La placenta en mujeres embarazadas que sufren de estrés maduran más rápido, según los resultados de un estudio realizado por la Universidad de Basilea.
En un artículo publicado en la revista especializada PLoS ONE, los investigadores revelan por primera vez que existen factores distintos a la alimentación y a hábitos muy concretos, como el consumo de tabaco, que influyen en la alimentación del feto dentro del vientre de la madre. Los nutrientes que son indispensables para el desarrollo del feto provienen de la placenta.
Para este estudio, los científicos de la Facultad de Psicología de la Universidad de Basilea analizaron unos 75 000 embarazos en Dinamarca, aunque los resultados no son concluyentes sobre el efecto que un crecimiento más rápido de la placenta podría tener efectos en el feto.
Una de las hipótesis que los investigadores enuncian es que la placenta podría crecer a mayor velocidad para, justamente, proteger al feto de los efectos del estrés.
Ginebra, enero 4/2011 (EFE)

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