Un equipo de científicos estadounidenses ha presentado un ensayo clínico que respalda el uso que hacen algunos psiquiatras de la gabapentina, un antiepiléptico que, en vista de los resultados, podría tener importantes beneficios en las personas dependientes del alcohol.

Antiepilépticos como la gabapentina o el topiramato actúan normalizando una serie de neurotransmisores (GABA) que se alteran en el alcohólico crónico. Si éste no bebe alcohol, GABA empieza a disminuir y el paciente comienza a sentirse nervioso, con lo que los antiepilépticos alivian los efectos provocados por el uso continuado del alcohol.

La ventaja con la gabapentina es que no ha mostrado efectos adversos en los participantes del estudio, ofreciendo resultados iguales o mejores. En el estudio participaron 150 personas con una edad media de 40 años y una dependencia al alcohol moderada. Aleatoriamente, fueron divididos en tres grupos: los tratados con placebo, con 900 mg o con 1800 mg de gabapentina.

Después de 12 semanas, quienes habían recibido dosis altas consiguieron una abstinencia total cuatro veces mayor que el grupo placebo (17% frente a 4%). Entre los primeros, el doble de participantes lograron reducir el consumo en comparación con los segundos. En cuanto a los pacientes que recibieron 900 mg de gabapentina, mostraron beneficios intermedios en comparación con el grupo de dosis alta, lo que probablemente refleja un efecto de ‘dosis-respuesta’, un buen indicio de que el tratamiento es realmente efectivo a la hora de reducir la ansiedad, la depresión, el insomnio y otros síntomas de abstinencia.
noviembre 28/2013 (Neurologia.com)

Mason BJ, Quello S, Goodell V, Shadan F, Kyle M, Begovic A.Gabapentin Treatment for Alcohol DependenceA Randomized Clinical Trial.JAMA Intern Med.Nov 04, 2013 doi:10.1001/jamainternmed.2013.11950

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