dic
29
El primer brote de ébola que se produjo en 2018 en la República Democrática del Congo en la provincia de Equador se saldó a finales de julio con 54 casos, de los que se confirmaron 38 y 16 fueron catalogados como probables, con 33 muertes registradas y 17 casos confirmados. La novedad en este brote en RDC ha sido la aplicación de la vacunación en anillo por parte de MSF y la OMS con la vacuna experimental rVSVDG-ZEBOV-GP, ya probada en África Occidental en el brote de 2014-2016. En total 3199 personas, entre trabajadores de primera línea, los contactos y los contactos de contactos, recibieron la vacuna experimental contra el ébola.
Sin embargo, unos días más tarde, a comienzos de agosto, se inició otro brote en Kivu del Norte, a unos 2500 kilómetros del primero, en una zona de alta inseguridad, lo que está poniendo grandes trabas para acceder a la población y donde también se aplicó en ese mismo mes la vacunación en anillo. No obstante, la OMS ha decidido no declarar una emergencia internacional de salud pública. Ante el peligro de la propagación del ébola a los países vecinos, el Ministerio de Salud de Uganda, con el apoyo de la OMS, admistró la vacunación contra el ébola de los profesionales de la salud de primera línea. La inmunización ha comenzado a realizarse en el distrito de Ntoroko y se implantará en los cinco distritos de alto riesgo que bordean la República Democrática del Congo (RDC).
Recientemente el saldo del ébola en Kivu del Norte es de casi 500 casos confirmados y cerca de 300 muertes. El Gobierno del Congo ha anunciado la puesta en marcha del primer ensayo clínico mundial para analizar la seguridad y efectividad de todas las armas terapéuticas existentes.
diciembre 28/2018 (diariomedico.com)