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China sigue apegada a su estrategia de tolerancia cero a la covid-19 y tampoco relajó la prevención sanitaria, aunque en los últimos días introdujo ajustes para adecuarse a la situación actual, precisó una fuente oficial.
Wu Zunyou, el principal epidemiólogo del Centro nacional de Control y Prevención de Enfermedades Infecciosas, dijo que ninguna de las decisiones tomadas significa el abandono del mecanismo de lucha contra dicha enfermedad, ni tampoco un enfoque más flojo.
Según aclaró, se tratan de métodos «perfeccionados y optimizados» para estar más a tono con las necesidades actuales, la situación real de la pandemia y escenario nacional.
También acotó que las acciones ayudarán a incrementar el movimiento de personas, estimular el crecimiento del país y coordinar mejor la implementación de los protocolos sanitarios con el desarrollo socioeconómico.
Asimismo, Wu urgió a los gobiernos locales a abstenerse de adoptar normas demasiado estrictas contra pasajeros y transportistas llegados desde otras partes del territorio.
El científico hizo sus declaraciones luego que esta semana China acortó de 14 a siete días el aislamiento centralizado de viajeros internacionales y contactos cercanos de enfermos de covid-19, además de dejar en solo tres días la posterior observación en las viviendas.
La nación asiática también redefinió las áreas consideradas con alto, mediano o bajo riesgo de infecciones, y simplificó la aplicación móvil sobre el historial de desplazamientos de cada individuo.
Observadores auguran que esos ajustes tendrán un impacto positivo y darán más espacio para equilibrar la batalla sanitaria con la necesidad de mantener las rutinas cotidianas de las personas y dinamizar el crecimiento económico.
El analista Zhang Wu’an señaló el buen efecto en la recuperación de la industria aérea, pues conllevarán a un rápido incremento de los vuelos desde y hacia el exterior, que desde 2020 son escasos, beneficiaría al turismo y al movimiento de estudiantes y trabajadores foráneos.
Mientras, el epidemiólogo Zeng Guang llamó a las autoridades a aprovechar el momento como una oportunidad para que China pueda finalmente dejar atrás el estatus de emergencia por pandemia, a un costo mínimo.
Incluso proyectó que el Gobierno flexibilizará más aún el mecanismo sanitario, buscará un enfoque más preciso y científico, y se concentrará en rectificar las prácticas extremas de las administraciones locales que conllevaron a barreras adicionales.
De manera general, China acumula al menos 21 mil 158 muertos y cuatro millones 291 mil 891 casos confirmados en su parte continental, Hong Kong, Macao y Taiwán desde el surgimiento de la enfermedad y del coronavirus que la provoca en diciembre de 2019.
julio 01/2022 (Prensa Latina) – Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
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