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Según un estudio por investigadores del Centro Médico Johns Hopkins en Baltimore (Estados Unidos), han desarrollado unos biomarcadores que tendrán un impacto en el diagnóstico de la enfermedad antes de que se inicie.
Hay una necesidad urgente de desarrollar biomarcadores de diagnóstico fiable que puedan detectar el alzhéimer en una fase precoz», afirma Pravat Mandal, del departamento de Radiología del Centro Médico Johns Hopkins. «Este estudio se ha centrado en los últimos avances realizados en la identificación de biomarcadores de diagnóstico utilizando las técnicas de imagen».
Los investigadores examinaron varias imágenes de resonancia magnética para el diagnóstico del alzhéimer y para el control de la progresión de la enfermedad. Los científicos utilizaron la técnica de imagen de tensor de difusión (TDI) para identificar cambios en la sustancia blanca de los pacientes con deterioro cognitivo leve de tipo amnésico (DCL), un síntoma inicial de la enfermedad, que puede servir como un indicador del deterioro de la memoria.
Controlando la actividad de las alteraciones funcionales del cerebro los investigadores relacionaron que las deficiencias en el procesamiento visual del alzhéimer tenían un inmenso potencial como biomarcador precoz de diagnóstico. El equipo de Mandal identificó que los cambios neuroquímicos en los cerebros de los pacientes con DCL y alzhéimer podían proporcionar una señal de aparición de la enfermedad, y pueden ayudar en el diagnóstico de pacientes que se mueven d eun deterioro cognitivo leve a un alzhéimer más avanzado.
Además, los investigadores descubrieron que los pacientes tratados con donepezil para los síntomas leves cognitivos tenían un aumento significativo de la conectividad interhemisférica funcional de la corteza prefrontal dorsolateral de izquierda y derecha.
Los biomarcadores actuales se centran en correlacionar las plaquetas y los nudos, que funcionan como marcadores poco fiables en los sujetos de avanzada edad con demencia. Los autores del estudio sugieren que el reconocimiento de la demencia en sujetos adultos es diferente a la demencia en jóvenes, lo que conducirá a nuevos enfoques en el desarrollo de biomarcadores y la investigación.
septiembre 3/2012 (Diario Médico)