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El Departamento de Servicios Humanos y de la Salud de Estados Unidos (Human Health Services, HHS) anunció hoy una estrategia federal para ayudar a las empresas biotecnológicas a desarrollar nuevos medicamentos y vacunas que aceleren la respuesta del país a nuevos brotes y pandemias.El plan, que podría incluir una reforma de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), comenzó a diseñarse poco después de la aparición de la epidemia de gripe A en abril del 2009, cuya respuesta recibió críticas por la demora en la fabricación y distribución de las vacunas.
\»Nuestro país debe tener un sistema lo suficientemente flexible como para producir respuestas rápidas ante cualquier ataque o amenaza, tanto si las conocemos como si son nuevas\», dijo Kathleen Sebelius, secretaria de Salud, en un comunicado.
La estrategia, que requiere un desembolso inicial de 2000 millones de dólares, prevé realizar una inversión significativa en la FDA, que permita agilizar la revisión y la aprobación de los nuevos descubrimientos.
Además, contempla la creación de una empresa de inversión estratégica independiente que ayude a las pequeñas compañías \»innovadoras\» a atraer inversores privados para poder desarrollar vacunas y otros productos. Esas pequeñas firmas podrán hacer llegar sus productos al mercado gracias a la creación, en los Institutos Nacionales de la Salud (NIH), de los llamados \»equipos de sherpas\», que \»identificarán las investigaciones más prometedoras para facilitar su traducción en vacunas, medicinas y tratamientos\».
Un cuarto punto de la estrategia apunta al establecimiento de \»Centros de Innovación para el Desarrollo y Manufacturado Avanzados\», que crearán plataformas de manufacturado para agilizar la cadena de producción de medicamentos y vacunas.
En concreto, el Departamento de Salud dará prioridad a la actualización del sistema de manufacturado de las vacunas contra la gripe.
La estrategia redefine el programa de respuesta biotecnológica existente hasta ahora, llamado BioShield, que en los últimos meses recibió críticas de la administración del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y de muchos legisladores, hasta el punto de que algunos propusieron recortar su financiamiento en 2000 millones de dólares.
\»Las cinco iniciativas de este plan llevarán al mercado más productos que pueden salvar vidas, lo que permitirá que programas cruciales como BioShield funcionen como deberían hacerlo\», señaló Sebelius.
La secretaria de Salud confirmó que BioShield seguirá cumpliendo su función de certificar al sector privado que el gobierno federal comprará los medicamentos que desarrollen, al tiempo que las inversiones ayudan a las pequeñas empresas que no pueden permitirse llegar a la fase de desarrollo.
\»Si nos movemos hacia una empresa del siglo XXI orientada hacia los descubrimientos, con una regulación clara y con un proceso de manufactura ágil, podremos responder más rápida y eficientemente a las amenazas para la salud pública\», subrayó Sebelius.
Washington, agosto 19/2010 (EFE)