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Brasil tiene actualmente 3174 casos de bebés recién nacidos con sospecha de microcefalia vinculada al virus del Zika, informó recientemente el Ministerio de Salud.
En el primer informe epidemiológico del año, la cartera señala que investiga además las muertes de 38 bebés con microcefalia que «posiblemente» también estén relacionas con ese virus, transmitido, al igual que el dengue, por el mosquito «Aedes aegypti».
Los casos sospechosos se registraron en 684 ciudades de 21 estados, y corresponden al periodo entre mayo del año pasado, cuando el ministerio comenzó a notificar los casos de contagio con el virus del Zika, y el 2 de enero de este año.
De acuerdo con los datos actualizados, el estado de Pernambuco, en el noreste del país, continúa siendo el que registra el mayor número de casos sospechosos de microcefalia: 1185, lo que representa el 37,33 por ciento de los registrados en todo el país.
El número de casos de microcefalia a nivel nacional reportados en 2015 representa un notable incremento en relación a los de años anteriores: 147 en 2014, 167 en 2013, 175 en 2012, 139 en 2011 y 153 en 2010.
Recién en el segundo semestre del año pasado se comenzó a vincular el virus Zika con los casos de microcefalia. El virus comenzó a circular en Brasil en 2014, pero recién el año pasado comenzó a ser monitoreado.
A partir del rápido aumento de casos de microcefalia asociados a este virus, el Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff implementó múltiples acciones destinadas a frenar la reproducción del mosquito transmisor, las cuales involucran a 19 ministerios, a las gobernaciones regionales y las Fuerzas Armadas, entre otros organismos.
Además de las acciones para combatir al mosquito, las autoridades intensificaron las medidas para orientar a las embarazadas a controlarse adecuadamente y evitar el contacto con personas con fiebre o infecciones.
enero 7/2016 (dpa)