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Más de 2 000 millones de dosis de vacunas contra la COVID-19 habían sido administradas hasta el jueves en China y más de 889 millones de personas habían completado el ciclo de inoculación, informó recientemente la Comisión Nacional de Salud (CNS).
Mi Feng, portavoz de la CNS, indicó en conferencia de prensa que el país llevará a cabo esfuerzos continuos para avanzar en la campaña masiva de vacunación y advirtió contra cualquier relajamiento de la protección personal por parte de la ciudadanía.
China ha extendido su programa de vacunación masiva a los menores de entre 12 y 17 años de edad. Hasta el jueves, más de 124 millones de dosis de vacunas habían sido administradas entre este grupo etario, apuntó Wu Liangyou, subdirector de la división de control y prevención de enfermedades de la CNS.
Un total de 1 070 millones de personas en China han sido vacunadas contra la COVID-19, incluidas aquellas que solo han recibido una dosis, lo que representa el 76 por ciento de la población del país, según las cifras de la CNS.
China controló rebrote de COVID-19 con variante Delta del SARS-CoV-2
La Comisión Nacional de Salud de China declaró controlado el rebrote de COVID-19 provocado por la variante Delta del coronavirus SARS-CoV-2 y considerado el peor después del comienzo de la pandemia en Wuhan.
Mi Feng, vocero de esa entidad, aseguró que la cifra de casos autóctonos decreció en los últimos 11 días y ahora solo quedan 38 regiones del país clasificadas con riesgo de contagio del virus.
No obstante, urgió a cada provincia mantenerse atenta e implementar medidas que permitan actuar con celeridad a la menor sospecha de infecciones, pues la Delta es más peligrosa y se propaga rápido.
En ese sentido, el Ministerio de Educación llamó a varias gobernaciones locales a revocar la polémica exigencia de vacunación para estudiantes y padres antes el comienzo de las clases el 1 de septiembre, tras precisar que se trata de una decisión voluntaria.
Pero insistió en que maestros y alumnos de todos los niveles académicos deben abstenerse de visitar áreas declaradas en riesgo de contagio con el SARS-CoV-2, durante los 14 días previos a la apertura del curso.
En ese período también deben reportar la temperatura corporal, historial de viajes y los llamados códigos de salud, anclados en el teléfono personal.
Las escuelas deben garantizar máxima higiene, tomar las medidas necesarias para evitar cualquier caso de COVID-19 y solo las del nivel superior están obligadas a exigir mascarillas a estudiantes y profesores.
El más reciente rebrote de COVID-19 en China surgió a mediados de julio pasado, se extendió a una veintena de provincias con un repunte diario de los contagios autóctonos, pero no dejó fallecidos.
De manera general, el gigante asiático acumula al menos cinco mil 680 muertos y 122 mil 852 casos en su parte continental, Hong Kong, Macao y Taiwán desde el surgimiento de la enfermedad y del virus que la provoca en diciembre de 2019.
La campaña actual de vacunación se desarrolla con varios medicamentos de factura nacional y permitió hasta la fecha administrar más de dos mil millones de dosis a ciudadanos chinos y extranjeros.
El Gobierno estudia la pertinencia de aplicar una tercera dosis de refuerzo a grupos como los ancianos y trabajadores de sectores considerados de alto riesgo, porque luego de seis meses baja el nivel de anticuerpos a quienes recibieron los preparados de Sinovac y Sinopharm.
agosto 27/2021 (Xinhua/Prensa Latina) – Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
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