La variante ómicron, que se propaga más rápido que la delta, resultará en un aumento de la hospitalización y sobrecarga del sistema de asistencia médica, advirtió Zhang Wenhong, jefe del Centro para Enfermedades Infecciosas del Hospital Huashan de la Universidad Fudan, con sede en Shanghai.

Zhang agregó que la batalla entre la humanidad y la variante ómicron está en su «momento más duro».

En un blog en la plataforma china de microblogging Weibo, Zhang dijo que el número de casos importados de COVID-19 en Shanghai alcanzó un récord más alto.

Las vacunas y los medicamentos contra el virus son el fundamento científico central para superar la pandemia y regresar a la vida normal en el futuro.

Tras comparar los síntomas clínicos de pacientes infectados con la nueva variante ómicron y delta, el equipo de Zhang halló que Ómicron es «más contagiosa y más difícil de detectar, y tiene una letalidad innegable». Citando una declaración de la OMS que señala que la variante ómicron conlleva un «riesgo muy alto de aumento global».

Zhang señaló que la mejor estrategia para China es tener paciencia y acelerar la vacunación, y adherirse a las actuales tácticas de prevención contra COVID-19.

La variante ómicron ha sido identificada como la culpable de los últimos resurgimientos de COVID-19 en Tianjin y Anyang de la provincia central de Henan.

También se han producido infecciones con esta última variante altamente infecciosa en varias ciudades chinas, incluidas Changsha y Guangzhou.

enero 14/2021 (Xinhua) – Tomado de la Selección Temática sobre Medicina de Prensa Latina. Copyright 2019. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.

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