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Un trabajo que prueba la seguridad de las nanopartículas metálicas de óxido de hierro con potenciales usos en biomedicina ha merecido el Premio de Investigación 2015 de la Real Academia Galega de Ciencias, dotado con 6000 euros.El equipo galardonado está formado por Blanca Laffon, Gözde Kiliç, Eduardo Pásaro y Vanessa Valdiglesias, miembros del grupo de investigación en Diagnóstico Conductual y Molecular aplicado a la Salud, de la Universidad de La Coruña. En la categoría de investigadores jóvenes, el premio es para el químico de la Universidad de Vigo Miguel Alexandre Ramos.
La nanotecnología surgió hace unas tres décadas, pero su avance es exponencial. El uso de nanopartículas, especialmente las de tipo metálico, para la liberación controlada de medicamentos, el diagnóstico certero y temprano de dolencias y el tratamiento de enfermedades graves resulta cada vez más común.
Sin embargo, hace solo una década que se registraron los primeros estudios sobre potenciales efectos adversos. «Al igual que su tamaño y propiedades los convirten en una excelente opción para acceder al organismo a nivel celular, esas características pueden resultar negativas, al facilitar la interacción con cualquier componente celular», explica Blanca Laffon.
El grupo se centró en las nanopartículas de óxido de hierro, las más utilizadas en medicina por su capacidad para liberar fármacos y destruir de forma dirigida el tejido tumoral, pero aún son escasos estudios sobre citotoxicidad, genotoxicidad y neurotoxicidad.
Los científicos solo encontraron a nivel celular y neurológico resultados positivos en concentraciones muy elevadas y tiempos prolongados de exposición. El daño en el ADN, poco probable, no llegaría a producir roturas de doble cadena o pérdida de cromosomas.
enero 13/2016 (Diario Médico)
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