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Investigadores de la facultad de Medicina de la Universidad de Washington, en San Luis, Estados Unidos, ha identificado un nuevo objetivo potencial en el tratamiento de la diabetes y de la obesidad.
A partir de un estudio en modelo murino, encontraron que cuando la proteína diana estaba inactiva los animales eran más sensibles a la insulina y tenían menos probabilidades de coger peso, incluso siguiendo una dieta alta en grasas.
Los investigadores analizaron cómo el cuerpo administra la grasa desde las fuentes alimentarias , como los carbohidratos. El proceso requiere una enzima, la sintasa del ácido graso (FAS). Los ratones fueron modificados sin FAS en sus células adiposas y pudieron seguir una dieta alta en grasas sin padecer obesidad. “Los ratones sin Fas mostraron una mayor resistencia a la obesidad, en comparación con aquellos que no habían sido modificados y a pesar de que su dieta contenía alimentos grasos. La diferencia es que estos ratones metabolizaban la mayoría de la grasa y la liberaban “, explica Irfan J. Lodhi, principal autor del estudio.
El comportamiento de las células
Estudiando el comportamiento de las células adiposas, Lodhi descubrió que los ratones tenían dos tipos de grasa: grasa blanca y grasa parda y que en los ratones que habían modificado genéticamente para no producir FAS, la grasa blanca se había transformado en un tejido similar al adiposo pardo, de tal forma que era capaz de quemar calorías y mantenían a los ratones protegidos contra la obesidad. “Estas células tienen la estructura genética de las células del tejido adiposo pardo y actúan como si lo fueran. Ya que estos ratones no llegaron a engordar, parece que la FAS podría controlar la transformación de tejido adiposo blanco a tejido adiposo pardo. Al mover la FAS de la ecuación, la grasa blanca se transformaba en otras células que consumían más energía”, comenta.
Según Clay F. Semenkovih, otro de los investigadores, el siguiente paso será tratar de solucionar los problemas de las personas que tienen diabetes y obesidad activando estas células de grasa parda. La FAS es una nueva diana terapéutica en el tratamiento de estas enfermedades.
agosto 5/2012(Diario Médico)