Algunos estudios indican que los ácidos grasos omega 3 podrían modular la respuesta inflamatoria en los pacientes con depresión, de modo que ayudarían a mejorar tanto la adherencia al tratamiento como la prevención de recaídas. Esta es la conclusión principal de la ponencia formativa «Evidencia científica de las aplicaciones de los ácidos grasos Omega-3 en psiquiatría», expuesta en la reunión de la Asociación Española de Psiquiatría Privada (ASEPP), con la colaboración de Laboratorios IE4 LAB y Ferrer.
En el encuentro, moderado por el doctor Javier Correas Lauffer, jefe del servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario del Henares y psiquiatra asociado de la ASEPP, Irene Artigas Alomà, directora médica de IE4 LAB, destacó que solo el 40 % de los pacientes con depresión responden al tratamiento con fármacos con una remisión total de los síntomas, frente a un 60 % que no lo hace. Sin embargo, en los últimos años se ha demostrado que, al tratarse de una enfermedad inflamatoria que produce daño oxidativo, el consumo de ácidos grasos omega 3 mejora esas cifras, como complemento al tratamiento de base con antidepresivos, explica Artigas.De acuerdo con la Sra. Artigas, uno de los aspectos clave para que este alimento coadyuvante al antidepresivo ofrezca beneficios, es «la cantidad y concentración de los ácidos grasos de cadena larga EPA y DHA, ya que solo han demostrado resultados beneficiosos aquellas formulaciones con una correlación EPA-DHA 3 a 1 (según las recomendaciones de la APA, «en trastornos psicóticos y del estado de ánimo se recomienda el consumo de 1g de EPA/DHA al día»). Como recuerda Irene Artigas, «Om3gafort EPA 900 mg+ presenta 1200 mg de Omega-3, con una concentración de EPA/DHA del 87,9 %».
«Cada vez hay más evidencia científica de que los ácidos grasos omega-3 pueden reforzar la eficacia del tratamiento antidepresivo, así como ayudar a una posible reducción en las recaídas y abandonos de tratamiento», coincide el doctor Correas. Los ácidos grasos omega-3 se han empleado ampliamente en otros campos terapéuticos, pero en psiquiatría hay mucho camino por recorrer. Por este motivo, «las evidencias científicas sobre sus resultados todavía son débiles y es necesaria más investigación», declaró el doctor. Por su parte, Laura Ferrando Bundío, presidenta de ASEPP, destacó la necesidad de apostar por estos complementos, ya que «pueden aportar muchos beneficios al cuidado de la salud mental».
Para conseguir productos de alta calidad, en primer lugar, hay que extraer y refinar el aceite de pescado para reducir a límites indetectables los componentes indeseados tales como dioxinas, metales pesados y AG Saturados, de esta manera se obtienen productos con altas dosis y concentraciones de EPA/DHA, resumió José Luis Lirio, director de Ferrer Hospital, al término de la ponencia. En este sentido, Lirio quiso recordar que Om3gafort EPA 900 mg+ contiene una elevada cantidad de omega 3 de alta concentración y pureza.
noviembre 23/2017 (immedicohospitalario.es)