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A través de la utilización de la imagen que proporciona la cardioresonancia en adultos de edad avanzada de Islandia, investigadores han estimado que la prevalencia de los ataques de corazón no detectados esta asociada con un incremento del riesgo de muerte. El estudio ha sido publicado en JAMA (doi:10.1001/2012.jama.11089).
Según los datos de la investigación, la prevalencia y el pronóstico de los infartos de miocardio (IM) no detectados en adultos de edad avanzada con y sin diabetes puede ser mayor de lo que se sospechaba en otros estudios. La detección avanzada de IM, con una resonancia magnética cardiaca es más sensible que métodos anteriores. Determinar la prevalencia de IM no diagnosticados en estos grupos es importante porque la edad y la diabetes aumenta el riesgo de enfermedad coronaria.
El equipo de investigadores de Erik B. Shelbert, del Instituto Nacional de Salud de Islandia, han comparado la prevalencia y el pronóstico del IM detectado y no detectado por un lado con imágenes de resonancia magnética cardiaca y por otro con electrocardiogramas, en participantes mayores, con y sin diabetes. Los datos de los 936 participantes de edades comprendidas entre los 67 y los 93 años fueron analizados, incluyendo 670 que fueron elegidos al azar y 266 que padecían diabetes.
Un total de 91 de los 936 participantes habían sufrido un infarto, la prevalencia de los infartos no detectados a través de la resonancia magnética era de un 17 % (157 participantes de 936). Aquellos con diabetes tenían una alta prevalencia de sufrir infartos de miocardio no detectados comparados con las personas sin diabetes. La resonancia magnética cardiaca identificó 157 infartos no detectados, comparados con los 46 detectados por el electrocardiograma. «En los ensayos con las personas escogidas al azar, 61 participantes habían tenido un infarto cardiaco diagnosticado y otros 97 un infarto no diagnosticado según las resonancias magnéticas, mientras que sólo 35 personas habían sufrido un infarto no detectado según el electrocardiograma, una cifra significativamente menor», afirman los autores.
En una media de 6,4 años, 30 de los 91 participantes con IM diagnosticado, y 44 de 157 con IM no diagnosticado murieron. «La utilización de medicamentos para el corazón fue significativamente menor en los pacientes con infarto de miocardio no detectado en comparación con aquellos con en los que si estaba detectado. Aproximadamente la mitad de las personas con IM no reconocido estaban tomando AAS, mientras que menos de la mitad estaban tomando estatinas o Beta-bloqueantes», afirman los investigadores.
Varios factores podrían contribuir a la alta prevalencia de los IM no diagnosticados. Esta investigación sugiere que las estrategias de prevención están muy limitadas. En primer lugar, la ruptura de la placa coronaria ocurre con frecuencia, especialmente en los diabéticos. La resonancia magnética cardiaca puede detectar las secuelas de IM o de erosión de la placa coronaria. Por último, los síntomas de IM pueden llevar a los pacientes o a sus médicos a atribuir síntomas de IM a causas no cardiacas.
septiembre 5 /2012 (Diario Médico)
Nota: Los lectores del dominio *sld.cu acceden al texto completo a través de Hinari.
Schelbert EB, Cao JJ, Sigurdsson S, Aspelund T, Kellman P, Aletras AH. Prevalence and prognosis of unrecognized myocardial infarction determined by cardiac magnetic resonance in older adults. JAMA. 2012 Sep 5;308(9):890-6.
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