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Los casos potenciales de microcefalia en Brasil siguen aumentando y ya hay 739 bebés y fetos sospechosos de estar afectados por esta malformación que los científicos creen que estaría relacionada con el virus zika, transmitido por el mosquito responsable del contagio del dengue.
El Ministerio de Salud anunció, además, que está investigando la muerte de un recién nacido con microcefalia para determinar si también hubo presencia del virus zika. El caso se produjo en el estado de Rio Grande do Norte, en el nordeste del país, donde se encuentra el mayor foco de esta enfermedad congénita que genera un cráneo inferior a lo normal y perjudica el desarrollo intelectual del bebé.
«Tenemos un problema grande para resolver, que no será resuelto solo por el gobierno, precisa ser una acción de toda la sociedad», advirtió el ministro de Salud, Marcelo Castro, durante una rueda de prensa en Brasilia.
«No contamos con relatos o literatura, ni acciones realizadas en otros países que nos puedan orientar en esta situación», añadió.
Más temprano, el ministerio había emitido un informe reportando 520 sospechas de esta enfermedad, también por encima de los 147 casos registrados en 2014, que luego actualizó al recibir datos de otros estados, según explicó un asesor de prensa a la AFP.
La correlación entre el virus zika y la enfermedad aún no fue confirmada científicamente. De corroborarse, sería la primera vez que se prueba la existencia de ese vínculo. La propia directora de la OMS, Margaret Chan, dijo estar siguiendo el tema cuando pasó por Brasilia la semana pasada.
La mayoría de las infecciones se produjeron en el nordeste del país y las alarmas se encendieron cuando fue detectada la presencia del virus zika, similar al dengue pero más leve, en el líquido amniótico de dos embarazadas que habían manifestado la enfermedad y cuyos fetos fueron diagnosticados con microcefalia.
El virus zika es transmitido por el mosquito Aedes aegypti y este año fue hallado en exámenes de laboratorio en 18 estados de Brasil. Su potencialidad epidémica llevó al gobierno a formar un grupo de emergencia que reúne a 19 organismos para intentar contener los riesgos para la salud pública.
El mismo mosquito es el responsable del contagio de otra dolencia en Brasil, el dengue, que hasta noviembre registraba 1,5 millones de casos probables, un 176% más que en 2014, y había causado la muerte de 811 personas.
Precisamente, el dengue y su transmisor son el foco de las autoridades para limitar el contagio de cualquier dolencia.
«Nada es más efectivo por el momento que combatir al mosquito del dengue», resumió Castro.
Brasil comenzó a investigar los casos a fines de octubre, cuando se produjo un aumento inusitado de casos de microcefalia con centro en el estado de Pernambuco (nordeste), que el año pasado tuvo 12 casos y en 2015 ya lleva 487.
«El hecho ya fue comunicado a la OMS y a la Organización Panamericana de la Salud conforme los protocolos internacionales», señaló el ministerio en su comunicado. No obstante, remarcó, «aún no es posible tener certeza sobre la causa del aumento de la microcefalia registrado en nueve estados».
noviembre 24 2015 (AFP) – Tomado del Boletín de Prensa Latina Copyright 2015. Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.
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