La violencia de género tiene diferentes manifestaciones. En nuestro entorno, la violencia de pareja hacia la mujer es la más frecuente. Ocasiona graves problemas de salud física, psíquica, sexual y reproductiva para la mujer. También afecta a la salud y bienestar de sus hijos, hijas y personas a su cargo. Frente a estas situaciones, la Organización Mundial de la Salud declaró en 1996 la violencia de género como un problema de salud pública, siendo un factor crucial en el deterioro de la salud de las mujeres y sus hijos.

Según el estudio publicado recientemente por la Delegación del Gobierno para la violencia de género, las mujeres víctimas de maltrato tardan una media de ocho años y ocho meses en verbalizar su situación, ya sea a través de los recursos socio- sanitarios o bien, interponiendo una denuncia.

La Organización Mundial de la Salud declaró en 1996 la violencia de género como un problema de salud pública

Ante este tipo de situaciones, los profesionales sanitarios están capacitados para ayudar a las mujeres que sufren maltrato, especialmente, los profesionales de los centros de salud, por la cercanía y accesibilidad al centro. Los médicos de Atención Primaria son clave para detectar el maltrato, intervenir precozmente y notificarlo a otros servicios o recursos, si lo consideran necesario.

Campaña de sensibilización

En el año 2000, la Asamblea General de Naciones Unidas designó el 25 de noviembre como Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, invitando a gobiernos y organizaciones a promover en este día actividades dirigidas a sensibilizar a la población respecto este grave problema.

Como contribución anual a esta iniciativa, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha creado una campaña informativa dirigida a la población en general. Pretende concienciar y sensibilizar sobre los efectos de la violencia en la mujer y su entorno familiar, por parte de su pareja o ex pareja masculina. Asimismo, en la campaña se destaca el papel del especialista de Atención Primaria, como profesional apto para detectar posibles casos de violencia de género y generar la ayuda adecuada a cada paciente.

Otro de los objetivos de la campaña, es concienciar a las mujeres que viven este tipo de situaciones, haciéndoles entender que muchos de sus problemas de salud pueden estar directamente relacionados con el maltrato físico que sufren.

La financiación para esta campaña procede de los fondos del Pacto de Estado en materia de violencia de género. La coordina la Dirección General de Humanización y Atención al Paciente. Colaboran también los departamentos y unidades de la Consejería de Sanidad implicadas en la prevención y atención sanitaria de la violencia de género. Estos organismos están integrados a su vez, en la Comisión Técnica de Acciones en Salud frente a la Violencia de Género, presidida por la Directora General de Salud Pública, Carmen Yolanda Fuentes Rodríguez.

Guía asistencial para los profesionales

Las consultas de Atención Primaria se han convertido en una puerta más de acceso frente a la detección de la violencia de género. Médicos y pacientes establecen en consulta una relación profesional pero de confianza, en un clima que ayuda a la mujer a reconocer y afrontar su situación. Por su parte, los profesionales sanitarios pueden identificar las necesidades de salud de la mujer, las de sus hijos y los recursos a los que derivar para una atención integral.

Como guía para esta labor asistencial, los profesionales de Atención Primaria cuentan con el documento “La violencia de pareja hacia las mujeres: Guía de Actuación en Atención Primaria. Equipos y Unidades de Apoyo”, que responde a la necesidad de aportar información y herramientas para el manejo de cuestiones relativas a: identificación de indicadores de sospecha de violencia de género, intervención con las víctimas, aspectos legales, el papel del profesional en la notificación de la sospecha, información sobre los recursos socio- sanitarios específicos disponibles, criterios de derivación en el marco de los servicios sanitarios y activación de otros recursos. Dicha labor, se encuadra en el Servicio de Detección de Riesgo de Maltrato Familiar, un servicio transversal que aborda, desde hace diez años, tanto el maltrato en las mujeres como el infantil y el de personas de la tercera edad.

Formación continuada

La formación de los profesionales de la Consejería de Sanidad en materia de violencia de género está contemplada en los planes anuales de formación continuada, como una línea específica desde el año 2005. La formación es coordinada por la Dirección General de Investigación Docencia y Documentación.

Desde 2005, en Atención Primaria se han conseguido logros importantes que han permitido mejorar la calidad de la atención prestada a las mujeres víctimas de violencia de género. Cabe destacar entre ellos la elaboración de documentos que facilitan las intervenciones y la formación específica.

Desde 2014 y solo en el área de Atención Primaria, se han organizado más de 140 cursos, que han formado a 3 680 profesionales y se han destinado 954 horas para este tema.

Desde la Gerencia Asistencial de Atención Primaria se han generado nuevos cargos y nombrado responsables de violencia de género en las Direcciones Asistenciales y en los Centros de Salud. Además, se ha elaborado un Plan de acción específico para dichos responsables de Violencia de Género.

Este plan incluye la difusión de resultados, la formación de profesionales, la definición del rol del responsable de Violencia de Género en los Centros de Salud y la articulación de una estructura organizativa de responsables de violencia de género en Atención Primaria que favorece la coordinación y dinamización de las acciones en AP. También sirve de apoyo a la Estrategia Regional de Acciones de Salud frente a la Violencia de Género”, indica Sonia López Palacios, directora Asistencial Enfermera de la Dirección Asistencial Centro de Atención Primaria y representante de Atención Primaria de la Comisión Técnica de Acciones en Salud Frente a la Violencia de Género de la Comunidad de Madrid.

Temáticas y perfiles sanitarios

Con carácter general, la formación se estructura en actividades de sensibilización, que a su vez, pueden ser básicas y específicas. Los aspectos contemplados incluyen formación en violencia de pareja, violencia sexual, mutilación genital femenina, efectos en los hijos como víctimas y testigos de la situación de violencia, trata de seres humanos para explotación sexual, aspectos legales, situaciones de vulnerabilidad (embarazo, infancia y adolescencia, mujeres mayores, adicciones…) y potenciar habilidades y herramientas necesarias para la atención (comunicación, entrevista clínica…). Igualmente, incluye formación para formadores e indicaciones específicas dirigidas a los profesionales con especial implicación, como son los responsables de violencia de género de los centros asistenciales.

En definitiva, las actividades formativas van dirigidas a los profesionales de los niveles asistenciales de Atención Primaria, Hospitalaria, Urgencias y Salud Pública. Los destinatarios de las mismas son los profesionales sanitarios (medicina, enfermería, psicología clínica, auxiliares de cuidados de enfermería, fisioterapeutas), y no sanitarios (trabajadores sociales, auxiliares administrativos, celadores…). Se desarrollan en diferentes formatos como cursos, jornadas, talleres y seminarios. La metodología utilizada incluye exposiciones teóricas, trabajo grupal, role, playing y simulación.

diciembre 11/2019 (Diario Médico)

diciembre 12, 2019 | Dra. María Elena Reyes González | Filed under: Bienestar y Calidad de Vida, Salud Pública, Sociología | Etiquetas: , , |

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