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Los enfermos de cáncer deben seguir recomendaciones para evitar una recaída después del diagnóstico, entre las que sobresalen, llevar una dieta sana, mantener un peso ideal y hacer ejercicios de manera regular.
Así lo proponen especialistas de la Sociedad Americana del Cáncer en una nueva guía destinada a enfermos con tumores malignos, que sepan cómo cambiar los estilos de vida para reducir las posibilidades de regresión y mantenerse libres de la dolencia.
El informe señala que se debe evitar aumentar de peso durante el tratamiento, y explica que la actividad física no solo es segura y factible en esta etapa, sino que mejora la fatiga producto de la quimioterapia.
El documento establece que en muchos tipos de neoplasias el exceso de peso, la falta de ejercicio y la mala nutrición aumenta el riesgo de una recurrencia del tumor y reduce la probabilidad del tiempo libre de enfermedad y la supervivencia.
Los datos sugieren que los supervivientes de un cáncer, como cualquier otra persona, se benefician de estos importantes pasos, aseveró Colleen Doyle, director del departamento de nutrición y actividad física de la Sociedad Americana del Cáncer y coautor de la guía.
Existen evidencias lo suficientemente fuertes como para publicar unas guías para supervivientes. Tener unos hábitos de actividad física y de dieta sana debería estar como prioridad en la cabeza de cualquiera que haya sido diagnosticado con un cáncer, señaló.
Como cada vez hay más gente que supera esa afección hay un interés creciente en las informaciones sobre la elección de alimentos, actividad física, y suplementos dietéticos para mejorar los resultados del tratamiento, calidad de vida, y supervivencia total, manifestó Doyle.
Por tanto este informe presenta la mejor información posible para ayudar a los pacientes y sus familiares, agrega.
mayo 8/2012 (PL)
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