nov
26
La cirugía de cataratas adquirirá en el futuro mayor precisión mediante un dispositivo que evita el riesgo de rotura de la cápsula natural que contiene al cristalino, utilizando un láser de femtosegundos.
El dispositivo, que aún está en etapa experimental en Estados Unidos, fue presentado en Milán en la apertura del Congreso Nacional de la Sociedad Italiana de Oftalmología (SOI).
La característica que aumenta la utilidad de este instrumento es que mediante el láser de femtosegundos, fracción temporal muy pequeña que emite luz con tiempos extremadamente cortos, se logra una alta precisión.
El cristalino, que es una lente natural pequeña, suele opacarse, disturbio que se conoce como cataratas. Las personas que sufren esa enfermedad pierden visión porque el cristalino, al opacarse, disminuye la nitidez y los rayos de luz no llegan fácilmente a la retina.
Hasta ahora la única manera de curar las cataratas consiste en recurrir a una intervención quirúrgica, porque los síntomas no desaparecen con gotas o pastillas. Antes de que fuera posible esta cirugía las personas que padecían cataratas solían quedar ciegas, justamente por la imposibilidad de tratamiento de la disfunción.
En muchas clínicas el procedimiento actual consiste en realizar una incisión pequeña en la córnea e introducir un facoemulsificador que remueve con ultrasonido el cristalino opacado, para reemplazarlo luego por una lente intraocular.
Las lentes que se colocan en sustitución del cristalino pueden ser rígidas, de siliconas, esféricas o de acrílico.
La intervención de las cataratas, problema ligado a la edad, se difundió mucho en los últimos años y en Italia se realizan alrededor de 550 000 cirugías anuales, estimó Matteo Piovella, presidentes de la SOI.
Las cataratas suelen afectar al 30% de las personas mayores de 70 años y a la casi totalidad de quienes superan los 80 años.
La intervención es considerada segura, pero puede tener complicaciones en el 3% de los casos. El mayor riesgo que implica el procedimiento es que se rompa la cápsula que contiene al cristalino, problema que disminuirá con el uso de la nueva tecnología, destacaron los expertos.
El dispositivo nuevo logra altísima precisión con una combinación de láser en femtosegundos, atravesando como una especie de radar que escanea el cristalino opaco. De ese modo se determina con exactitud el espesor del cristalino y cuánta energía se debe enviar a su núcleo. Luego, la máquina efectúa una incisión perfecta en la cápsula por donde se coloca el cristalino artificial.
Algunos estudios estiman que este dispositivo también acorta el período de recuperación, durante el cual no se debe frotar y lavar el ojo operado, ni hacer movimientos bruscos por un par de días.
Milán, noviembre 25/2010 (ANSA)