feb
3
En medio de un aluvión de críticas, el parlamento británico aprobó las reformas del Sistema Sanitario Nacional (NHS), impulsadas por el Gobierno de coalición del primer ministro David Cameron. La propuesta legislativa recibió 321 votos a favor y 235 en contra, luego de un debate de más de seis horas.
Durante una intervención ante la Cámara de los Comunes, el ministro de Salud, Andrew Lansley, afirmó que los cambios harán que el NHS esté preparado para las demandas del siglo XXI.
Por su parte, la representación laborista, principal de la oposición, estimó lo contrario y afirmó que la apertura a un mercado político llevará a la destrucción del sistema de salud en el país.
Antes de la aprobación de la reforma, el Comité de Sanidad del Parlamento consideró que los cambios son necesarios, pero reprochó los plazos propuestos para aplicar medidas, dirigidas a ahorrar 20 000 millones de libras esterlinas, unos 23 600 millones de euros, antes del 2014.
Cameron, por su parte, defendió su propuesta y afirmó que ésta reduciría las trabas burocráticas y mejoraría el tratamiento a los pacientes. Es imposible aplazar por más tiempo cambios en profundidad del sistema sanitario, dijo el primer ministro, quien incursiona ahora en áreas en las cuales gobernantes anteriores fracasaron.
Entre otras reformas, el Gobierno pretende eliminar los actuales organismos burocráticos que controlan el gasto y dejar a los médicos de familia encargados de trámites para distribución de fondos y de la compra de servicios para sus pacientes. También facilitaría a compañías privadas, instituciones de caridad y empresas sociales a participar en la licitación de contratos para el NHS.
Varias asociaciones y sindicatos profesionales, entre ellos, la Asociación Médica Británica y el Colegio Real de Enfermería, publicaron una carta en el diario The Times, en la cual expresaron que los cambios son \»extremadamente riesgosos y potencialmente desastrosos\».
Londres, febrero 2/2011 (PL)
Comments
Noticias anteriores a 2010
Suscripción AL Día
