dic
12
Los glóbulos blancos obtenidos de enfermos que están desarrollando sepsis, presentan en el laboratorio movilidad espontánea sin la presencia de químicos a su alrededor.
Un equipo de investigadores del Hospital General de Massachusetts en los Estados Unidos, ha identificado lo que podría ser un biomarcador que podría predecir
el desarrollo de la sepsis en enfermos con quemaduras importantes.
Los científicos han descrito en la Revista PLOS ONE , el descubrimiento de neutrófilos que se ven alterados significativamente entre dos y tres días antes del desarrollo de esta infección.
«Los neutrófilos son los principales glóbulos blancos que nos protegen frente a las infecciones y un individuo sano tiene unos 25 mil millones de neutrófilos preparados para luchar contra gérmenes invasores», ha explicado Daniel Irimia, autor de la publicación.
Se atreve a asegurar que los neutrófilos siempre son disciplinados y explica que cuando el número de neutrófilos no se eleva , este «ejército» puede confundirse y dejar de ser efectivo.
Aunque ningún estudio previo había identificado cambios asociados a la sepsis en el movimiento de los neutrófilos, es conocido que la motilidad de estos glóbulos blancos es menos eficiente en pacientes quemados.
Los investigadores diseñaron un mecanismo para estudiar la movilidad de las células frente a una señal química. Después compararon el movimiento de los neutrófilos de 13 enfermos con quemaduras graves y los compararon con la motilidad celular de tres voluntarios sanos.
Estos análisis mostraron que los neutrófilos de las personas sanas se movían más rápido y de forma más eficiente a través de este mecanismo que en los enfermos clasificados como grandes quemados, en los cuales los neutrófilos presentaron un movimiento limitado, lento y poco organizado hacia la señal química.
Sin embargo, cuando los científicos analizaron el movimiento de los neutrófilos sin la presencia química observaron que las células de los enfermos que habían desarrollado o iban a desarrollar sepsis se movían espontáneamente a través del mecanismo. Los neutrófilos del resto de pacientes y de las personas sanas no presentaron ninguna movilidad. Se evidenció que cuando comenzaron el tratamiento antibiótico este movimiento se redujo de forma progresiva.
«Nuestros descubrimientos indican que los neutrófilos tienen un papel mucho más importante en la sepsis que lo que se ha apreciado hasta ahora», expresó Irimia.
El investigador afirma que su equipo ya comenzó a realizar estudios en un mayor número de pacientes con quemaduras graves y que pretende expandir esta investigación a otros enfermos con riesgo de sepsis para comprobar si los descubrimientos pueden tener una mayor aplicación.
diciembre 12 /2014 (Diario Médico)