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En los últimos años se han publicado varios estudios que demuestran que el consumo moderado de café puede reducir las probabilidades de padecer determinados tipos de cáncer.
El «American Journal of Epidemiology» informó de una investigación en Estados Unidos en la que se realizó un seguimiento de 968 432 personas durante 26 años, que no padecían ningún tipo de cáncer, con el objetivo de conocer la conexión entre el cáncer bucofaríngeo y la ingesta de café. Los resultados indicaron que el consumo de más de cuatro tazas de café al día reducía en un 49 » el riesgo de muerte por este tipo de cáncer, en comparación con los que no consumían café o lo tomaban de manera muy ocasional.
En Singapur se llevó a cabo un estudio similar, pero en relación al cáncer gástrico. Los investigadores analizaron a un total de 63 257 personas, y comprobaron que el consumo diario de café reducía el riesgo de padecer este tipo de cáncer, especialmente en mujeres. En cuanto al cáncer colorrectal y de color, la revista «Public Health Nutrition» publicó un metanálisis en el que se analizaban los datos de 41 investigaciones sobre esta relación y un estudio de cohortes realizado en Estado Unidos en el que se demostró que existía una relación inversa entre el consumo de café y el cáncer de colon, ya que los que tomaban cuatro tazas de café diarias tenían menos riesgo de sufrir esta patología.
Un estudio publicado en «British Journal of Cancer» mostraba que en los consumidores habituales de café la probabilidad de padecer cáncer de próstata era menor en comparación con lo nos bebedores. Otra investigación en «Annals of Oncology» reafirmaba estos resultados y establecía que cada taza de café adicional al día reducía el riesgo en un 3 % para el cáncer avanzado y en un 2 % para el mortal. Otro estudio analizaba los casos de 630 pacientes durante 6 años y medio, de los cuales se registraron 140 episodios de progresión del cáncer de próstata. Los resultados indicaron que un mayor consumo de café previo al diagnóstico está relacionado con un menor riesgo de progresión o recaída de este cáncer.
En cuanto al cáncer de endometrio, una investigación de «British Journal of Cancer» demostraba, tras analizar a 45 696 mujeres, que el café podría tener un efecto protector frente a este cáncer en mujeres postmenopáusicas obesas. Sin embargo, según un estudio prospectivo que se basaba en el «Nurse´s Health Study», en el que participaron 67 470 mujeres, se determinó que el consumo de menos de cuatro tazas al día no influía en el riesgo de padecer un cáncer endometrial, pero sí la ingesta de cuatro o más, ya que reducía el riesgo en un 25 » en comparación con las que consumían menos de un café al día.
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