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Dos enzimas relacionadas, las fosfoinositida-3-cinasas (PI3K) gamma y delta, parecen influir de modo crucial en el desarrollo de leucemia linfoblástica aguda de células T, según estudio que se publica en Cancer Cell (DOI: 10. 1016/j.ccr.2012.02.029).
El trabajo, firmado por Thomas Diacovo, de la Universidad de Columbia (Estados Unidos), y sus colaboradores muestra que un inhibidor dual de ambas cinasas puede prolongar de forma significativa la supervivencia en un modelo murino de la enfermedad.
El nuevo fármaco, denominado CAL-130 y desarrollado por la compañía Gilead, también evitó la proliferación en las células T cultivadas de leucemia humana. «Si esta estrategia terapéutica puede combatir de forma segura y selectiva la actividad de esas enzimas, podríamos ser capaces de reducir la necesidad de utilizar quimioterapias convencionales que afectan de manera más amplia a las células proliferativas, incluyendo a aquéllas que se encuentran en tejidos sanos», ha señalado Diacovo, quien ha confirmado que su equipo ya está preparando los ensayos clínicos con el nuevo inhibidor.
Células circulantes
En los experimentos con ratones, la administración de CAL-130 redujo rápida y drásticamente el nivel de células leucémicas circulantes, pasando de una media de 100 millones por mililitro a menos de un millón por mililitro en 24-48 horas. Los niveles se mantenían bajos siete días después de la terapia y la supervivencia media de los roedores pasó de 7,5 a 45 días.
En las muestras de sangre de pacientes con leucemia linfoblástica aguda de células T, el fármaco mostró efectos antiproliferativos y proapoptósicos. Los autores recuerdan que ésta es una de las leucemias más difíciles de tratar.
abril 17/2012 (Diario Médico)
Nota: Los lectores del dominio *sld.cu acceden al texto completo a través de Hinari.
Prem S. Subramaniam, Dosh W. Whye, Evgeni Efimenko, Jianchung Chen, Valeria Tosello, Thomas G. Diacovo.Targeting Nonclassical Oncogenes for Therapy in T-ALL
Cancer Cell, Volume 21, Issue 4, 459-472, 17 Abr 2012