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El cáncer de cérvix ocupa el sexto lugar en incidencia de cáncer en mujeres y causa en torno a 800 muertes al año en España. En la actualidad, es fundamental destacar la relevancia de la implementación adecuada de los mecanismos de prevención, de diagnóstico y de tratamiento de este tipo de cáncer, ya que el 40 por ciento de las pacientes son diagnosticadas en estadios avanzados de la enfermedad», ha afirmado Lucas Minig, ginecólogo oncólogo, jefe de Servicio de Ginecología del Instituto Valenciano de Oncología (IVO) de Valencia.
Signos y síntomas del cáncer de cérvix
La mayoría de mujeres no presentan signos o síntomas en los primeros estadios del cáncer de cuello uterino. Sin embargo, Minig ha asegurado que «cuando el cáncer ha invadido otros tejidos u órganos suelen aparecer síntomas tales como un sangrado leve entre o después de la menstruación; un sangrado menstrual más largo y abundante de lo normal o bien, después del coito o durante el examen pélvico en la consulta del ginecólogo. Para las mujeres que se encuentran en la menopausia, el sangrado genital suele ser el principal síntoma clínico, así como el aumento de la secreción vaginal».
Según Susana Heredia, presidenta de la Asociación de Afectadas por Cáncer de Ovario y Ginecológico (Asaco), «es fundamental tener un diagnóstico precoz en este tipo de cáncer ya que el 90 por ciento de las mujeres sobrevive más de cinco años cuando se diagnostica en un estadio inicial. Por ello, es necesario materializar campañas de información sobre el cáncer ginecológico, en el que se incluye el cáncer de cérvix, para sensibilizar tanto a la mujer como a los profesionales sanitarios en torno a sus síntomas».
La incidencia del cáncer de cérvix supone el 3,7 por ciento de todos los cánceres femeninos. Minig ha destacado que, «a nivel mundial, los países menos desarrollados presentan mayor incidencia y mortalidad a causa del cáncer de cérvix, en comparación con países en desarrollo. Sin embargo, en los países con mayor desarrollo económico la mortalidad ha disminuido significativamente en los últimos cincuenta años».
Según Minig, «aunque se ha avanzado mucho en el tratamiento de otras enfermedades oncológicas, aún son demasiadas mujeres de todo el mundo las que continúan muriendo de cáncer de cérvix. Por este motivo, es necesario que las mujeres acudan al ginecólogo para realizar la citología de forma periódica para la detección precoz y el tratamiento exitoso y, además, es fundamental la investigación en pro del desarrollo de mejores opciones de prevención, diagnóstico y tratamiento para vencer este tipo de cáncer».
marzo 30/2016 (Diario Médico)