ago
28
Un equipo del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC) ha realizado un novedoso procedimiento en España consistente en viajar fuera de la comunidad autónoma con un equipo de oxigenación extracorpórea en busca de un hígado de un donante en asistolia, también denominado «a corazón parado», para posteriormente implantárselo a un receptor en el hospital coruñés.
Una vez extraído el órgano del donante, en este caso en estado clínico irreversible, el hígado fue trasladado al CHUAC prácticamente como si no hubiese sido extraído del cuerpo para que el órgano llegue en óptimas condiciones para su implante.
Esta técnica es distinta a la que se utiliza cuando el donante está en muerte cerebral, ya que en estos casos el órgano puede ser trasladado de forma menos compleja en una especie de nevera inyectándole soluciones para su preservación y tratando de mantenerlo a baja temperatura.
La oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO) permite que se puedan aprovechar para ser trasplantados los órganos de un paciente que no está en muerte cerebral pero sí en situación clínica irreversible.
Para ello se utiliza una bomba de circulación extracorpórea que es la que hace la función sistólica del corazón y eyecta la sangre al organismo, de forma que el órgano se mantiene oxigenado hasta su implante en el receptor.
En el caso del CHUAC, el equipo sanitario ha viajado al Hospital Son Espases de Palma de Mallorca y ha utilizado la citada técnica para regresar con el órgano a A Coruña, lo que revela, según el director de procesos asistenciales del complejo hospitalario, Antón Fernández, “que ya no existen barreras geográficas” para poder ofrecer este sistema a cualquier donante en asistolia de cualquier hospital de España.
Este sistema permite obtener órganos en unas condiciones muy buenas, incluso a veces mejores que las de los donantes habituales, según ha corroborado en rueda de prensa el responsable del programa de trasplante hepático, Manuel Gómez.
En lo que va de año la mitad de los trasplantes que se han realizado han sido con este tipo de donantes, con un resultado “fantástico”, según ha señalado Gómez, lo que ha conseguido acortar de manera notable los tiempos de las listas de espera.
Además, el responsable de trasplante hepático del CHUAC ha reconocido que en el año 2010 se estaba llegando a una situación casi límite con listas de esperas muy largas en las que, con los donantes habituales, “no había posibilidad de progresar”.
Trasplantes en la primera semana de lista de espera
En este sentido, el cambio ha sido tal que, según el especialista, gracias a este sistema hay pacientes que se trasplantan la primera semana en la que son incluidos en la lista de espera, “con lo cual te trasplantas antes que te operas de la vesícula”, ha asegurado.
En lo que respecta al caso concreto del trasplante realizado recientemente, el hígado comenzó a trasplantarse a las 5 horas la madrugada y a las 8 horas, el paciente trasplantado estaba ya en la unidad de cuidados intensivos con el hígado funcionando perfectamente; al día siguiente fue trasladado a planta.
En este trasplante el donante era un hombre de 56 años y el receptor, un varón de 46 años.
Aparte de la calidad de los órganos, Manuel Gómez ha remarcado que este sistema resulta muy barato “algo muy importante para que pueda ser sostenible” ya que, según ha explicado, sobre todo requiere “mucho esfuerzo personal y mucho voluntarismo” algo que, agrega, hay en abundancia entre los profesionales del hospital coruñés.
El director de procesos asistenciales del complejo hospitalario, Antón Fernández, ha subrayado la importancia de la solidaridad de las familias que permiten la existencia de donantes; a este respecto ha adelantado que en lo que va de año el porcentaje de negativas de familias para donar órganos es muy bajo.
https://www.efesalud.com/trasplante-corazon-parado-higado