad eléctrica del sistema nervioso que contiene información genética de tus padres y el trauma con que naces\», detalló.
Villoldo recordó que \»la barrera de la placenta es completamente permeable a las hormonas del estrés y si la madre está feliz, el niño está feliz. Tú naces con el  50% de tu personalidad ya formada dentro del útero de tu madre\».
Según este médico, todas las personas se pueden curar a sí mismas pues disponen de recursos extraordinarios para crear salud.
\»El cuerpo sabe cómo sanarse y la medicina energética puede llevar a restablecer el balance interno que crea salud\», dijo.
Definió a la medicina energética como \»un modelo de medicina colaborativo no violento ni agresivo, completamente contradictorio al paradigma occidental\», y aseveró que su trabajo es entrenar chamanes occidentales que estén ubicados en la ciencia, en la neurología, \»y que conozcan las tradiciones antiguas de nuestra América, que se nos han olvidado\».
Hasta ahora formó a unas 10 000 personas en más de 90 ciudades de los cinco continentes y actualmente unos 2000 alumnos antiguos cursan un programa de dos años para \»entregar un nuevo modelo de salud, porque el actual en Occidente ya no es sustentable\», concluyó.

Santiago de Chile, agosto 25/2010 (ANSA)

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